Malaspina

Tapas were decent, but it was very crowded and we had to stand.

Tourist trap and dirty feeling. Came in having read the reviews, ended up staying for only a drink to go find a better place for lunch.

This bar is on a small side street off Puerta del Sol and while each adjacent bar has someone out front begging you to come in, malaspina is bursting at the seams. It definitely takes some initiative to jockey for a space at the bar to order. Don’t try to pay until you’re about to leave. The bartender remembers everything you ordered and runs the place like a well-​oiled machine. The complimentary tapas that you get with each round are small but we were full after three plus some croquettes. The food is decent, but it is definitely a cool experience if you can deal with shimmying past the crowds to order. We weren’t lucky enough to get a table but I heard from some other people that you don’t get a table unless you’re planning to order food.

One of our favorite place to have Tapas in Madrid.
Actually we wanted to order more dishes but the waiter said it’s going to be enough. He was right, because they’ve got big rations. Thanks for the warning lol! Everything was so yummy!
Although it was loud and crowded here, we liked the typically Spanish atmosphere.
Definitely will come back!

This was one of my fav places to have lunch for over a year. I used to work pretty close to this place, so once I discovered it, It was hard to go to other places to eat!
If you are looking for an affordable restaurant where you can try good tapas and food, this is a nice place to go. I love its chicken with veggies and all its toasts (they are pretty big). Every time you get a drink, they give you a tapa for free! :)
Moreover, the service is usually good and kind. If I don’t give this place 4 stars is because it’s too dark and not accessible for people with disabilities.
Éste fue durante más de un año uno de mis sitios favoritos para comer durante la semana. Una de mis opciones preferidas es una ensalada mixta a compartir con algún compi de trabajo y, de segundo, pollo con verduras.
Es imprescindible probar sus tostas. Están buenísimas, pero tened en cuenta que son bastante grandes. Calidad-​precio asegurado. No es caro y, por lo general, los camareros son agradables.
Además, con cada bebida que pidas, siempre te dan gratis una tapa. Merece la pena probarlo!

DO NOT COME! Absolutely Overrated! Inexpensive wine but okay food. I wish we tried somewhere else! Seriously, I like to have another meal later.

The people are very nice, but the food is very average. I’d compare it to okay diner food in the US. Also, if you don’t order tapas, the plates are way too large… we ended up eating a quarter of what we got. Def not 4.5 stars thou, not sure what all of these other people are talking about.

We went in the afternoon and it was empty but it supposedly gets crazy at night. Very good food at low prices. The padron peppers were excellent. Also they have very good meats and a serving is large.

Very friendly waiters — if and when i come back in madrid i will be back here. Good food is great, & if service is excellent and you’re treated warmly — it is a sure winning combination!
Keep it up guys!
Carla from los angeles usa

Moins bien cette deuxiéme fois, serveuse débordée et pas trés sympa…
Le reste est bien

Otro estos locales con encanto del barrio de Huertas que tanto me gusta. Eso si, pequeño y atestado de gente siempre. Por fín, nos decidimos y entramos, pero no pudimos disfrutarlo mucho por esto que os comento. Tengo que decir que era fin de semana, así que supongo que la cosa se complica aun más.
Con la bebida ponen una tapita, y estaba buena. Pedimos un par de cervezas y no llegamos a probar nada en concreto, pero dijimos que tendríamos que volver para comer algo de la tapa. Vimos algunos platos de alguno de nuestros vecinos y tenían buena pinta; y de precio según comprobamos en la carta bastante bien.
Cuando vuelva, os seguiré contando :)

¡¡¡HOLA!!! The Malaspina is a great place to meet people and have a beer. They have 3 types of tapas they give you when you walk in. The guys who work there are very friendly. My favorite drink there are the Mojitos. You have to try them. They have a selection of wine too but that is all I can say.
Say Hola loudly when you walk in! You’ll be greeted the same. :)

Wonderful place. Delicious food and amazing costumer services. Es uno de mis lugares favoritos de Madrid. Nunca me voy arepentir aver Venido a este lugar

Delicious, fairly priced, and authentic tapas spot very near to sol. Usually crowded but always a fun and friendly atmosphere. Recommend the patatas bravas and the stuffed peppers.

