El Rascacielos

…nunca New York ha estado tan cerca!
No voy a hablar de ningún edificio emblemático de los E.E. U. U, algún día lo hare, pero sí comentar este pequeñito negocio de toda la vida. Como pone en su cartel Antonio lleva abierto desde el año treinta y siete, nada menos que 74 años.
Yo que he paseado por esta calle millones de veces, siempre lo he visto abierto, y cuando tenia problemas con los aparatos de casa, sobre todo ese calefactor de rodillo antiguo que teníamos, que de un día para otro se averiaba, lo llevábamos allí siempre y nos lo dejaban como nuevo para otra temporada., Y me acuerdo que siempre nos decía, tened cuidado, no lo tengáis el termostato al máximo, que se os puede quemar, pero mis hermanas y yo, ni caso, a tope el calentito!
Y otra vez, a llevárselo a Antonio, hasta que un día murió (el aparato!!) y pasamos a las modernidades, estufa de gas, jejeje! (¡Vivan las catalíticas!).
Desde esos días, en nuestro pisito del Arenal, no hemos vuelto a ir, pero sigo pasando muchos días y me alegra ver que sigue abierto. Si tenéis problemas con cualquier aparato eléctrico llevarlo allí, y para cualquier comprilla, pues lo mismo, que hay que hacer que celebren su 75 aniversario, no?

He aquí una de las tiendas con mayor solera de toda Sevilla. No sé cuántos años tendrá el rótulo de su fachada, pero antiguo sí que es. Aquí es donde siempre hemos acudido cada vez que en mi casa se estropea un electrodoméstico. Hemos llevado batidoras, planchas, aspiradores,… Todo aparatito susceptible de tener un fallo y que no tienes ni idea de qué podría ser, allí te lo arreglan. Yo no sé qué titulación tienen estos señores o dónde se habrán formado, pero ni McGyver podría conseguir lo que ellos hacen.
El aspecto de la tienda es tremendamente cutre, pero no te dejes llevar por las apariencias, las reparaciones son impecables y rapidísimos. Esa frase famosa de: «Señora, esto tenemos que pedir la pieza en Barcelona y va a tardar veinte días» no lo vas a escuchar allí. Como te descuides te lo resuelven en el acto (por ejemplo, lo último que les llevé, el mando a distancia del garaje).
Muchos seguro tenemos algún electrodoméstico buenísimo que compramos hace 20 años y, de repente, deja de funcionar. Piensas que arreglarlo puede ser igual o más caro que comprar uno nuevo, ¿verdad? Pues ve a El Rascacielos y comprobarás que estás equivocado. No resucitan muertos, pero evitarás las horrorosas barreras de los servicios técnicos de las marcas y tendrás tu aparato como el primer día. Eso es efectividad.