Esta pequeña cadena de hamburgueserias de origen gallego, tiene presencia en la capital, concretamente en la calle Alonso Cano, cerca de Nuevos Ministerios. Tiene una muy buena carta de hamburguesas tipo gourmet donde poder elegir entre varias apetitosas y sugerentes opciones entre las que podrás encontrar una versión veggie. Para mi gusto, la carne demasiado hecha cuando la pedí muy poco hecha. Y otro detalle es que no incluyen las patatas, cosa que si hacen la mayoría de hamburgueserias de este tipo. Un punto positivo son su variedad de cervezas con lo que te garantizas un maridaje perfecto con tu hamburguesa. Tienen toda la variedad de cervezas de Estrella Galicia incluida la que para mí es la favorita, la red vintage. El servicio es bueno y el lugar está muy bien decorado, con un original skyline de Madrid en una de sus paredes. El precio medio de la hamburguesa son 9 – 10 €. Las patatas unos 3,50 € y las cervezas entre 2,5−3 €. Una buena opción para los hamburgueseros en Madrid.
Ethan R.
Classificação do local: 4 Madrid
Nos hemos decidido a ir a este restaurante después de leer muchas críticas…así que queríamos hacernos nuestra propia idea… y la verdad es que hemos salido encantados. Tienen una buena oferta de hamburguesas, de diferentes tipos y con diferentes carnes. El pan(en la que yo he probado al menos) no es el típico bollo de hamburguesa, sino pan tipo rústico, muy bueno. Preguntan el punto de la carne y conmigo lo han cumplido, la hamburguesa estaba bien cocinada. Una de las pocas pegas que tiene es que las patatas no están incluidas, se piden a parte, pero son abundantes y las raciones baratas. Aconsejo coger las patatas GAJO grandes, con salsa chipotle(si se te acaba te traen más)…las normales creo que son congeladas(y si no lo son lo parecen) y no son nada del otro mundo. Con una cerveza(por cierto, tienen ESTRELLAGALICIAREDVINTAGE que no la suelen tener en muchos sitios), hamburguesa, dos raciones de patatas para compartir y dos postres para compartir también hemos salido por 16 euros, muy bien aprovechados. Me ha gustado mucho un detalle de la que debe ser la dueña /encargada, que nos ha preguntado que tal todo y nos ha invitado a un chupito… que se agradece. Ha sido majísima… Volveré! PD– Me ha encantado el skyline de la ciudad de Madrid que tienen a la entrada del local.
Sergio P.
Classificação do local: 5 Madrid
Teníamos que cenar por la zona y encontré gracias a mi bienamado Unilocal esta hamburguesería(se podría decir) gourmet a dos patás de Nuevos Ministerios. He decir que lo más me gustó como diseñador fué la imagen corporativa, lo que ultimamente me guía mucho para encontrar sitios con comida de calidad. Pero que le voy hacer, me gusta comer bonito en sitios más bonitos si cabe. Y hay que decir que La Pepita tiene ese punto handmade, ese punto rural pero moderno, tradicional pero gourmet, que se ve tanto en la decoración e imagen como en la comida. Todo rico y hecho con cariño, cuidando el último detalle y con comida de calidad, un servicio más que amable y simpáico, y con detallazo: celebrábamos el precumple de una amiga y en el plato del postre la escribieron felicidades adelantadas con sirope… Además de invitarnos a un chupito a los cinco… Detalles que hacen que te sientas como en casa. Pedimos una hamburguesa para cada uno y un entrante(hummus y mouhammara, que es un hummus de pimiento rojo, con dips de yuca), unas patatas(las crujientes con chipotle y mayoajo) y un postre(tarta de queso) para compartir los 5. El hummus delicioso, las patatas caseras caseras(ojo, lo he dicho dos veces…) y la tarta de queso… sublime. En cuanto a las hamburguesas, las cuáles rulamos entre todos como si de una cata se tratara: la Pepita Burguesa(la mía) con un cordero tierno tierno de categoría, la Pepita pita con un pollo de corral que lloras, la Rianxeira con un queso San Simón exquisito y una panceta crujiente que crujía de verdad, y por último, la Laponia con un filete de salmón que estaba de mort… y todo esto por 14e por persona… En definitiva, y teniendo en cuenta estos factores, no cabe duda que mi final de reseña será este… Recomendado 120%
Leticia F.