El sitio es pequeño, en plena zona turística de Madrid, por lo que suele estar bastantes lleno y es difícil encontrar una mesa libre, verás a los camareros intentando abrirse algo de hueco para llegar a servir las mesas, aunque con algo de paciencia puedes conseguir una mesa!
Las tostas son enormes y a buen precio, merecen la pena, están genial para compartir. Como amante de las croquetas, diré q también están bastante bien y en cuanto a la bebida… pedimos una jarra de sangría y la verdad es que no me entusiasmó mucho, nada del otro mundo, está mucho más rica en el de en frente «Cuevas El Secreto». Para los postres, pedimos tarta de queso y otra de chocolate. La de queso buenísima, con su galleta crujiente por debajo y su mermelada por encima, a todos nos encantó, sin embargo la de chocolate era más sosilla aunque no estaba mal tampoco, pero al lado de la de queso… Le hacía sombra.
Otro punto a su favor es q siempre ponen tapa con la bebida y los camareros son muy majos, te atienden muy bien.

No sé como me he demorado tanto en escribir esta reseña, ya que sin duda Malaspina es uno de mis bares favoritos y uno que encontré mediante Unilocal después de investigar bares, ya que me había decepcionado muchísimo con los que había visitado anteriormente.
Malaspina es uno de estos bares que te recuerda que estás en Madrid, que estás en España y que la vida se vive mejor tomando una bebida o dos. En mi opinión, es uno de los mejores bares nocturnos en Madrid, por lo menos hasta ahora, donde realmente vives la experiencia de ir a un bar madrileño.
La primera vez que fui nos brindaron a mis amistades y a mí un servicio perfecto, aunque estaban súper llenos y tuvimos que esperar unos 15 minutos para entrar. Eso sí, todas las veces que hemos ido ha estado repleto, así que si no te gusta esperar no es el bar para ti. Debido a que siempre hay mucha gente puede ser un poco difícil para sentar a grupos grandes, pero no es imposible. Los que trabajan allí, de una forma que aun desconozco, brindan un servicio perfecto mientras toman mil órdenes y mantienen todo controlado.
La música (variada, de diferentes géneros, pero movida), el precio moderado y la gran calidad de las bebidas y la comida y el ambiente hacen de Malaspina un lugar como ningún otro. Por ejemplo, por € 10.5 puedes comprar 1.5 Litros de sangría, más que suficiente para tres personas (y hasta más, dependiendo de lo que tomes). Sus patatas bravas son unas de las mejores que he comido en Madrid y sus hamburguesas también son una delicia. Los mojitos, cuales recomiendo, los hacen delante de ti y hasta el hielo lo trituran a mano, delante del cliente, y el resultado es una bebida rica y refrescante.
Después de ir varias veces a Malaspina ya nos conocen y hasta chupitos nos regalaron la última vez. Mis amigos, mayormente extranjeros, estuvieron encantados con el lugar también.
Definitivamente volveré muchas veces más durante mi estancia en Madrid.

Malaspina es una linda taberna escondida entre las calles del centro de Madrid, pero es de esos lugares que una vez que descubrís vas a estar más que contento de haberlo hecho, porque acá se bebe y –por sobre todas las cosas– se come muy bien.
El lugar es bien tirando a informal, con una barra y varias mesitas. Diría que es una gran opción para ir a tomar algo y comer unas ricas tapas. Probé unos calamares a la romana que eran una locura y unas papas que estaban más que bien, todo súper rico y sabroso.
Una gran ventaja de Malaspina es que aparte de ser todo muy rico, las porciones son recontra abundantes, en tanto que los precios son bastante accesibles y acordes a la calidad de los productos que ofrecen. En fin, un muy lindo barcito por el que vale la pena darse una vuelta.

