Fresa

Si os gusta lo barato pero de infima calidad este es vuestro sitio. Los helados no saben mucho y sobre todo los pasteles estan tiesos y no lo entiendo porque su obrador esta abajo de la cafeteria. Tienen ofertas buenas, pero volvemos a lo mismo, prefiero gastarme 1 € mas y comer mejor, la de al lado, la pradera aunq se aspecto sea mucho peor porque le hace falta un toque moderno, es mucho mejor.

He estado un par de veces aquí sobretodo en invierno por eso de tener mesas dentro, sin embargo a mi no merece la pena… los pasteles están bastante tiesos, la nata de los batidos helados es de bote y no es que echen mucha… además los helados son artesanos… si,
.implica que sean buenos… sinceramente algunos pasos más hacia adelante está otra pastelería que aunque no tiene mesas dentro los. pasteles son infinitamente mejores, la nata la echan.en.abundancia y además casera, los helados… se dejan comer mAs que estos.
la calidad de La Fresa es mucho inferior a esta que os. comento, buscad mi. comentario de La Pradera de Gran Plaza… y probad a entrar sólo una vez… vosotros podreia ser jueces

Era domingo, y a mis padres les dio por salir a comer por ahí. Estuvimos en un restaurante cerca de la Gran Plaza. Después de la comida, estuvimos dando un paseo por la zona, buscando un sitio en el que tomar un pastelito para el postre y el cafelito. Mi hermana pequeña se empeñó en entrar en el esta cafetería, más que nada por el nombre, que le pareció lo más.
Desde fuera engaña. Mucho. Es mucho más grande de lo que parece. Y también mucho más acogedora. No es una cafetería fría, sin personalidad. El interior es muy acogedor. Aquel día hacía un frío que pelaba, y dentro se estaba la mar de calentito. El olor a dulce que flota en el ambiente, también ayuda mucho a reforzar esa sensación.
Y los pasteles también ayudan. Vaya si ayudan. Para empezar porque no sabes qué elegir de tanta variedad como hay. De todo tipo, tamaño, formas, colores, sabores… Yo me decanté por un trozo de una tarta de chocolate que tenía una pinta buenísima y que sabía mucho mejor (eso en la primera ronda, porque hubo más de una). Quise pedir un helado de naranja, que me vuelven loco, pero cuando me recordaron el frío que hacía en la calle, se me pasaron inmediatamente las ganas.
Aquel día no recuerdo qué pedí para almorzar. Los recuerdos de antes de entrar en esta cafetería se ha difuminado. El recuerdo de aquella tarta de chocolate se ha encargado de hacerlo.

Siendo del mismo grupo empresarial que El Toboso, la Cafetería-​Heladería Fresa no tiene absolutamente nada que ver. Para empezar cuando te sientas en sus veladores o en las mesas interiores el ambiente es mucho más confortable, más acorde con la zona en que está ubicado. La atención al cliente es correcta e incluso cercana, cosa que también se agradece.
Respecto a la calidad de los productos debo reconocer que es muy alta. Tanto la bollería propia como las tartas son exquisitas. De hecho tengo conocidos en la zona que acuden siempre a Fresa cuando tienen un evento para comprar sus tartas porque las venden también para llevar. A mi, no obstante, lo que más me gusta es su faceta de heladería. Tanto los helados, artesanales, como los batidos que preparan valen lo que pagas por ellos. De los mejores que he probado en Sevilla.
Aparte de todo esto, su ubicación es inmejorable así que viene bien después de ir de compras por Pickman o si has estado paseando por Nervión es un sitio ideal para descansar y recargar fuerzas. Como la Gran Plaza no puede estar mejor comunicada por autobuses y metro, recomiendo ir en transporte público. Y como sitio para quedar, también es genial: fácil de encontrar, no demasiado caro y tranquilo.