Tate’s

Una de las mejores hamburguesas de Madrid y sin precios desorbitados. Hechas a la parrilla, con ese sabor tan característico.
Los refrescos son en botella de medio litro.
Totalmente recomendable.

Una pequeña cadena de hamburgueserías con pretensiones de franquiciarse por todo Madrid, que acaban de cumplir un mes desde su apertura en Ciudad Jardín /​Prosperidad. Paseando por el barrio, me llamó la atención su publicidad «hamburguesa en versión española» que debe ser porque usan como pan, el mollete antequerano (desde luego, más compacto que el típico de hamburguesas con sésamo).
Un salón a base de madera en bruto, negros y blancos en vinilo y azulejos, ambientación racing, con bancos corridos y sillas para adaptarse al tamaño de las reuniones que allí se dan citas. Hasta el punto que les doy esa puntuación por esa proximidad con la mesa de al lado, algo que incomodaba la privacidad en las conversaciones.
El refresco lo sirven en botella de medio litro, la cerveza es Alhambra. En cuanto a la carta, muy similar a tex mex y hamburgueserías de estilo americano. Entrantes a bases de combos de aros de cebolla, nachos con queso y guacamole, patatas fritas o gajos. Una gran variedad de hamburguesas, pudiendo escoger en algunas hasta entre tres tamaños de carne: 160, 200 y 400 gramos. También ensaladas, sandwiches y costillares a la brasa. En nuestro caso, una amiga escogió la tate’s pequeña, otro amigo la mexicana y yo la de cebón; coincidimos en que estaban muy sabrosas.
Para finalizar, optamos por un combo de dulces, con brownie, cookies y helado de vainilla, correcto.
Un servicio con afán de agradar y salimos por cerca de 17 €, más que bien para los precios que se manejan en la capital. Un punto extra, tienen servicio a domicilio.