Cubiertas de la Catedral

No le puedo poner menos estrellas porque la visita me pareció una experiencia sensacional. Aún no estaba en Unilocal cuando organizaron un evento en 2013 para hacer la visita guiada, así que la realicé reservando por mi cuenta, animada después de leer algunas reseñas como la de Paco R, que reseñó justo antes de ir yo, y su reseña hizo decidirme del todo. Yo fui en noviembre porque me parece buena fecha, ya no hace calor, pero tampoco frío excesivo.
La visita puede reservarse desde la web, en turnos de lunes a viernes y de fines de semana. Cuesta 12 euros con guía y dura 1 hora y media aproximadamente. 12 euros muy bien aprovechados, experiencia totalmente recomendable y para repetir, las vistas son espectaculares.
Poco más puedo añadir después de las geniales y útiles reseñas de los Unilocalers, sólo digo que echéis un ojo a las espectaculares fotos en la ficha, y os animéis a ir!

#LunesDeReseña «Invadido por el síndrome de Stendhal»
Iniciamos nuestra visita desde la puerta de San Miguel. Puerta custodiada por los cuatro evangelistas que a excepción de San Juan, que está mirando la escena del nacimiento de Cristo, los tres restantes se encuentran mirándote directamente a los ojos, como si estuviesen intentando vislumbrar si serás lo suficientemente instruido y audaz para valorar y descifrar todos los tesoros, obras de arte, historias y misterios que se albergan justo pasado el umbral.
Una vez en el interior, el guía pronunció una breve introducción sobre el terreno dónde se asentaba la catedral. Finalizada esta, soltó varias preguntas al aire: -¿Conocéis el verdadero nombre de la Catedral? — ¿Alguien sabe por qué se dice que es la tercera mayor catedral del mundo cuando en el libro Guinness de los record aparece como la primera?-.
Conocidas las respuestas, nos fuimos hacia una pequeña puerta, tras la cual se escondía una estrecha y sombría escalera de caracol de incómodos peldaños por la que iniciamos la subida hasta el primer nivel. Una vez allí y con vistas al altar mayor, nuestro guía volvió a realizarnos varias preguntas: -¿Sabéis por qué esta catedral empezó a construirse desde los pies a la cabecera, al contrario de lo habitual?-. y -¿Por qué siendo el altar mayor la parte más importante de todos los templos cristianos, en esta catedral, es la zona más penumbrosa? Esas preguntas le sirvieron de entradilla para narrarnos como la lucha de poder entre la Iglesia y la jerarquía reinante estuvo constantemente presente durante toda su construcción, dándonos varias referencias y evidencias que se contemplaban perfectamente en el templo.
Seguimos el ascenso hasta llegar a un pasillo exterior justo delante del Rosetón de la Catedral, cuyo impresionante diámetro nos dejó perplejos. A continuación nos adentramos en el templo, esta vez, para cruzar la planta por un pasillo lateral.
No os podéis ni imaginar la sensación tan extraordinaria que es poder pasar justo por el lado de las vidrieras que tamizan el interior de la catedral mientras contemplas las bóvedas estrelladas que cubren el techo y los ángeles de madera que cuelgan a esa altura dando sombra a los órganos de la Catedral. Durante esa travesía no pude soltar palabra, ya que estaba totalmente embobado e invadido por el síndrome de Stendhal.
Terminado el periplo interior salimos de nuevo a la luz, y esta vez, a las esperadas cubiertas de la Catedral. Mientras dábamos los primeros pasos por aquel suelo ondulante, la voz del guía volvió a interrumpir: -¿Por qué las cubiertas de la Catedral funcionan como una enorme azotea y no como un tejado al igual que las demás Catedrales góticas de Europa? — ¿Qué función tienen esas especies de «setas» que se reparten por toda la cubierta?-. -¿Por qué hay restos de tinajas apiladas en algunas esquinas?.
Resueltas las cuestiones, y como colofón al paseo por la cubierta de la Catedral, llegamos hasta la cúpula Real, dónde los más atrevidos subimos hasta «la linterna» y disfrutamos de la excepcional y privilegiada perspectiva que desde allí se tiene de nuestra torre vigía y de nuestra ciudad.
Por último, durante el descenso, el guía se detuvo en varias ocasiones para explicarnos el significado de algunos símbolos y marcas talladas sobre algunas piedra -¿Simples firmas de los canteros? ¿Símbolos masónicos?.
En definitiva visita muy recomendada, por no decir obligada, ya que el recorrido por los entresijos del templo y posterior paseo por las cubiertas dan una experiencia mucho más enriquecedora de los dos monumentos insignias de la ciudad.
Para realizar la reserva a las cubiertas hay que hacerlo en la página web:
Para una mayor información llamar al teléfono 902 099 692 o enviar un e-​mail a