Classificação do local: 5 Madrid
Había oído hablar de este local por mis amigos de Vigo y este verano fuímos a dos de sus restaurantes que tienen por Galicia pero con la mala suerte de que estaban cerrados por vacaciones así que… ¡à la tercera fue la vencida! y la verdad que mereció la pena. El restaurante tiene un toque americano pero sin pasarse, todos los trabajadores son super amables y atentos; la verdad que en ese sentido salimos muy contentas. Por otro lado, pedimos dos hamburguesas que estaban riquísimas junto con patatas gajo con chipotle(picante pero adictivo). Para rematar, tienen Estrella Galicia así que no se puede pedir más. ¡Sin duda pensamos repetir!
Gonzalo A.
Classificação do local: 5 Salamanca, Madrid
La carne sabe a lo que tiene que saber, no suelta agua cuando la muerdes, la cebolla sabe a cebolla, la salsa de queso azul tiene la intensidad necesaria para disfrutar de ella y no se adueña del resto de la hamburguesa, el local no huele a grasa ni hay una humareda al entrar como pasa en el Fosters. Es la hamburguesería a la que todos nos gustaría ir y no te explicas porqué las demás son tan malas y venden productos de tan baja calidad. Gracias por existir.
Hugo G.
Classificação do local: 3 Madrid
Es de las pocas veces que siento pena por un negocio. A ver, me explico… Por lo visto, La Pepita es toda una institución en Galicia, donde tienen bastantes restaurantes abiertos y ahora les toca venirse a la capital, donde el tema de la hamburguesa está un pelín saturado, que ya es una idea bastante osada. La imagen la tienen, además bastante bien conseguida, con un local grande, con ese rollo de franquicia, pero interesante. La carta también la tienen, con una propuestas provocadoras de babas. Y en las redes sociales lo petan, así que muy mal se les tenía que dar para fallar en las burgers(o al menos en la carne, que para eso son gallegos). Pues zasca, ahí lo llevas. La carne es una masa compacta que eso no hay Chicote que la haga a un punto que no pase del muy hecho, seca, sin sabor… Una pena. la propuesta de panes es muy interesante, ya que se puede elegir, aunque si no andamos listos, nos ponen el que ellos quieran y no siempre es el mejor, ojito aquí. Y encima las hamburguesas vienen sin acompañamiento, por lo que hay que pedirse algo(¡qué somos!), así que si te pides unas patatas, querido Unilocaler(y por mucho que se encarguen en decir que no) aquí hay más congelador del que te esperas, #ojocuidao. Se salvan, eso sí, las cervezas, algunas de las cuales son artesanales y gallegas, por lo que el beber no será un problema, ¡me encantó! Así que nada, La Pepita igual tiene calidad en sus tierras de origen, pero por aquí se ha pegado un resbalón considerable, aunque tienen tiempo de mejorar, por supuesto. Porque la competencia no deja mucho margen…
Lolo R.
Classificação do local: 4 Madrid
La competición actual de los locales de hamburguesas en Madrid es feroz. No sé cuándo reventará la burbuja hamburgueseril, pero de momento la cosa parece estar en plena forma… Nos acercamos a probar este nuevo restaurante, abierto escasamente hace un mes, para ver qué tal las hacen, y yo salí bastante contento. La Pepita viene de Galicia, donde tiene un par de restaurantes muy exitosos, y la verdad es que a este de Madrid le auguro buen futuro. Situado en Nuevos Ministerios, cerca del principio de la calle Orense, zona de oficinas por antonomasia. El restaurante es bastante enorme, y la verdad es que tiene un estilo vintage-industrial un tanto novedoso que me gustó. Punto extra, porque tampoco es ese vintage al que estamos ya tan acostumbrados. Se acercó un camarero, nos trajeron las cartas, nos tomaron nota de la bebida y al lío. Todos los camareros que nos atendieron fueron simpáticos y, ¡NOVEDAD! traían una sonrisa en la boca, algo bastante novedoso porque en esta ciudad a veces los camareros son un poco antipáticos. Pedimos una tempura de verduras de temporada para compartir de primero, que estaba muy rica, y que la verdad pediría otra vez. Deliciosa. Luego mi acompañante pidió una Rouge y yo una Pampera. No nos preguntaron el punto de la carne(!) pero la mía vino al punto, así que bien. Mi hamburguesa llevaba queso provolone y chimichurri, así que fue bastante espectáculo verme comer, la verdad. La Coca Cola grande, como debería de ser. No pedimos postre, porque yo la verdad es que acabé reventón. Y finalizo mi reseña con una pequeña crítica: acepto que las hamburguesas no lleven patatas por política del restaurante y las tengas que pedir aparte, pero: 1. no entiendo que sean congeladas(y si no lo son, lo parecen); 2: al pedir dos raciones de patatas, el camarero no te avise de que la ración es bastante grande, y que te bastaría solo con una. No nos las pudimos acabar ni haciendo esfuerzos…
Cristina D.
