Establecimiento franquiciado que abrió hace casi un par de años. Jamás pensé que tendría éxito por la elección de su ubicación. Únicamente iban algunos estudiantes norteamericanos y poco más. Pero con el paso del tiempo se ha consolidado y en el cambio de ropa va medio barrio a lavar las colchas, edredones, mantas, etc… El local es chiquitín, pero muy confortable, además, el aroma a suavizante al entrar es muy agradable. Disponen de cuatro lavadoras, dos de ellas con una carga superior y de dos secadoras. El precio depende de la carga que necesites y del tiempo de secado que precise la ropa que lleves. El tiempo del lavado/secado depende también de la cantidad de ropa que precises lavar. Mientras esperas, puedes sentarte en uno de sus chillones sillones rojos, a la vez que ojeas alguna de las revistas que Clat pone a tu disposición. Como consejo comentaros que en época de cambio de armario, procurar ir entre semana, los fines de semana se llena. Un detalle importante, abre todos los días del año. En caso de tener algún tipo de incidencia puedes llamar a un número de teléfono y en unos minutos viene un empleado a solucionarlo. En relación con el precio de una tintorería, te ahorras un buen pico. Un saludo.