Bolas

Un milagro, como fue el encontrar aparcamiento en los alrededores de Media Markt, hizo que descubriésemos esta heladería. Me llamó la atención desde el principio, porque en apariencia tenía un diseño cuidado y moderno, con mucho colorido. En las ventanas tiene unos poyetes para sentarse, con cojines de tonos azules y morados.
Según el lema de la empresa, se trata de helados artesanos al 100%, tanto por su elaboración como por los productos usados. Y la verdad es que la calidad se notó en el sabor, sobre todo con el helado de turrón.
Me pedí una tarrina de dos bolas con dulce de leche y galletas María y, aunque la combinación estaba exquisita, al de galletas le faltaba algo de sabor. También pude probar el delicioso helado de turrón y la vainilla con cookies y caramelo.
Un bonito detalle del chico que nos atendió fue que al darnos la tarrina de helado, lo acompañó con una cucharilla de otro sabor aleatorio (o eso me pareció a mí) lo que te ayuda a descubrir sabores que nunca probarías, como fue en mi caso el helado de piñones con caramelo.

Magnifica heladería. Un poco escondida y poco conocida, pero tienen unos helados magníficos y con muchos y originales sabores.