Pedimos para que nos lo trajeran a casa. El servicio fue muy bueno, dado que lo pusimos para que lo trajeran lo antes posible y lo trajeron antes del tiempo estimado, lo que nos vino fenomenal porque estábamos hambrientos. Además la comida venía en muy buen estado. Pedimos la hamburguesa de kobe clásica, el chorizo criollo y las croquetas del chef, y nos regalaron un bol con pan de biscote con pasas. Para vivir cerca, no nos llegó demasiado caliente, vamos, llegó justo para comerlo al instante, aunque se puede entender dado el tipo de platos. Eso sí, el plato de la hamburguesa tenía muy buena presentación, parecía que nos lo acabaran de servir en el propio bar. Una lástima no haberle echado una foto. Tanto la hamburguesa como el chorizo estaban buenísimos, la decepción fueron las croquetas. Al ser«los sabores elegidos por el chef» pensaba que cada una tendría un sabor. Pero no, se ve que el chef decide un único sabor y las 6 croquetas son iguales. La verdad es que no tenían pinta de ser caseras, parecían precocinadas porque todas eran exactamente iguales y con mucha masa, como las que venden en los supermercados, pero más caras, claro. Así que excepto las croquetas, lo recomiendo!