Woody Burger and Lobster

Los camareros muy amables y la comida buena, pero nada del otro mundo. Lo que mejor la decoración.

Voy a hacer una declaración para todo el que lea mis comentarios: en general para mi la calidad de la comida es lo que más pesa a la hora de valorar un restaurante, y si el trato o la decoración son malos puede tener un efecto negativo sobre mi valoración. Pero por bueno que sea el trato si la comida no esta super rica o muy bien calidad precio mi valoración no subirá, sino este sitio seria un cinco estrellas porque tiene los mejores camareros de la zona sin ninguna duda.
El lugar está decorado muy a la americana muy años 50, bien podria ser un garito de la ruta 66 en su época de esplendor, todo nuevo, limpio, su máquina de palomitas…
Como entrante pedimos croquetas de bogavante q aunque no estaban mal, les faltaba un poco de sabor y venían con salsa de tomate, saben que les falta sabor? no soy muy fan de mojar unas buenas coquetas en salsa de tomate…
Pedí una hamburguesa de ternera poco hecha y me la trajeron bastante hecha, la hamburguesa tiene muy buen precio 8,95 pero solo 3 toppings el topping extra 0,50 € (lo que la puede convertir en cara) finalmente me la tomé con 3 q son los que vienen estándar: le puse queso q estaba correcto, tomate una rodaja y cebolla, muy escasa como se ve en la foto Mi acompañante tomó un bocadillo de bogavante con gambas y aunque estaba correcto dice que no repetirá.
Los camareros fueron estupendos, un servicio de camareros inmejorable, nos sentaron enseguida nos atendieron y trajeron la comida rapidísimo y nos preguntaron que nos parecía todo, de hecho nos preguntaron si queríamos postre y nos recomendaron la tarta de queso, parece que fue un error porque se les había terminado y en su lugar nos trajeron tarta de zanahoria que no nos cobraron.