Malaspina is a cramped, dark taberna in the popular Huertas district of Madrid. If you want the quintessential «tapeo» experience, i.e., rubbing shoulders with locals and chit-​chatting over great food and drink, look no further. The interior has a divey sort of appeal, with weird gothic lighting fixtures and bleak brick walls encircling a raised bar table. People sit and stand wherever there’s space… all this together makes for a pretty unique experience.
Seated on rickety stools at a far-​too-​small-​for-​four table, we started our evening off with some phenomenal minty mojitos. Beware, lightweights: the drinks are quite strong! Soon after, our no-​nonsense waiter began our steady stream of small plates:
Patatas Bravas: a simple traditional dish consisting of fried potato chunks, coated here half with aioli (aka Spanish mayonnaise/​ranch) and half with a mild tomato sauce. The tubers weren’t too salty or oily… I’d take these over French Fries any day.
Cod and Anchovies: thin strips of cod and anchovy laid side-​by-​die on a slice of tomato on toasted bread, drizzled with olive oil and lemon juice. The citrus and fat really accentuates the exquisite saltiness of the fish. Each little bite really zaps your taste buds.
Tortilla Española: the classic Spanish omelette, with potato folded in and served with bread topped with a tomato-​based sauce. This was the only disappointing item we ordered, as the egg was very standard and the sauce was relatively bland.
Meat and Cheese Platter: a sensational assortment of ham, salami, thin sausage, sheep’s milk cheese (I know this because the waiter baaaa’ed when I inquired about it), and bread. Calling this spread enormous would be an understatement. There was plenty to go around for the four of us. The Spanish really know how to cure their meat to perfection.
Cod-​Stuffed Peppers: the last and easily my favorite plate we ordered. Comes in a bowl with fried red peppers stuffed with salt cod purée sitting in a creamy tomato sauce. The peppers are sweet and the cod filling is rich and tasty. Even the vodka-​tomato sauce is worth the price of admission– don’t miss this dish!
The waiters can seem gruff and disinterested, but they’re just trying to keep things moving. In fact, our server shook our hands and brought us a free post-​dinner shot! A truly enjoyable and highly affordable authentic meal: that’s what Malaspina offers.

Great service, great prices with very good food! What do you want more when visiting a new city? Nothing than this friendly place that opens late and serves the best patates bravas ever!
Order a drink and get a tapas for free (not a small portion) Their sangria is good and the location is close to Sol so it makes a great pit spot after a long day of sightseeing. The bill is ridiculous, you will be full under 8 euros!
Thank you fellow Unilocalers for making me discover this amazing place!

We had the sampler which was huge with toasted bread and various varieties of toppings —
Spanish ham, salmon, anchovies and tuna salad. Everything was at best average. I couldn’t figure out why all the ham were so stiff. The anchovies were salty and fishy even with the bread. I wanted to order the cod as well but the waiter said we would have too much food with just the sampler. I was glad b/​c after trying the sampler, I didn’t want to try anything else here. The Ramon red wine was great but it couldn’t redeem this dining experience.

Tapas sample and draft beer. I wanted to order more items initially but the waiter counseled against as it was a big plate.
Outdoor seating watching the tourist crowd. Only downside sitting outside is being bothered by panhandlers.
The waiter was right, tapas was tasty, and I am delightfully full.

This place was excellent. We sat outside and ordered a beer. We received a free tapa, it was kind of like a potato pie. It was very tasty. We ordered a delicious steak with Brie on bread and ham over bread with cheese. The portion were huge and the food was delicious. It is the perfect spot to people watch and have some delicious food. I would highly recommend this place!

