Kamala Matsuno es japonesa, una mujer súper alegre que da unos masajes que quitan el hipo. Mejor dicho, te dejan tan relajada que no puedes dejar de bostezar. Está especializada en Arun Tacto Consciente, que es una práctica estupenda que se define como terapia meditativa a través del tacto. Su formación como masajista es completa y variada, estuvo en la india, integra técnica craneo-sacral y tiene ese bagaje de sabiduría, que solo tienen las personas que han tocado muchos cuerpos. Esto sí, no es un masaje para recuperar movilidad o trabajar lesiones físicas, al menos como único tratamiento. Su toque es poco invasivo y se centra mucho en la respiración de la persona que recibe el masaje. La conocí en una actividad de formación de aproximación al Arun, en la que trabajamos la respiración, el tacto consciente y la consciencia corporal. Si tenéis alguna oprtunidad de regalaros una de estas formaciones, aunque no queráis ser profesionales del masaje, os lo recomiendo. El aprendizaje es brutal. Además, Kamala sabe mucho de alimentación, practica yoga y en general, tiene muchos conocimientos sobre salud holística y desarrollo personal. En el último cumpleaños de mi amiga Ana, el regalamos un masaje con ella y fuimos a recogerla a la salida… venía con una carita de estar en el cielo!!!