Santamaría, La Coctelería de al Lado

¡Qué gran descubrimiento está coctelería!
El camarero fue genial, recomendándonos cócteles y disipando nuestras dudas acerca de echarle clara de huevo a un cóctel, ya que, como no somos expertos en la materia… vamos, que no tenemos ni idea, nos parecía un ingrediente un poco raro para una bebida. Lo cierto es que le da una cremosidad-​toque de espuma que no te esperas y resulta muy agradable. Pedimos Gin Fizz, Bloody Mary, Piña Colada… ¡A cada cuál más bueno!
Y además tuvimos suerte con el sitio, al fondo, en los sofás, ¿qué más se puede pedir?

Camareros muy atentos y saben de que va esto de hacer cócteles.
Seguiré pasando por allí a menudo.

Me encantaría ponerle más estrellas a este local, pero es uno de esos que corre serio peligro de morir de éxito. He estado muchas veces, y todas ha sido una experiencia de lo más agradable. Los camareros son súper profesionales, los cócteles saben de vicio y la decoración del sitio es exquisita. Quizá falla un poco la música, pero entiendo que es un sitio donde la gente va más a hablar que a bailar.
Como iba diciendo, el local es perfecto para una coctelería. ¿El problema? Que de un tiempo a esta parte, siempre está lleno. La penúltima vez, tomarse la copa no era ni siquiera confortable, porque todo el tiempo pasaba gente a tu alrededor que se movía de un sitio a otro sin parar.
Y lo peor es que la última vez, que me acerqué con una amiga que tenía muchas ganas de conocerlo, nos tuvimos que dar la vuelta y marcharnos a otro sitio, tras esperar (pacientemente) veinte minutos en la barra. Pero el sitio estaba tan lleno que era imposible que los dos camareros pudiesen poner más copas, especialmente con una chica que parecía dispuesta a volver loco a uno de ellos a la hora de pagar. No sé si el camarero cobró todas las bebidas o no al final (la chica no tenía pinta de ir a darle todo el dinero en ningún momento, y no paraba de hacerse la longuis) pero lo que sí sé es que yo el cóctel me lo tomé en otro sitio. Muy a mi pesar, eso sí.

Habéis visto la serie bordwalk empire? si no es así os aconsejo verla, y si es así pues sabréis de que hablo cuando digo que en este bar se debería grabar uno de los capítulos de esta serie.
Y es que nada mas bajar las escaleras que te llevan al local a te va a dar la impresión de estar acompañando al señor rosa (Toooma referencia friki a reservoir dogs) a uno de sus chanchullos habituales en boardwalk empire.
sirven muy buenos cócteles, y cuentan con una carta de ginebras mas que excelente. de esas que no hace falta pedirlas con nada y que con un poco de hielo y una rodaja de limón están excepcionales.
… Vaya, parece que todos los que hacemos una reseña de este local hablamos de alguna serie, mad men, boardwalk empire…

Bonita, muy bonita esta coctelería bastante reciente. En sintonía con lo que se está convirtiendo la zona centro que va a pasar de cierta degradación (todavía quedan partes algo chungas de prostitución y yonkis, pero tengo la sensación de que tiene sus días contados en esa zona).
Como cualquier coctelería pues es cara. Yo me tomé un Whiskey Sour y mi pareja, recordando nuestro viaje a Chile un pisco sour. El mío estaba normal, o sea, me gusta y ya. En cambio ella me dijo que ni comparación a los que había tomado allí. Imagino que lo hacen sin clara de huevo y eso se nota.
Bonito pero no destaca por más que su decoración respecto a otros similares.

El mejor descubrimiento de 2011. Cócteles a precios razonables, gente joven, buena música. Lo único que no me gusta es que cada fin de semana que pasa está más lleno, aunque supongo que es normal. La decoración es rollo años ’20, con un puntillo decadente de la época de la prohibición en Norteamérica que me pone mogollón.
Nada más entrar hay que bajar unas escaleras, lo que le da al local un aire de clandestinidad que… en fin, supongo que sólo son imaginaciones mías. Los ‘gimlet’ (Ginebra y Roses Lime en vaso de cocktail alto), para mí, ya son imprescindibles. Si te mola ‘Mad Men’, este es el local en el que encontrarías a Don Draper y a Roger Sterling charlando después del trabajo.

Gonzalo abrió la coctelería Santamaría hace un añito más o menos. No había caído por ahí hasta hace un mes, y desde entonces la incluyo muy mucho como lugar para quedar. Es muuuy agradable, está decorada con mucho gusto y, como yo sabía conociendo a Gonzalo, tienen de los mejores cócteles que hay en Madrid, especialmente los sour, vamos, el pisco sour que me hicieron la otra tarde me devolvió a la vida. Del resto de los alcoholes tienen una amplísima carta de cócteles, bien deliciosos los de ginebra también. y son ocho euros cada cóctel, nada privativo.
Se está de vicio entre semana, el fin de semana hay tanta gente a veces no se puede ni entrar. La iluminación es como para besarse. Mucho, sin parar.