La Calzada

Es una cervecería de barrio, de las de toda la vida, un poco escondida por su ubicación, pero se encuentra fácilmente.
Sirve desayunos a precios muy económicos, y con buena calidad. El pan está buenísimo y el relleno (jamón, york,…) no desmerece en absoluto.
Al medio día y por la noche ofrecen tanto tapas, como platos y montaítos. Renueva frecuentemente la carta y ofrece siempre alguna oferta, como por ejemplo regalando un montaíto o bajando los precios del botellín al comprar un cubo con varios.
Es un lugar idóneo tanto para desayunar como para disfrutar de los partidos de fútbol en sus dos pantallas.

Antes de la Cervecería y de la Bodega San Benito, Manolo Arias abrió en el barrio un primer negocio: La Calzada. Puede que para los clientes de fuera de la zona los otros dos sean más estimados, pero para la gente de la antigua Viña este bar es un símbolo y un lugar de reunión en sus días grandes.
Me hablan maravillas de sus desayunos, que aún no he probado, pero sí que lo he frecuentado a la hora del montadito y la cerveza. Más de un viernes de estudios recogimos los bártulos y terminamos porraceando allí, lo cual era sinónimo de posterior siestazo y fin de la jornada de apuntes. En el salón de arriba, no muy grande pero suficiente para albergar un buen grupo de amigos, celebramos una comida de Navidad de la que guardo grandes recuerdos.
Hoy, La Calzada se está erigiendo como el bar futbolero del barrio. Cada partido de los equipos sevillanos y no sevillanos son más las personas que acuden a ver el fútbol allí. Tan es así, que me cuentan que en ella acaba de nacer quizá la más joven de las peñas béticas; una peña que ya ha cruzado la piel de toro, para acompañar a su equipo a tierras cántabras, y que promete hacerlo muchas veces más.

Posiblemente no sea el mejor y el establecimiento quede solapado por grandes pesos pesados que están en Luis Montoto como El Jota o la cervecería San Benito, pero en una pequeña bocacalle junto a la librería interbook se encuentra ese acogedor bar.
Es una cervecería de barrio, de las de toda la vida y la clientela es gente de la zona que habitualmente toman algo allí aunque por lo que más destaca es por los desayunos que ponen (que quitan el sentido). Desde la básica con aceite o margarina. pasando por pringá casera, manteca de lomo hasta chorizo y jamón ibérico. Los precios de las tostadas con café la verdad que merecen la pena porque son bastante baratos. Puedes tomar un café con entera por 1,80 € (la más barata aunque por algo más puedes ponerle más gracia a la tostada).
La comida no es que sea increible pero cumple su función cuando se tiene apetito. Un lugar de batalla al que acudir si buscar algo barato.