Ubicado en una callejuela muy callejuela que parte de la Calle Carretas, en pleno centro del turisteo más guiri. Es un local no muy amplio, aunque en verano tienen una terraza que ocupa el 90 x ciento del ancho habitable de la calle en la que se encuentra.
Es un local no tan dirigido a los guiris como cabe pensar por ubicación y decoración, la cual tiene un punto a favor, como es el hecho de que es realmente bonito el bar, y otro en contra, el cual es que los asientos son la mayor incomodidad que mi trasero ha catado en sus años y años de pimple.
Es famoso por sus tostas, sí, pero como yo voy a contracorriente y suelo juzgar los locales más por las tapas que por la calidad de las raciones, no me pedí ninguna, por lo que solamente puedo decir que las que vi eran realmente grandes.
La cerveza no se de que marca es, porque en el grifo no lo anuncian, lo cual me induce a pensar que me pondrían la mayor mierda universal, pero el caso es que fresquita entraba sola. La jarra pequeña son 2 euros y por tamaño compensa bastante, máxime teniendo en cuenta que los locales de la competencia dela zona suelen meter increíbles clavadas.
La tapa que suelen acompañar es normal y corrientilla de tamaño. Nos pusieron una tortilla de patata rellena de jamón york que la verdad que estaba de puta madre.
Salvando el detalle de que los asientos acabarán por destrozar tus posaderas y de que la camarera nos indicó amablemnete que si no íbamos a cenar, teníamos que levantarnos de las mesas echando ostias (detalle este que le quita una estrella de cuajo, aunque dado lo violador del asiento, casi que fue hasta un alivio), es un local válido para tomarte unas birras por el centro sin ser apuñalado económicamente.

I’ve been to some tapas places in Madrid and this is is easily the best so far. We ordered a bunch of items, but the stars were the Potatas Fritas and the Malaspina.
The Fritas were cooked extremely well… Warm and soft on the outside and coated in a delicious sauce. The Malaspina was the highlight though. Ham, cheese and sauce on bread simply melting in your mouth. I could moot get enough!
The restaurant was packed with locals — although it took a while to get seats, it was definitely worth it. They also give free tapas to begin, which are like mini hamburgers! Would definitely return here.

This place is amazing value, and probably one of the best and cheapest meals I got during my entire time in Europe. While you won’t see a lot of dishes that are staples in most tapas restaurants, the offerings here are more likely to be homestyle cooking, that reminds you of your Grandma. If your Grandma was a Spanish woman with an eye for rustic decoration, and the other eye incapable of judging appropriate portion sizes. Seriously, the dishes run for 4 – 7 euro each, and most of them can feed one or two people.
First off, you start off with free bread and also a FREE tapa of their choice. I saw certain people getting the patatas bravas and I was worried about the small portion size, until I realized that this was complimentary. They will give you one that is not the same as one that you ordered, to allow you some variety in trying out their dishes. As for what we actually ordered. we got the Patatas bravas racione, along with a vegetarian stew dish, and the Malaspina.
Patatas Bravas (⁵⁄₅): these were some of the best potatoes I’ve ever had, and for less than 5 euro you get a huge portion covering a plate larger than a frisbee, half covered in white mayo based sauce and the other half covered in their spicier tomato based one. Great on their own, perfect when mixed together.
Malaspina (4.5÷5): This is bread topped with iberico ham, tomato, cheese, and oregano. I was expecting one or two small portions thinking ‘pintxos’ size. What I got was a huge open-​faced sandwich the size of the plate, absolutely smothered in meat and cheese to the point that some of it was dripping over the edge of the plate. Not the most complex in terms of flavor, but for the amount you’re getting it’s a steal.
Vegetable Stew (⁴⁄₅): This was good, but I don’t remember eating all too much of it. The patatas bravas and malaspina were my main target for the lunch.
3 dishes, plus their complimentary bread and tapas, along with 2 glasses of Sangria, only set us back 19 euro. And we brought back enough leftovers to feed another person back in our hotel.

Lugar con terraza o sino dentro. Nada mas entrar nos saludaron con un: «Hola» nos quedamos asombrados. Ya que al entrar en otros sitios saludan nada mas verte entrar. Cosa que nos gusto. La atención fue buena. Solo tienen San Miguel y Mahou. La tapa que nos dieron fue patatas bravas. Estaba rico.
Después pedimos dos tostada, una de queso de cabrales y otra llamada Malaespina, que lleva baicon, tomate, queso y pimentón si mal no recuerdo. La tosta, yo que soy de comer poco fue grande. Comerían 2 personas si son de poco cenar.
El costo de la cerveza grande fue de 3,50 €.

