Flores de Sevilla

Pocas veces en mi vida me han regalado un ramo de flores. En una ocasión un mensajero apareció en mi trabajo con una docena de rosas rojas en un ramo impresionantemente grande. Además tuvo que pasar por delante de más de 200 de mis compañeros de trabajo, así que el corte que pasé fue mayúsculo. Como me gustó tantísimo la presentación le insistí a mi chico para que me contara dónde lo había encargado. No me lo dijo.
Hasta que un día íbamos paseando por la zona y yo estaba algo triste porque mi madre estaba pasando por un mal momento. Al pasar delante de Flores de Sevilla, mi chico me dijo «aquí te compré el ramo» e intuí enseguida lo que me quería decir. Cuando entramos, para mi sorpresa, no vendían solo ramos sino que tenían todo tipo de plantas y mi madre es muy aficionada a ellas. Me ayudaron a escoger alguna con flor especialmente hermosa y colorida. Fue todo un acierto, a mi madre le encantó, le alegré el día y de hecho todavíà la conserva. Así que un diez por su profesionalidad.

Siempre había visto este «quiosco» de flores ahí, pero jamás había entrado. De hecho lo presentía más cutre, más pequeño, más quiosquillo. Pero cuando fui por primera vez comprobé que no tenía nada que ver con lo que yo me imaginaba.
Flores de Sevilla es una gran floristería, aunque engañe su apariencia. La persona que me atendió era un experto conocedor en el ramo (nunca mejor dicho) y me asesoró a la perfección sobre lo que estaba buscando. Tenían cantidad de catálogos y hasta videos y fotos que me enseñó en el ordenador…
Una vez más me sorprendió algo que esperaba diferente y, como me gusta que me sorprendan, ¡pienso volver a la mínima que se encarte hacer un regalo tan bonito y especial! ¿Hay algo más enternecedor que regalar o te regalen flores?
Los precios me parecieron algo altos, aunque luego comparando con otros lugares y teniendo en cuenta la calidad que aquí ofrecían, ¡creo que son considerables!

…ay el amor y los olvidos!
Este año no, pero el año pasado mi queridísimo marido se olvidó de mi cumpleaños…oooo!!!
No sé para muchos, pero para mí el día de mi cumpleaños es un día muy especial. Por lo general ando un poco depre y contentilla a la vez (sentimientos encontrados) sobre todo por ver con qué me van a sorprender ese año.
A mi marido siempre le ha gustado hacerme fiestas sorpresas, me acuerdo que un año que reunió a un montón de amigos míos en un concierto en el río (me encantó), … En mi treinta y pico cumpleaños, y para que luego no me diga que soy una «revienta sorpresas», estuve esperando todo el día, con mi boquita callada, a mi regalo y a mi fiesta sorpresa, hasta que a las ocho de la tarde, su madre que me llamó para felicitarme, se lo recordó…No veas como me sentía de mal. y él!
Al día siguiente recibí en casa media docena de rosas rojas de «Flores de Sevilla»…impresionantes de bonita. Eso fue un buen comienzo para perdonarle.
Al final, lo perdoné y aún sigo con él. No se le ha vuelto a olvidar mi cumple.
P.D. Paso todos los viernes por la tarde junto al Kiosco de las Flores y el olor que desprende a hierba fresca y los centros de flores, qué cosas tan bonitas!
es, qué cosas tan bonitas!