Creo que en todo Unilocal no hay mejor lugar para dedicarle mi reseña número 100, al menos así lo siento y así lo creo. Desde el inicio del recorrido hasta el final en aproximadamente hora y media de paseo estarás con la boca abierta y te costará trabajo acaparar toda la belleza que abarquen tus ojos.
Este tipo de visitas ya la he realizado en varias catedrales, pero no tienen comparación con esta. Perdonen pero estamos ante la iglesia más grande del mundo en superficie (10.000 m2), que no os engañen diciendo que es la tercera ya que en superficie no tiene rival, y tiene muchos siglos de historia. En su interior alberga las tumbas de tres reyes y hasta los restos del mismísimo Cristobal Colón.
Tras una breve explicación por la parte baja del templo, comienzas a subir haciendo varias paradas y el guía que dirige el camino narra todo el proceso por el que se construyó la Catedral haciendo referencia a su contexto socio-​cultural, histórico y político con datos bastante curiosos que seguro te enseñan algo.
La visita no es solo histórica ya que quizá lo más impresionante son las vistas que se tienen de la ciudad, así como la posibilidad de observar con detalle las vidrieras y ornamentación de los techos que rara vez puedes imaginar desde abajo. También tienes la oportunidad de escuchar el repique de campanas a escasos metros de la Giralda. En mi opinión la mejor hora para realizar la visita es a las 17 h. ya que comienzas la visita con bastante luz y la terminas con el atardecer.
Para realizar la visita es necesario reservar y cabe destacar que han de ser en grupos de 10 mínimo para que se pueda realizar. Toda la info en
PD: Se recomienda llevar babero o cubo por si las moscas.

Imprescindible conocer Sevilla desde un punto de vista único. Es una ruta tan especial, tan mágica y tan irrepetible que lo recomendaré siempre a todo el que la pueda realizar. Apenas cuesta 12 euros la visita, con un guía especializado y es de una hora y media aproximadamente. Lo que yo te diga: imprescindible.
Desde los rincones más perdidos hasta las vistas más maravillosas de Sevilla y la Giralda, la visita por las Cubiertas de la Catedral nos ofrece una experiencia especial que todo sevillano debería vivir al menos una vez (yo ya llevo dos) y que no debería limitarse sólo a turistas.
Hay que reservar con semanas de antelación y conseguir un grupo considerable, pero merece la pena. Todo lo que diga es poco. Si no, mirad las fotos que acompañan a esta reseña, realizadas por Alex R, un Élite que nos acompañó en la última visita que hicimos con Unilocal en la que vinimos 25 personas ;)

Visitar las cubiertas de la Catedral de Sevilla es una experiencia única, esencial para darnos cuenta de las maravillas que tiene nuestra ciudad.
El recorrido comienza dentro del edificio, donde el guía da un repaso a la historia de la Catedral y nos muestra la parte interior de lo que pronto veremos en el exterior. Realmente, es alucinante ir subiendo y observamos de cerca todo lo que vemos a diario sin darnos cuenta al pasar por los aledaños. Las gárgolas, las increíbles bóvedas, todos los escondrijos… y las vistas. Pudimos disfrutar del atardecer allá arriba y de cómo el sol iba cayendo sobre los edificios más bellos de Sevilla. Impagable.

