Es uno de los sitios mas interesantes de Pamplona porque equilibra espacio, decoración, comodidad y precio. Es un local amplio, con sofás, pufs, mesas altas y mesas bajas. Por la tarde puedes tomar algo dulce tranquilamente y por la noche cenar con los amigos viendo el partido. El café y los chocolates son caros… Pero para cenar las raciones y los bocatas están muy bien y merecen la pena. Desde luego, es un local que recomiendo visitar.