He vivido toda la vida en el barrio, y hace unas semanas entré a esta tienda mas por curiosidad que por ganas de comprar. Para mi sorpresa me encanto la tienda, esta decorada con un toque fresco vintage, con toques clásicos y modernos. En cuanto a la ropa, hay muchísima variedad, y esta colocada ordenadamente, lo que facilita en gran medida la visión de todas la prendas. Hay ropas de todas las edades, mi madre se compró un pantalón y una blusa, y yo me enamoré de una falda y de un short. La verdad es que hay mucha variedad y las prendas están bien acabadas y sobre todo son muy económicas! Casi diría anticrisis! Por último, he de añadir que el trato fue inmejorable por parte del personal de la tienda. La dueña es agradable y joven, atenta y cuidadosa con su trabajo, y sobre todo te hace sentir a gusto mientras compras, lejos de esas dependientas que te agobian todo el rato. En resumen, repetiré!!! Encantada de que esté a un paso de mi casa!