Ha sido increíble.
Iba con unas ganas tremendas y un «hype» (como dicen los modernos) altísimo pero lo ha superado con creces.
Estamos acostumbrados a ver esta monumental construcción desde fuera pero ver Sevilla desde ella es una preciosidad. Las vistas, los edificios, la magia que esconde la Catedral.
Sin duda una de las mejores experiencias que he tenido en mucho tiempo en cuanto a visitas a monumentos se refiere. Algo que recomiendo a todos los sevillanos y turistas.

Sin palabras.
Una visita magnífica con unas vistas que te dejan alucinad@ gracias al evento de Unilocal: D Pasamos un rato muy agradable, subiendo por esas pequeñas escaleras de caracol y admirando no solo la Catedral más de cerca aún sino unas preciosas vistas de la ciudad de Sevilla (incluyendo el barco pasando con el puente de las Delicias abierto!!!).
Para visitar las cubiertas hay que apuntarse a la lista de espera, pero aseguro que merece la pena. Si tienes ocasión, no lo dudes!

¡ESPECTACULAR!
Siempre acostumbrado a ver algo tan grande, tan histórico y tan bonito desde el suelo, cuando te ofrecen la opción de verlo desde otra perspectiva ¡hay que aprovecharla!
Llevaba muchos intentos fallidos y gracias a Unilocal pude subir por fin. Si os surge la ocasión, ni os lo plantéis, ajustar la agenda y del tirón «parriba»
Puedes ver toda Sevilla desde un punto de vista privilegiado, conoces aun más la historia del edificio gracias al guía y si eres más atrevido que yo, conseguirás fotos y vistas aún mejores que el resto. Cuando estás arriba recuerdas que las alturas no son tu sitio preferido (al menos en mi caso) por lo que las fotos y asomarse a determinados sitios se convierte en una aventura comparable a hacer escalada o «puenting» (¿¡exagerado de qué!?)
En resumen y pamplinas aparte, sitio obligado de visita :)

Sin lugar a dudas la mejor forma de ver la ciudad desde lo alto, aquellos que hayáis subido a la Torre Pelli o la Torre Schrindler, incluso a la giralda diréis ” Buah! si yo ya he visto Sevilla desde lo alto!!” Pues te equivocas! jeje si son puntos más altos pero las torres no están en el centro así que sirven para ver la ciudad desde fuera no desde sus entrañas y la giralda está muy bien pero no tiene el mismo perímetro. Las vistas desde los diferentes paños de la cubierta para mi, a día de hoy reinan.
Increíble la historia de la catedral en sí la cantería el esfuerzo de aquellos señores que con poco más que maderos, martillos, cinceles y roca crearon esa maravilla de la arquitectura. Un visita muy cultural indispensable para todas las personas que sientan curiosidad hacia la historia, el arte, la arquitectura, la ingeniería…
Cuesta 12 € y hay que subir y bajan escaleras de caracol largas y estrechas por lo que a lo mejor no esta disponible a todos los bolsillos o personas. No se si dejan subir a los niños, pero si tus hijos tienen un buen comportamiento y te los dejan subir llévalos! van a flipar!
Animo encarecidamente a que todo aquel que pueda aprovecha esta oportunidad que ofrece la ciudad.

Si hay palabras que definan la visita a las cubiertas de la catedral serían «oportunidad histórica». Sin duda una experiencia muy aconsejable, seas de Sevilla o no. Lugares misteriosos, ocultos, casi mágicos… que se presentan a lo largo del recorrido siempre acompañados de un guía. Unas vistas espectaculares de la ciudad. No puedo esperar para ver las fotos que pude hacer.

Visita imprescindible en todos los sentidos. En primer lugar el guía explica detalles muy curiosos sobre la edificación de, posiblemente, el monumento más importante de Sevilla y una de las catedrales más importantes del mundo.
Posteriormente la visita, tanto en el interior de la Catedral como en las cubiertas es espectacular. Las vistas de la que podréis disfrutar no tienen precio (bueno si, 12 euros). Debería ser de obligado cumplimiento cuando estás o viven en la ciudad.
Para reservar tienes que entrar en la página web del Cabildo y reservar para el día que quieras, obviamente. Yo lo hice con más de un mes de antelación ya que difícilmente podrás de un día para otro. Los grupos suelen ser de unas 20 – 25 personas.