Cocinas 2000

Todo el mundo te recomienda Cocinas 2000, así que cuando tienes que montar la cocina de tu piso te pasas a ver si son ciertos tantos halagos. Y la verdad es que, en parte. Conseguimos cuadrar el trabajo de mi chico con una visita a esta tienda y lo primero que pudimos comprobar es que se tiran muchísimo tiempo con cada cliente, cosa que no digo como crítica. Cuando por fin nos tocó llevábamos preparado el plano de la cocina con más o menos una idea de lo que queríamos. Fue de las primeras tiendas de cocinas a la que fuimos así que tampoco lo teníamos claro del todo, queríamos que nos aconsejara.
Debo decir que ese día salí de la tienda pensando que compraríà la cocina allí, si bien es cierto que no me convencíà la distribución que nos había propuesto para la cocina. Nos había metido una columna de horno y microondas al lado del frigorífico, lo que nos dejaba sin encimera ninguna prácticamente. Para cocinar y secar los platos teníamos que usar el mismo sitio. Pero, pese a eso, el trato me convenció tanto que hasta me lo planteé.
Cuando ya habíamos mirado muchas más tiendas me di cuenta de que ni los precios eran tan bajos ni la distribución tan buena. No sé, supongo que en nuestro caso no nos dieron en el clavo de lo que queríamos aunque reconozco que la idea de meter un horno más pequeño de lo normal si que la tomamos de su propuesta. Tampoco me convenció a la larga el material que me proponían en Cocina 2000 para los muebles de la cocina cuando vi que podía poner tablero marino por casi el mismo precio. Al fin de al cabo, la cocina se pone para toda la vida así que mejor materiales que te duren ese tiempo.

Si hago un recorrido por mi vida, en el ochenta por ciento de ella nunca he tenido microondas. Puedo asegurar que se puede vivir sin él. Aunque no todos piensan lo mismo. Mi chica es una de ellas. Es lo que tiene tener asistenta desde pequeña que calentarse la leche en un cazo es mucho hacer. De hecho cuando vió por primera vez a su madre calentándola sin este electrodoméstico le dijo asustada «mamá qué haces friendo la leche».
Desde que estamos juntos siempre me está pidiendo que compremos uno. Que si es necesario, que así ensuciamos muchos menos cacharros. La cuestión es que lleva mirando en internet precios de las grandes tiendas, y lo cierto es que no es muy caro.
Pasamos por el escaparate y vimos apilados pero muy bien montados muchos electrodomésticos de cocina y no sólo de ésta. Entramos en plan curioseo y vimos nada más entrar en medio de todo muchos microondas, hornos pequeños, hornos microondas. Estaban muy bien de precio. Bueno las primeras marcas como siempre caras, pero habían varias de ellas muy poco conocidas que por cincuenta euros tenían muy buena pinta.
Al final una vez más conseguí aplazar la compra, el final de mes me ayudó a preparar mi excusa. No salí con las manos vacías, me compré unos cascos de música de Philips por sólo 5 euros. Tiene gracia comprarse esto en una tienda que se llama Cocinas 2000.

Mi experiencia en esta tienda como clienta viene acompañada de la de mi familia. Acompañé a mi madre a comprar la cocina de su casa actual y después fui con mi tía Pepi. En ambas ocasiones quedamos satisfechas con el montaje y el trato de Rocío, la propietaria. Solo tuvimos problemas con la emrpesa que trabajaba para ellos montando la piedra. Y digo trabajaba, porque después de la experiencia de mi tía –que tuvo varios problemas con su encimera de granito, hasta el punto de que después de dos revisiones tuvieron que ponerle una nueva-​, la tienda finalizó su relación laboral con esa empresa y comenzó a trabajar con otra.
Cocinas 2000 es una tienda modesta del barrio del Cerro del Águila, que no tiene un súper escaparate bien lustroso con su exposición. Al contrario, en el escaparate exhiben electrodomésticos de todo tipo que también venden y a buen precio. Por ejemplo, la campana de mi madre es Cata, y ha salido muy buena. Allí hay poquita exposición y los muebles se compran sobre un catálogo de paneles, que serán puertas, tiradores que irán en tus puertas y trozos de piedra que serán tu encimera. Quizás para algunas personas comprar así una cocina es un enredo, pero la mujer que atiende es muy paciente y facilita mucho la labor, y es que además se nota bastante en el precio.