Hoy nos venimos a probar la Factoría de Ponzano, un sitio relativamente nuevo, a la par de realmente ruidoso. Aun así queremos probar su cocina y vamos para adentro. Empezamos con unas brochetas de gambón que podéis ver las fotos, rodeados de una especie de pasta hilo, están algo quemadas, buenas, pero quizás demasiado fritas. Por favor tratar bien el producto. Seguimos con tataki de salmón con salsa teriyaki, o debería decir salsa soja. El salmón no sabe a salmón, sabe a soja. La segunda que nos recuerda a masterchef, cuidar y trabajar bien el producto. No podemos decir que este malo pero el sabor no dice nada del salmón. Veamos el ultimo plato que pedimos. Degustación de mini hamburguesas y empezamos con queso sin fundir, y la carne demasiado hecha y alguna quemada. Con el pan sin tostar y un poco grande para la minihamburguesa hace que quede demasiado seco. Por favor otra vez tengo que recordar que hay que cuidar el producto y al cliente para que volvamos. Y la mini burguer con cebolla, está demasiado dulce. Un punto positivo que las patatas son caseras y eso se agradece. El postre decidimos saltarlo esta vez. La cuenta llega y con dos botellas de agua sube a 48,40 por lo que podemos afirmar que además no es barato para la «calidad» recibida. Siento una nota baja, pero me gustaría volver y ver que mejoran.