This was my favorite place to eat in Madrid. Ham and cheese open faced sandwich sandwich (sharing the same name as the restaurant), iberico ham served with tomato, and the tapas platter which included crab salad, a selection of cheese and meat, salmon, and anchovies.
The sandwich was good and meaty. Nothing out of the norm.
We were thrilled to see the iberico ham served with tomato for the bread (something we would see more of in Barcelona).
The tapas platter was very tasty and generous. I loved that it came in a variety of anchovies and tasty jamon. The meat and cheese were all very good, the salmon with cream cheese as well (lots of smoke flavor in the salmon). The crab salad was alright, tasted like something you can get from trader’s joes.
Our server was super friendly and gave us all free shots of Spainish Bailey and something from Bilbao that tasted like sweet whiskey. He even gave us tips on which metro line to use to see a bullfight!

Teníamos ganas de visitar esta taberna cercana a la Puerta del Sol por las buenas referencias leídas a Unilocalers, y ayer por fin pudimos pasarnos.
Llena la terraza, entramos al interior, donde preguntamos por alguna mesa libre para dos. Nos indicaron que tendríamos que esperar diez minutos. Ningún problema, dos bebidas y a esperar. Sin embargo, al quedarse libre un hueco en la barra decidimos quedarnos ahí. Mala idea: las banquetas de madera son sumamente incómodas, la próxima vez esperaremos una mesa libre.
Miramos la carta de tostas y raciones y, pese a que esperábamos mayor variedad, optamos por unas ali-​oli y una tosta por cabeza. El sitio estaba a rebosar, pero el servicio fue razonablemente rápido.
Llegaron primero las patatas. Exquisitas. Es una de esas tabernas donde, en lugar de servirlas cocidas y frías, lo hacen fritas y calientes. Riquísimas, la verdad. En cuanto a las tostas, elegimos la Malaspina (con lacón, queso fundido, tomate y pimentón) y la de salmón ahumado con queso Philadelphia. Ambas cumplieron con su cometido, muy ricas ambas, y de un tamaño considerable.
Antes de ser servidos, se nos unió una amiga que, para comer algo, escogió un pincho de tortilla rellena de lacón. Gigantesco y muy rico, además de ir acompañado de dos grandes rebanadas de pan con tomate DELICIOSAS.
Total, que cenamos estupendamente y por un precio sorprendente: 4 bebidas, unas ali-​oli, dos tostas muy grandes y un enorme pincho de tortilla rellena por 27,80 euros.
Dos advertencias: 1º, cuidado si tienes que bajar al baño por su escalera de caracol :). Y 2º, escoge una mesa si no te gusta que te griten casi al oído, porque en la Malaspina las voces muy altas (más de lo habitual) son tendencia.
Gran elección para comer o cenar MUY BIEN y a muy buen precio.

Y después de muchos intentos… ¡por fin conseguí comer en el Malaspina!
Animada por los buenos comentarios sobre este local, en repetidas ocasiones he intentado tomarme algo, hasta que por fin el pasado sábado se alinearon los astros y pillamos una mesa para cuatro.
El camarero vino a tomar la comanda muy rápidamente y a los dos minutos teníamos la bebida en la mesa y una tapa de patatas aliñadas.
Tardamos un pelín más en decidir qué comer, porque todo sonaba bastante bien y a juzgar por las mesas de alrededor, las raciones eran bastante generosas. Al final nos decantamos por una ración de croquetas, tosta de cabrales, tosta de queso y salmón, patatas bravas y ali-​oli, y la tosta Malaspina (lacón, queso y algo más que no recuerdo). Todo nos gustó, y nos lo sirvieron rápido. Además nos pareció muy bueno el tamaño de las tostas, una buena rebanada de pan cateto.
Tomando cada uno dos bebidas y compartiendo las raciones que os he comentado, pagamos 10 € por cabeza.
No dejamos sitio para el postre, pero la próxima vez lo haré, porque según salía vi al camarero sirviendo varias raciones de tarta de galletas (la clásica de natillas y chocolate), que tenía una pinta estupenda, y me arrepentí de no haberla probado. Tendré que volver.

