El Turco

Uno de los mejores kebabs que he probado. El rollo de ternera es una gozada, y el menú con bebida (de lata) y patatas por poco más de 5 € está genial y terminas bien saciado. Se echan de menos más locales como éste en la zona de empresariales. Es una zona universitaria, pero hay pocos locales de comida rápida, barata y de calidad como éste.
Como decía antes, mi favorito es el rollo de ternera, aunque el vegetal también está riquísimo. Tampoco está de más probar su delicioso hummus de garbanzos, para matar el gusanillo en su terraza con una cervecita o un refresco. Un plan genial para los que tenemos turno de tarde en las facultades aledañas, cuando se acerca el verano y al caer la tarde sólo apetece estar en la calle.
Lo mejor: precio, calidad, rapidez y buena atención por parte de sus empleados.
Lo peor: salvo en invierno, cuando incluso se agradece, el interior del local es demasiado pequeño y muy caluroso. Pero en general el tiempo en Sevilla pide calle, y en esta terraza se está muy bien.
Además, su comida no es precisamente para quienes están de dieta…

Mi kebab favorito en Sevilla. Siempre me pido menú rollo de ternera que incluye patatas fritas y lata de coca cola por 5,40 euros. Más sano que una hamburguesa del burguer king. El único pero es que no admite tarjetas para pagar.

Opción para comer rápido y barato más allá de los «restaurantes» de hamburguesas y los rollitos de primavera. Tiene tanto terraza como mesas en el interior aunque no recomiendo este último por el calor que desprenden los kebabs. Un menú kebab con bebida (Lata) y patatas cuesta 5’50 €.
–Lo mejor: El precio.
–Lo peor: No te llevan la comida a domicilio. No esperes comida dietética.

Sé que hay mucha gente algo reacia a la comida turca, tipo kebab y demás variaciones del estilo. Yo me declaro totalmente amante de la cocina fuera de lo común o alejada a la nuestra. Como mujer inquieta que soy, mis inquietudes también saltan al plato y se cuelan en cualquier cocina. Todo lo que sea probar algo nuevo provoca en mí un subidón de adrenalina que me apasiona. Y mi paladar que es benevolente para con mis cambios gastronómicos, me lo suele agradecer en demasía.
En el caso de la comida turca fue amor al instante. Pero no de estos enamoramientos de dos días, sino más bien de relación duradera. Si hay algo que me chifle más que el kebab (que está buenísimo) es la pizza turca. Esa masa con especias liada como un rollito y rellena de pollo, ensalada, cebolla, tomate y Dios sabe qué mas condimentos; me obnuviló. Y si encima reparas en lo barata que te sale la explosión turca de sabores (unos cuatro euros), dime pues: ¡qué más quieres chiquillo!
Este establecimiento lo tienes en la zona de Viapol, así que seas estudiante, trabajador o viandante dentro o en los aledaños, ¡a qué esperas para entrar! Lo tuyo lo mismo se queda en enamoramiento, pero es tan bonito todo al principio.

Este restaurante tiene ya muchos años a sus espaldas (no hay más que fijarse con detalle en el estado del cartel o de la fachada). Es uno de los veteranos de la zona de Empresariales en la noble tarea de alimentar a los siempre sufridos estudiantes, que, ya se sabe, miran la comida con los bolsillos y no con los ojos en determinadas etapas que todos hemos pasado/​sufrido.
En este caso, El Turco, especializado en kebabs, llegó, vio y venció. Es una de las pocas ofertas de la zona de comida rápida y barata; sí, hay muchos bares para tapeo, y no son excesivamente caros, pero les falta ese toque de «comida veloz antes de entrar en clase». Algo que puede encontrarse a patadas en la zona de Reina Mercedes, por ejemplo, y que en cambio en los alrededores de Empresariales no tanto (tienes que adentrarte un poco más en Viapol, y ya vas perdiendo un tiempo precioso).
El interior es agradable y de aspecto pulcro, y los kebabs cumplen con su cometido. A mí me parecen bastante buenos, reconociendo que no soy precisamente una experta en esta especialidad culinaria; al menos entran muy bien en el cuerpo… y en la cartera.