Montecarmelo

La sensación que produce este centro comercial es digna del Ojo Mágico. Lo digo porque, en un solo pasillo y con la sensación de acoger tan sólo un par de comercios, cada vez que voy me sorprende la cantidad de locales que alberga: un supermercado, un gimnasio (con piscina climatizada, oiga), una tintorería, dos peluquerías (¡dos!), varios restaurantes (Foster’s Hollywood, Burguer King, La Sureña, un chino, Domino’s Pizza), una farmacia, un NaturHouse, una tienda de fotos, otra de lotería y varias de ropa. Por haber hay hasta una juguetería gigante. Si las enumero todas es porque sorprende mucho el aprovechamiento del espacio: parece que no hay nada y sin embargo hay de todo. Los comercios que aquí se acumulan, de todos modos, no tienen mucha calidad. Yo visito aquí el supermercado, exclusivamente porque me resulta conveniente y abre hasta las diez de la noche, pero no es un lugar al que venga a pasar la tarde como he visto que hacen muchas familias cuyos niños recorren el lugar subidos en unos osos y animales de peluche mecanizados que puedes alquilar durante media hora y de los que todos parecen disfrutar enormemente.