Espectacular selección de carnes, pescados y mariscos. Gran calidad y buen precio. Bodega bastante amplia. Lástima de algunos camareros/as algo bordes. Aun así, merece la pena darse un homenaje :-)
Rafael P.
Classificação do local: 2 Cartagena, Murcia
Ruidoso y con un servicio francamente mejorable. Buenas materias primas aunque no muy bien tratadas. No creo que vuelva.
André B.
Classificação do local: 3 Herve, Belgique
Resto super sur le concept, pour les amoureux de la viande un détour à né pas manquer. Bémol ou je suis trop exigeant, le service par le personnel devrait être plus pro, ils sont vite dépassé et sa rame, dommage, le cadre est sympa mais dommage trop brouhaha cela fait un peu cantine, mais pour le reste rien a redire bonne viande et bon poissons. Je recommande cela, vraiment a faire
Emilio C.
Classificação do local: 2 Murcia
Asistimos a este afamado restaurante por una celebración familiar. Aunque disponen de tronas, el local es poco apropiado para niños, quienes pronto sentirán el impulso de salir del mismo o ponerse a dar la tabarra. El indolente servicio tampoco ayuda, ya que nada más llegar les pedimos una tortilla francesa para un niño de 1 año y medio, haciéndoles entender que la sirvieran ya, y aun así tardaron una hora entera de reloj en poner la tortilla. El mostrador de cristal donde muestran la carne es realmente impresionante. Cuando tomaron el pedido no preguntaron el punto y luego las sirvieron al punto… al punto del cocinero. El aspecto de la carne y la fama del restaurante no se corresponde con el resultado final, resultando simplemente correcto. A esto ayuda el hecho de que todas las carnes(e incluso todos los pescados) son servidos exactamente con la misma guarnición: unas muy mejorables patatas(fritas o cocidas) y unos pimientos enanos naranjas. El local es un espacio corrido, sin paredes ni paneles donde se disponen todas las mesas. También hay una barra donde la gente se sienta a cenar y una especie de terraza ubicada estratégicamente debajo de las máquinas del aire acondicionado. Todo este amplio y ruidoso espacio está presidido por tres pantallas grandes de televisión que muestran la programación en La 1 sin sonido, dejando«El Gallego» a medio camino entre restaurante y mesón de carretera. Al lado de esta terraza hay un solar vacío habilitado como aparcamiento privado del restaurante. La accesibilidad es reducida. En la puerta principal hay un elevador con aspecto de no haberse usado en tiempo. La puerta trasera tiene una rampa con una inclinación de 45º, útil para despeñar ancianos y niños, pero no para subirlos o bajarlos con dignidad. Dentro, los estrechos pasos entre mesas harán difícil discurrir con una silla de ruedas o un carrito. Sin embargo el sitio parece muy valorado en la zona como restaurante de carne, y aunque he oído quejas sobre el servicio muchos de los asistentes de esa noche parecían clientes habituales sin duda habituados a las cosas que a mí me han molestado. Yo personalmente no creo que vuelva por voluntad propia.