Aunque algunas raciones están bastante ricas y en general no resulta caro, este diminuto local del centro de Madrid está abarrotado por norma. Conseguir mesa es una odisea y cuando logras sentarte lo más probable es que el tumulto de gente te impida disfrutar del tapeo (porque te empuje el ir y venir de clientes o por el griterío generalizado, camareros incluidos).
Las tosta Malaspina tiene muy buena fama… pero nada del otro mundo. Eso sí, de los mejores huevos rotos que he probado.

Situado en la pequeña calle Cádiz, al lado de la puerta del Sol, al entrar el sitio tiene mucho encanto, decorado como las tabernas antiguas, el local es pequeño, por lo que es complicado coger sitio. Nosotr@s nos sentamos en la barra, pedimos dos cañas y nos pusieron un aperitivo de chorizo (muy rico).
La carta es variada con las típicas raciones de bravas, embutidos, pisto y también ofrecen tostas. No llegamos a cenar ahí, pero he de decir que las raciones que vimos tenían una pinta muy buena, de calidad y precio razonable (teniendo en cuenta que es zona turística), con las bravas seguro que triunfas. Un sitio para explorar al que volveremos.

We came here for breakfast after reading the reviews for this place. It was a short walk from our hotel room so it wasn’t hard to convince us. We opted to sit outside and people watch, but it’s in a narrow alley way so not many people walk by in general, or maybe it was too early since people in the area like to party till 6am and we were up for breakfast at 10am.
We ordered coffee and they brought out muffins for our daughters to enjoy as well. The fresh squeezed orange juice were served in small, plastic cups for my daughters, nice touch!
We wanted to order 4 things but the waiter said that the malaspina is huge and we wouldn’t finish everything. So we got the malaspina tapa (iberico ham, chese and saffron) spanish potato omelette, and pan con tomate which is a bruschetta with oil and tomato rubbed on the bread.
Everything was really good and the prices were very reasonable. I wasn’t blown away but everything was really good.

A mi no me dijeron HOLAAAAAAAA, si que lo escuché decir un par de veces.
Lo mejor del sitio es el ambiente y el local castizo y antiguo donde los haya.
El servicio atento y rápido si bien algo borde si preguntas o pides que te aconsejen.
Los huevos rotos buenos así como los calamares y los piquillos con bacalao. La tosta de la casa queda el pan blando supongo que por el tomate. Nada que ver con la zapatilla del Melos… Supongo que volveré otra vez cuando le haya dado la vuelta a todos los locales de Madrid. El local estaba lleno a reventar pero tuvieron la cortesía de reservarme una mesa con la condición de ir a las 13:45

«Holaaaaaaaaa!!!» Es lo primero que escuchas al entrar en la taberna Malaspina. Lo primero, y lo que escuchas cada cinco minutos. Tienen controlado a todo el que entra.
Nada más entrar, y si estás en hora punta, el sitio te puede parecer abarrotado (y eso que está en la Calle Cádiz que parece escondida de todo el centro de Madrid). El sitio no es muy grande y las mesas están contadas. De hecho, para poder sentarte te preguntarán si vienes para comer/​cenar o sólo a tomarte unas cañas/​vinos. De ser comida/​cena, te tomarán nota para sentarte, por lo que no tendrás que matarte con la gente para coger sitio. Ahora, eso sí, dependiendo del gentío, te puede tocar esperar unos 30 minutos.
Merece la pena la espera mientras refrescas el gaznate. La carta no es muy extensa, pero es más que suficiente: tapas, tostas y ensaladas. Hasta ahora he probado dos tostas, la ración de bravas, las croquetas caseras y los huevos rotos. De todos ellos, recomiendo encarecidamente las croquetas. Buenísimas. De precio está muy bien también para ser la zona centro, siendo cuatro personas acabamos a 8 € por cabeza.

