Kimbo

Cafetería de 3 estrellas y media, subamos a 3,75 !!!
Sinceramente, una grata sorpresa, fuimos deprisa a la estación, para coger el tren camino de las fiestas del Pilar en nuestra amada Zaragoza, tan deprisa salimos, que no tuvimos tiempo de tomarnos el reglamentario café de mediodía, una vez hecho el «check-​in» del hall del ave, vimos cual oasis el «Kimbo» y para allá que nos fuimos.
Ofrecen diferentes tipos de latte/​capuccino con toppings por 2,40 (no muy caro para ser una estación) en nuestro caso uno con Oreo y Chocolate, el café si bien no es gourmet se podía tomar sin azúcar perfectamente. Buen detalle el de la camarera, que al parecer se equivoco echando leche caliente en el café, y lejos de querer escurrir el bulto, comenzó a hacerlo de cero.
Se puede pagar con tarjeta.

Cuando voy a Madrid suelo hacerlo en tren, y a la vuelta en alguna ocasión voy con tiempo y toca esperar un rato, para hacerlo en la zona de embarque, cuando ya has pasado tus maletas por los Rayos X para comprobar que no llevas nada peligroso, tienes tres opciones de cafetería, y tras probarlas, me quedo con Kimbo.
Esta cafetería está al fondo del hall de embarque, frente a la entrada de las vías 11 y 12, justo al final a la derecha, las otras dos están a la izquierda.
Lo que más me gusta de esta cafetería es que es mucho más tranquila, ya que en las otras el ruido suele ser bastante insoportable a veces. Al estar más escondida va menos gente, y las sillas, si bien no son un sillón, son algo más cómodas que las otras.
La oferta es la típica de una cafetería de estación, bebidas de todo tipo y algún bocata o sándwich, y el precio como es lógico es más caro que si estuviéramos fuera de la estación, aún así siempre son amables y correctos, y como digo, sobre todo, tranquilo.