Los Caños de Carmona forman parte de una antigua red de acueductos que servía para traer agua a la población sevillana desde la vecina localidad de Alcalá. Desgraciadamente, hoy en día solo se conservan de ese enorme acueducto los dos trozos que se pueden ver en la calle Luis Montoto y es una pena porque el acueducto debió ser espectacular en su época. Parece ser, que estos trozos se pudieron conservar ya que antes había un puente y unas vias del tren que impidieron su demolición. Hoy en día, el acueducto está bien conservado aunque sí que se echa de menos algún panel explicativo que permita valorar la importancia de estos restos ya que actualmente, si no es por visitas guiadas como la de La Ruta del Agua que pudimos hacer gracias al Unilocaler Pablo Galavís, no es fácil obtener información acerca de estos restos.
Pablo Galavís R.
Classificação do local: 4 Sevilla
Gracias a la visita que organiza EMASESA Metropolitana he podido visitar con más detenimiento este monumento histórico sevillano que rara vez te paras a contemplar. Nunca me había parado a pensar en su nombre, su longitud original o muchos otros detalles de interés que enriquecen su historia y el patrimonio de la ciudad. Estamos ante un acueducto que seguramente vislumbró el propio Julio César cuando fue cuestor(magistrado romano, actualmente equivaldría a juez) de Sevilla, ya que data de los años 68 – 65 a. c y que tenía un recorrido de algo más de 17 km compuesto por 400 arcos. Toma su nombre por finalizar el recorrido en la Puerta de Carmona donde existía un depósito, se sabe que al menos comenzaba en la Cruz del Campo aunque se desconoce en la actualidad si se alargaba aún más. Sirvió de abastecimiento de agua para la ciudad trayendo agua del manantial de Santa Lucía desde Alcalá de Guadaíra. Cabe recordar que el agua era propiedad del Rey por lo que la mayoría del agua iba destinada a regar a la aristocracia, los Reales Alcázares y las Huertas del Rey. Es algo realmente impresionante que hasta principios del siglo XX allá por el 1911-12 el acueducto estaba en perfecto estado y funcionamiento aunque se derribó para hacer más viable la ciudad, una auténtica pena. Un lujo en plena ciudad donde la mayoría de veces pasa desapercibido entre el tráfico y los autóctonos y turistas despistados.
Julio L.
Classificação do local: 4 Sevilla
Ver los caños de Carmona tiene algo de extraño, porque están ahí en mitad de la calle como si nada, pero se trata de los restos del acueducto romano. Parece mentira que decidieran derribarlo y que hoy día no podamos disfrutar que más de tres tramos. Sin embargo la ciudad los ha acogido bien y forman parte del entorno de manera armónica.
Cristina B.
Classificação do local: 4 Sevilla
Nada como ver en mitad de la calle Luis Montoto, ahí sin comerlo ni beberlo, tres pedazos de restos de un acueducto romano. ¡Qué pena que lo destruyeran en su momento, hace ya unos 100 años! Bueno al menos como punto de referencia viene estupendamente. Recuerdo perfectamente(menos mal que esta parte si la recuerdo) salir una noche de fiesta y despertarme con dos amigas en casa de una persona completamente desconocida sin acordarnos de cómo habíamos llegado hasta allí. Las tres bajamos las escaleras del bloque a toda pastilla muertas de risa sin parar de repetir«¿dónde estamos?». Al salir del edificio no sabíamos ni en qué barrio nos encontrábamos, decidimos ir hacia donde se oía el tráfico. Fue ver los pequeños trozos de acueducto que quedan y respirar, ¡menos mal! Con el tiempo descubrimos qué es lo que hacíamos allí, pero eso es otra historia. Lo divertido es que cada vez que veo los Caños de Carmona me acuerdo de mis dos amigas y de las risas que pasamos ese día.
Óscar H.
Classificação do local: 4 Madrid
Los Caños de Carmona son los restos que quedan hoy de un antiguo acueducto de origen romano que existía en Sevilla y que por desgracia a principios del siglo pasado(1919) derribaron para hacer la ciudad más transitable. Su nombre se debe a que la Puerta de Carmona estaba adosada a los Caños de Carmona y de hay viene el nombre. Estaba construido totalmente en ladrillo. En la actualidad solo quedan tres pequeños tramos que copan la antigua calzada de San Benito(hoy calle de Luis Montoto). De los tres tramos el más vistoso es la segunda arcada, la que se situaba en la antigua Huerta de la Alcantarilla de las Madejas y que por formar parte del cerramiento de esta se salvó de ser demolida. Recientemente han hecho unas obras de consolidación de estas estructuras que las han dejado bastante bien integradas en la ciudad, que lástima que solo se conserve este cachito de los 17,5 km que media en su origen.