Sitio al que vuelvo cada vez que puedo. Todo alli esta riquisimo, desde las tostas hasta las croquetas. El pisto es de los mejores que he comido y los camareros son majisimos. El local es pequeñito pero en 20 minutos tienes mesa. Eso si, cuando acabes de cenar pide un mojito y veras como los hacen. Seguro que repites!!! Yo lo hago.

Les bars à tapas né manquent pas à Madrid. Dur de trouver où passer la soirée quand on est en plein cœur de la ville.
Grâce à Unilocal,j’ai découvert le Malaspina, un bar tout simple et très typique, qui sort enfin du lot des attrapes-​touristes.
Ici, lorsque l’on commande la boisson, on nous apporte une tapas, gratuitement, parce qu’on est sympa. Nous avons donc eu droit à une assiette de pommes de terre sautées avec du bon jambon. Super pour de mettre en appétit, et parfait pour accompagner nos 2 mojitos.
Cette tapas offerte est une tradition espagnole qui se perd peu à peu avec le temps. Ça fait plaisir de voir que certains établissements la font perdurer.
Côté boisson, je conseille vivement les mojitos et les caïpirinha qui sont à 4,50 €, et sont vraiment très bons.
En ce qui concerne les tapas, nous avons goûté le chorizo ibérique, le fromage et la spécialité de la maison, la «Malaspina», tartine de tomate, jambon et fromage.
Encore une fois tout était très très bon. Mention spéciale pour le chorizo qui était vraiment parfait sans un poil de gras.
Si je devais conseiller un bar à tapas typique dans le centre de Madrid, je n’hésiterais pas une seconde, le Malaspina est le bar qu’il vous faut. La terrasse est toute petite mais la salle est climatisée (comme à peu près tout dans cette ville). C’est souvent blindé mais ça tourne souvent donc soyez patients 5 minutes.
Ah j’oubliais, le digestif est offert, encore une bonne raison d’y aller :)

Casi semi-​escondido en una zona en la que prácticamente todos los locales son turísticos (a veces, incluso, tienes que ir saltando a gente que te quiere llevar a sus bares) está el Malaspina. Un poco difícil de encontrar, además, porque piensas que es otro sitio que tiene otro nombre. Pero no, ahí está el Malaspina, casi encajonado entre tantos otros bares y restaurantes de tapas.
A mí personalmente me encantó. Tienen unas jarras de cerveza fresquísima, y siempre las acompañan de algo de tapa, por pequeño que sea, ya sea un trozo de tortilla rellena (que ÑAM) o una tapita de ensalada campera que estaba también riquísima.
Teniendo en cuenta que lo que hay alrededor es, en muchos casos, bastante aterrador, es un lugar híper recomendable para turistas y lugareños que quieran probar algo rico rico, sin que les saquen las córneas y sin que salgan escaldados.

Malespina e uma taberna com excelente custo beneficio. Os pimentos estofados de carne y bacalao sao deliciosos. A sangria e feita de maneira perfeita, nao muito doce. Excelente (media 10 euros por pessoa com vinho)

Ayer volví, como vuelvo cientos de veces a esta taberna y no sé si es que tenían mal día, que han cambiado de cocinero o qué, pero los platos de siempre (la tosta Malaspina, las bravas y alioli, las croquetas) estaban más bien reguleras. Las patatas, de hecho, no se habían terminado de descongelar.
Pero bueno, volveré, como siempre, para confirmar o desmentir esa sensación.

Este restaurante esta en el centro y es bastante sorprendente, ya que tiene muy buenas tapas y bebidas a muy buen precio para la zona en la que esta, he probado la tapa de ibéricos que esta muy buena, los calamares a la romana que están ricos.
Y después para mi lo mejor del local los mojitos que esta riquísimos y a un buen precio 4,50 €. En verano tiene terraza fuera que si tienes suerte y llegas temprano esta muy agradable. Es de esos lugares que lo mejor es llegar temprano ya que se pone a tope. Los camareros son lo mas.