Classificação do local: 3 Madrid
Vamos a empezar por lo que sí me gustó: la atención, rápidos y majetes. El local, con una decoración agradable, mesas distanciadas casi al límite de lo que me gusta porque un pelo más y le comentas al de al lado si se va a pedir postre para compartirlo ;P Las cerves, porque hay Estrella Galicia y artesanales. También me encantó la tempura de verduras que pedimos para abrir boca y flipas con los entrantes que tienen: huevos fritos con paletilla ibérica, langostinos empanados o yuca frita, que recuerde, y no babees ;P Me pedí la Pepita Rouge, con pan de amapolas ¡olé olé olé las cosas ricas!, con foie fresco a la parrilla y puré de manzana caramelizada. También estuve tentada por la Veggie, pero me dieron miedito las judías. Y ahora va lo que no me moló: que no me pregunten por el punto de la carne, de hecho me resulta hasta extraño en un lugar así y además, para mi gusto, estaba pasada del punto que yo habría pedido. Creo que la Rouge habría sido perfecta con«mi» punto. Las patatas fritas que pedimos, ya que las burgers vienen solicas y puedes elegir su acompañamiento, entre las que solemos llamar gajo y las«normales» y pedimos estas últimas… Lo siento pero se parecían a las de cierta archiconocida cadena en la que hay un payaso que da terror… Ponme menos y cúrratelas o también puedes solo ofrecer de un tipo. Siempre lo digo pero a veces menos es más. Esto, curiosamente no es la primera vez que me pasa en un local de hamburguesas gourmet, curioso… Para mí estas dos cosas son más que salvables y estoy segura de que pronto lo resolverán :)
Javi G.
Classificação do local: 4 Madrid
La decoración del sitio A lo metro tile recuerda esos locales del Gordon Ramsey en Londres. Amplio, cómodos pero con un problema de extractores importantes, había neblina del humo de la cocina, eso si, olía A carne, no como en un mcdonalds que huele A otra cosa. No me gustó que no me preguntarán el punto de la carne ni el tipo de pan que quería, afortunadamente la hamburguesa estaba perfecta y muy sabrosa. La carne sabe A carne y son grandes. Vienen sin patatas que se piden aparte pero no son nada del otro mundo. El servicio fue rápido y eso que tenían el local petado. Tienen estrella Galicia y creo que cervezas artesanas. Y como gallegos que son, ofrecían chupito de orujo al finalizar, eso no lo tienes en ningún burguer de moda.
Óscar S.
