Tele Pescaíto

La calidad ha bajado mucho en los últimos años. ¡Mucho!
Antes era un orgullo para Andalucía tener esta representación de su gastronomía en Madrid.
Pero ahora… no es lo mismo.
El pescado se fríe demasiado, quemándose la harina, y dejando el pescaíto seco.
El «pan» (biscotes, panecillos al ajo, colines, picos…) que te dan está correoso, Viejo.
Servicio excelente, no ha cambiado. Muy eficaz, amable y rápido. Siempre te recibe con una sonrisa.
Terraza amplia y muy agradable, especialmente en verano.
Establecimiento muy pequeño, pero muy bien ambientado en tono andaluz. ¡Chulísimo!
El aceite de fritura… demasiado reusado. Y ahí se fríen las patatas también… una pena.
La fritura de pescado no sale buena, pq fríen todo el pescado a la vez en la misma freidora… y claro… un salmonete no tarda lo mismo en freirse que una anilla de calamar, o que un boquerón, así que al final, gran parte de la fritura se ha quedado seca (requeterrefrita).
Si vas por raciones… me resulta caro para la calidad (alrededor de 25 – 30 euros por persona, si no tomas postre ni chupito ni nada adicional).

Un sitio pequeño pero muy especial, cocina andaluza con ingredientes de primera! Está todo bueno!

— visita obligada por lo etnografico
— cuidado con las mesas de juguete si se padece de la espalda
— buen menu del dia

No es un sitio para venir todos los días, pero si al menos una vez, porque peculiar es desde luego.
Si te gusta la feria de Sevilla, o quieres ver la idiosincrasia andaluza, este es un buen lugar para comprobarlo.
Sus mesas y sillas típicas, la decoración taurino-​religiosa junto con la comida, el vino dulce y la música de fondo te trasportarán directamente a un bar en pleno centro de la capital andaluza.
Entre las fotos reconocí una antigua de la plaza de toros de Ronda, de donde soy yo!
Es un lugar pequeño y tiene terraza al aire libre, si te quieres asegurar un sitio mejor reservar. Tiene un menú de 10 euros donde puedes elegir entre varios primeros y varios segundo, incluye una bebida y el postre.
Nada más entrar te ofrece un par de tapas a pesar de ir con menú. La caña extra fuera de menú es a mi parecer bastante cara, a precio de una doble cuando no llega a a serlo.
La comida no me pareció nada especial, de echo las patatas fritas de los huevos revueltos con gulas no me gustaron, porque se ve que las fríen en el mismo aceite que la fritura de pescado, y necesita un cambio de aceite con urgencia porque se te queda el regustillo amargo al final de la boca de aceite superpasado.
El salmorejo era muy muy suave tanto que creo que solo era tomate triturado, los he comido en la zona mucho mejores.
Pero me gustó mucho el detalle de agasajarnos con las tapas al principio, y con el postre un vinito dulce con un dulce extra casero (pan frito con azúcar y alguna especia más)
Si te apetece fritura de pescado, creo que por la zona este lugar puede ser una buena elección.

Es un sitio muy pequeño por lo que lo mejor que puedes hacer es reservar para pillar sitio dentro en invierno o terraza en verano.
El camarero que nos atendió fue amable, rápido y no confundió ningún plato a pesar de que no apuntó ni uno y éramos 7 pidiendo menú del día.
El ambiente de taberna andaluza pues está muy conseguido pero como a mi ese ambiente a pesar de ser malagueño no me gusta pues como que a mi me sobra.
La reseña de este sitio iba a ir para 4 o 5 estrellas con el inicio prometedor de una gran variedad de platos en el menú combinables como se quiera, tapas con las bebidas (hasta 3 diferentes nos puso) y solo 10 euros.
Pero una vez probé los platos del menú fue decepcionante, quizás por mi elección (aunque me consta que el Salmorejo tampoco estaba rico). Yo pedí huevo frito con pisto (este fue el mejor y simplemente estaba normal), el segundo fue san jacobos y no eran caseros si no congelados y los postres (que creo recordar que yo pedí arroz con leche) eran todos de supermercado :(
Quizás a raciones merezca esas 4 estrellas que pone el resto de la gente pero a menú del día para mi es de no volver a repetir.

Raciones muy generosas y muy buena calidad, buen pescao.
El dueño, Andrés, está todo el tiempo atento para que no te falte nada.
No me ha parecido nada caro para ser Madrid.
También tienen carta con servicio a domicilio.

Franquicia de Los Pescaítos desde hace 25 años. Un día, desde el restaurante del Pinar de Chamartín, empezaron a repartir a domicilio y lo llamaron Tele Pescaíto. Probablemente se tratara del primer establecimiento de servicio a domicilio que no repartiera pizzas por aquella época (años 80).
El lugar es pequeño, con cinco mesitas andaluzas, aunque en cuanto hay un par de rayos de sol sacan las mesas a la calle.
Lo mejor es la calidad de la materia prima y el trato. Es un negocio familiar y los dueños son muy atentos. Puede resultar algo caro, pero si el pescado es fresco de verdad ése es el precio que tiene en cualquier sitio. Las raciones son contundentes y si te sobra lo mejor es que te lo ponen para llevar (como era de esperar).
Además tienen el detalle de ponerte al terminar una copita de vino dulce andaluz (Pedro Ximénez o similar) y un pestiño u hojaldre.

Coincido con el ultimo post, se come muy bien y el ambiente es muy autentico, espanol de toda la vida. es sitio es pequenin pero tiene mucho encanto. La unica pega es que si que es carete…

Aunque de primeras el nombre no llame mucho la atención.Sin duda es uno de mis sitios favoritos donde tomarte algo con gusto. La ensalada con ventresca y el adobo, de los mejores que he probado. Nada que envidiar al famoso adobo de Cádiz…
En verano tiene terraza y la atención y el trato muy bueno. Quizás lo peor que no es que sea muy barato, pero merece la pena. Os lo recomiendo 100%

A pesar del nombre, el pescaíto hay que venir a comerlo aquí. Mi familia política es del sur, con residencia en Málaga, por lo que pescaíto rico rico comemos allí. Si tenemos antojo de algo, y las vacaciones están más lejanas que el fin de la crisis (ains!), pues nos venimos a por unas raciones aquí.
Eso sí, hay que venir prontito, porque si no, te comes el pescaíto frío y a empujones.
Nosotros aprovechamos la terraza los fines de semana.
De cantidad bien y de calidad bien, pero un poco caro para mi gusto.