Apenas he podido venir una vez, creo, y el recuerdo que tengo es bastante grato. Veníamos un grupo enorme de amigos, tanto de fuera como de Madrid algunos, y la verdad es que pasamos un rato la mar de agradable, especialmente gracias a que el sitio tiene una carta de comidas y bebidas a precios imbatibles para tratarse no sólo de Madrid, sino del centro de Madrid.
Reservamos una mesa para todos y aunque tuvimos que esperar un buen rato fuera con el frío, tenían estufas para calentar los veladores. Una vez dentro, el local estaba hasta la bandera de gente y era complicado moverse por allí, pero una vez ubicados, al fondo de todo en una mesa larga, todo fue estupendo. No recuerdo lo que comimos, pero sí me acuerdo de que estaba todo buenísimo, que nos terminamos las reservas de lambrusco y tinto que quedaban en el bar y que nos pusimos «cerdacos» de comer por muy poco.
El trato de los camareros fue estupendo, incluso demasiado «grasiosos», supongo que porque como la mayoría éramos de Sevilla o andaluces se pensarían que no salimos del chiste, el olé y el quillo, pero bueno, quitando esa tonteríà la verdad es que la experiencia moló bastante.

3 intentonas me ha costado encontrar mesa libre en este sitio, cosa comprensible al estar inmersa en plena zona turística; por eso me extraña que siendo sábado estuviese tan vacío, pero está claro que el Universo estaba intentando decirme algo. Cogimos, nos sentamos, fuimos atendidos rápida y correctamente, nos pusieron un aperitivo que estaba bien aunque no fuese de mi particular agrado y… Bueno, ahí termina todo lo especial que tiene este sitio para mi gusto, pero es que tampoco soy un fanático de los locales cañís que no lo son realmente. Que está bien, los camareros son cercanos (quizá demasiado en algún momento) y funciona de una forma bastante fluida aparentemente, pero hay algo en su espíritu ante lo que muestro algún rechazo.
Como detalle, decir que las escaleras al baño no son aptas para gente con vértigo; yo no lo tenía para alturas pequeñas, pero a este paso voy a empezar a desarrollarlo, ¿por qué nos estamos convirtiendo en los Países Bajos para estos detalles arquitectónicos?

Je sors très rarement, si ce n’est pour ainsi dire jamais 5*, surtout pour lieu qui est plus un bar qu’un restaurant, mais ce bar à tapas vaut vraiment le détour ! Il est situé dans un quartier assez vivant, rempli d’établissements similaires, son seul défaut est une petite terrasse, mais la place semble chère dans cette rue. Vous né pourrez pas le rater grâce à sa devanture.
Bière à tarif classique, plateau de dégustation de tapas à un prix raisonnable et dont la qualité est au rendez-​vous. Pickels offerts en attendant et entre les 2 plateaux, puis même avec le digestif que nous avions choisi (test de différents alcools espagnols).
Carte des vins simple mais suffisante pour accompagner. Comme nous hésitions entre 2 que le serveur nous conseillait, celui-​ci nous a fait goûter les 2 (et en effet le meilleur n’était pas le plus cher). Même chose lorsque nous avons commandé une seconde bouteille, il nous à fait goûter un autre embouteillage du même producteur.
75EUR à 4 pour les 2 bouteilles, bières, digestifs, et repas de tapas.
De loin notre meilleure expérience en 15j entre Madrid et l’Andalousie.

El Malaespina es, para mí, un lugar especial. Se trata de uno de los mejores bares de tapas del centro de Madrid (situado justo detrás de Sol). Sus precios son difíciles de encontrar en otros bares de tapas de la capital y sus pinchos no decepcionan. El servicio es, también, otro de sus platos fuertes.
A cualquier hora, tanto para comer como para tomar unas cañas (o un tinto con limón o una sangría), el Malaespina es una buena opción.