Classificação do local: 5 Madrid
Comenzó como un «chivatazo» de mi prima Marta desde Vilaxoán de Arousa(Pontevedra) vía whattsap y lo inauguraron unos días después(07/05/2015). Lo primero que más me gustó fue la dirección(C/Alonso Cano, 103), al lado de mi casa, a unos 5 minutos a pié. El mismo día de la inauguración pasé por el lado del local a la hora de su apertuta por la tarde pero como estaba de ronda de vinos, seguí por otros locales cerca. Tenía claro que esa misma semana probaría La Pepita Burguer Bar. Y así fue, llegó ese mismo domingo(10/05/2015) y me acerqué con la familia a las 14h para reservar mesa. Apuntaron el nº móvil y nos tomamos algo cerca. A las 16h decidimos volver. Entramos y nos pusieron mesa para los 4. Si no volvemos por nuestra cuenta aún estaríamos esperando la llamada. Este es el único punto negativo. Pedimos para: — la niña de 5 años: un menú de hamburguesa con patatas fritas. La hamburguesa sólo con queso fundido y nada de vegetales, no había verde por ninguna parrte. — la niña de 3 años, el menú de pollo empanado con patatas. 3 trozos de pollo bien empanados y con poca grasa — la madre, una«pepita rianxeira» compuesta por hamburguesa de ternera, queso gratinado de San Simón, panceta, lechuga, tomate y cebolla. Y para mi, la «pepita manteca», más de 200 gramos de carne de buey, queso, lechuga, tomate, cebolla y el queso cheddar bien fundido abarcando toda la hamburguesa(ver foto). ¿Que cómo estaba la comida? pues las niñas sólo se dejaron las patatas fritas(al contrario que otros sitios, que es lo primero que se comen), disfrutaron de la hamburguesa y el pollo como nunca, les encantó el lugar, la comida y el trato. De las hamburguesas de los mayores sólo quedaron algunas semillas del pan, semillas con las que una de las niñas jugaría y se comería después. Las peques de postre, helado de fresa y los mayores café con chupitos de orujo(de hierbas y crema). Las niñas bebieron agua(Cabreiroá) y nosotros pedimos un tinto mencía de 2014. Muy recomendable, a la temperatura adecuada y con un sabor suave y muy agradable al paladar. Todo ascendió a los 51 euros siendo lo más costoso el vino. Invitaron a los orujos. Ya véis, un precio muy adsequible por unas hamburguesas de alta calidad en un lugar en que los niños disfrutan de la comida(por lo menos en nuestro caso). Y, detalle importante, con vino con el que disfriutar así que probablemente volvamos este fin de semana. Sobre el local, está a pie de calle en una única planta. Bastante amplio con mesas bajas y altas en la parte de la entrada y mesas tipo«peli de hamburguesería USA» en la parte del fondo del local. Esta parte es la de las reservas. La barra está en el medio, entre las dos zonas y los grifos de cerveza son de Estrella de Galicia. La fachada es amplia, color celeste con cristaleras grandes. Había incluso una mesa para unas 10 – 12 personas(ver foto), muy buena para ir en pandilla o quedar con amigos. Sobre las carnes de las hamburguesas, la mayoría son de ternera pero centrémonos: hay buey certificado gallego, cordero mezcla recental y lechal, ternera mezcla de joven y madura, pollo de corral criado al aire libre. Entrantes: huevos con patatas y peletilla, tempura de vegetales, langostinos empanados, yuca o patatas fritas, ensala de pollo o de espinacas o de mozarella con tomate natural y «dips»(nuevo para mi) con chips y pan. Sobre estos dips, la carta aclara que es humus(paté de garbanzo) o moutabal(berenjena) o mouhammara(paté pimiento, nueces, cebolleta, etc.). Para los que no coméis carne, hay hamburguesa de salmón con lechuga, tomate y cebolla y hamburguesa vegetal(espinacas, setas, pimientos, garbanzos y cacahuetes(con lechuga, tomate y cebolla. Los postres no son mi debilidad, de hecho prescindo de ellos con una facilidad pasmosa pero para los golosos, la carta ofrece brownie, crema de castañas, tarta de queso con fresa(¿o serán arándanos?) y pastel de manzana asada sobre moras. Ah!, se puede llevar. Primero se debe llamar por teléfono y hacer el pedido y se recoge en el local. Avisan: sólo se pueden hacer los pedidos por teléfono. Si alguna vez pido para llevar, preferiré la opción ir a la barra, tomarme una cerveza, encargar para llevar, tomar otras cervezas y llevarme el pedido. Yo lo recomiendo y como gallego, me llena de orgullo que este tipo de negocios se expandan(Vigo, Pontevedra, Orense, Coruña) y pueda disfrutar de ellos en Madrid. Y Unilocal,a ponerse las pilas porque tienen los logos de Twitter, Facebook, Instagram y Pinterest y echo de menos el logo de Unilocal. SEGUNDAVISITA30/05/2015. Al pasar la barra se notaba el humo de la cocina. Tienen un problema de extracción a solucionar, aunque no olía mal, no queda bien. Esta vez no invitaron a los chupitos. No preguntaron el punto al que queríamos las hamburguesas(como la primera vez). Pero comimos muy bien. La calidad de estas carnes es excepcional. Las niñas me demandan este sitio así que 1 vez/mes allí estaremos e intentaré probar toda la carta. ¡¡Al tiempo!