Muuu Tapelia

Llevo viniendo varios años, es un sitio genial para quedar con amigos, tomarte unas cañas, y tomar buenos aperitivos. La carta no es barata, pero tampoco excesiva. Muy recomendable la costilla de cerdo ibérico, se deshace en la boca de lo bien cocinada que está.

Fuimos para celebrar una cena de compañeras de trabajo ya que una de ellas vive al lado y lo conocía.
Fuimos con un menú preparado, nos sirvieron una ensalada de espinacas y champiñones, con una salsa de tomate, queso parmesano y un chorrito de aceite. Luego para compartir nos pusieron una versión de huevos estrellados pero en vez de patata era alcachofa frita, muy rico! Costillas asadas y mini hamburguesas, la carne al punto y con muy buen sabor. Para terminar un arroz meloso con setas.
Llegamos rodando a los postres y pusieron para compartir varios dulces acompañados por un delicioso helado de vainilla. Todo muy rico.
Lo cierto es que salimos mu contentas y relación calidad precio fue estupendo. Un sitio para repetir seguro!

Ay que desilusión mas grande me lleve con este sitio, esta cerca de mi casa por lo que un día entre y me pareció que tenia una buena carta con platos interesante a un precio mas interesante aún, ese día solo tomamos unas tapas y una caña y la verdad que muy bien.
El sábado pasado tenia visita en casa y por orientación mía decidimos ir a comer aquí, por que para mi era bueno y a buen precio, entramos al salón interno por que eramos 8 y a coger la carta ya me di cuenta que no tenia nada que ver con la que yo había visto, la verdad me pareció poco variada y con precios altísimo, pero ya estábamos allí así que nada a pedir, viene el camarero con una actitud un poco altanera, cada quien se pediría un plato y de primero solo pedimos 2 provolone al decirle que de entrante dos provolone nos dice eso es poco sois muchos, todos nos vimos y le dijimos vamos a pedir plato, como saber si es poco o mucho si aún no te hemos pedido el resto, ya solo con eso sabia que ese chico no era camarero ni nada, solo esta ahí para atiborrar al cliente de platos para cobrar sin importar la satisfacción del mismo, pues nada, la bebida vino bastante rápido al igual que los entrantes, pero empieza a pasar el tiempo y nada que vienen los platos principales pasan por lo menos 20 minutos y anda, hasta que empiezas a traerlos y en la mesa había una niña, pues una cosa un poco extraña el ultimo plato que traen son los espaguetis de la niña que era lo mas fácil que habíamos pedido, pero por lo visto para ellos daba igual que fuera una niña pequeña que al pesarle los demás platos solo decía y mi comida. En fin. La hamburguesa que pedí estaba correcta, al igual que todos los platos que se pidieron, pero al sumar la experiencia completa no se si volveré, finalmente fueron 26,00 € por persona y solo pedimos los 2 quesos y una hamburguesa cada uno, entre todos 4 botellas de agua y 6 cervezas, a mi me pareció algo elevado la verdad.

Trato increible, comida muy bien elaborada y buen producto. Celebramos todos los acontecimientos familiares y siempre es un 10.

Sorprendente.
Normalmente te esperas un estacazo en un local de la zona pero nada mas lejos de la realidad.
Muy buena atención, y tapas interesantes a precios mas que razonables.

Restaurante buenísimo.
Como entrantes: la cecina y la patata gallega con yema de corral, espectaculares
Como principal: las carnes todas buenísimas
Sitio muy recomendable para ir!

El sitio muy bonito, restaurante tranquilo y cómodo. Pero el servicio fue un poco carente de profesionalidad.
La cerveza fresquita y la tapa no estaba mal.
El problema llegó una vez sentados en las mesas, el camarero no se enteraba ni del nodo y hasta uno de los platos nos salió económico total.
Gracias a que apareció una chica muy maja, creo que era la encargada y puso un poco de orden. Al final, los platos de carne que pedimos llegaron a la mesa y todos disfrutamos del sabor casero de sus postres.

Este restaurante tiene una amplia entrada donde predominan una barra y una tele enorme donde además ponen fútbol. Si sois como yo y odiáis el fútbol, no vayáis cuando hay partido, el lugar pierde su encanto cuando estás en la barra charlando tranquilamente y tienes a 10 hinchas gritando gol… Eso sí, por cada cerveza te ponen unas tapas generosas.
En su menú destacan las carnes y ofrecen una gran variedad de diferentes orígenes: gallega, retinta, argentina, wagyu (Kobe) incuso japonesa, aunque esta es excesivamente cara. Una de las cosas que más me sorprendió es que hacen la carne sobre carbón de encina. Sus hamburguesas como podéis imaginaros son totalmente distintas a las que hayáis podido probar nunca, porque sus exquisitas carnes las hacen especiales. Los entrantes son buenos, pero nada del otro mundo. Eso sí, probar las ensaladas, a mi me encantó la de Gourmet con Foie y Confit de Pato.
El servicio es amable y atento, pero siento deciros que la carta de vinos demasiada clásica y anticuada para un amante del vino como yo, ya que la vez que fui a disfrutar de una buena carne Kobe tuve que conformarme con un simple Ribera
El sitio es caro, pero la calidad se nota.

Los del grupo tapelia abrieron este local hace no mucho, y ha triunfado bastante.
Según entras parece un tapelia más, con mesitas, una barra y una tele donde ponen partidos de fútbol. Esto ya de por sí está bastante bien, ya que los precios no son abusivos y por cada cerveza te ponen unas tapas generosas, a menudo de una paella bastante decente.
La diferencia de éste está en el interior. Si te adentras descubrirás un agradable comedor, decorado sobria pero elegantemente, donde te puedes sentar a comer o cenar con más calma.
La especialidad (oh sorpresa) son las carnes. Tienen unas hamburguesas muy buenas, divididas en la carta por la procedencia de su carne.
Además de esto, yo suelo pedir la patata gallega con huevos de corral, que es espectacular, y las costillas ibéricas, que como nos dijo el maitre son de las mejores que hemos probado.
Precio tirando a lo alto, pero la verdad es que se nota que todos los ingredientes son de primera.

Restaurante para los que tienen pasión por la buena carne.
Aqui puedes probar ternera gallega, cerdo ibérico
El precio aproximado es de unos 70 – 80 euros por persona.
Recomiendo las patatas confitadas y de postre el pastel de chocolate blanco.
El servicio rápido y amable. Para repetir.