Madera

El bar Madera tiene todo el aspecto de un pub inglés, escocés o irlandés. Pero el ambiente no le acompaña.
La mayoría de su clientela es más pija de lo que a mí me gustaría. Quizás ha sido coincidencia o he tenido mala suerte, pero las últimas veces me han entrado ganas de preguntarle a más de uno, que no paraba de mirarnos de arriba a abajo, «Perdona, ¿nos conocemos?. No sé si será porque al ser mi hijo mulato, mi mujer negra y yo un tío muy grande con barba, llamamos mucho la atención, pero la verdad es que esto no suele pasarnos casi en ningún sitio, excepto aquí…¿serán miembros de alguna sociedad secreta…
La verdad es que seguimos yendo por flojera. Está al lado de «Casa Fijo», un bar de cervecitas y tapitas por el que solemos parar bastante y a veces, después de tapear, los más cómodo es dar unos pasos y pedirnos una copita en el bar Madera, fuera en las mesas altas.
Objetivamente no está mal, pero no es mi sitio preferido.

Entre bares típicamente sevillanos y tiradores de cerveza destaca este pub, Madera, con un estilo muy distinto. Su decoración y estética nos transportan de lleno a cualquier bar nortemericano, al estilo del que tantas veces vemos en las películas. Si eres amante de este tipo de ambientación, algo diferente a lo que suele verse, Madera sin duda te encantará.
En su interior tiene sillones, aparte de algunas mesas y sillas altas y las que están situadas en la barra, por lo que es un sitio estupendo para disfrutar de una tarde con los amigos o de una noche de copas tranquila, lejos del bullicios de otras zonas más concurridas. Además, buena música, para variar: rock y country con un sabor muy clásico.
Desde que llegué a la zona, Madera se ha convertido en uno de mis bares favoritos, sobre todo por ese ambiente tan distinto al resto, esa personalidad y carisma tan marcados que lo hacen especial. Muy recomendable si, como yo, es lo que buscas en un local.