Me encanta este local, por dentro es tipo pub de mucha clase, con sus sofás de reposabrazos anchos de madera, muy señorial, súper cómodos, imagina tomar una buena jarra de cerveza en esos sillones, acompañada de un aperitivo gratuito majo y a precios más que razonables junto con un muy buen ambiente. En la planta de abajo tienen un montón de mesas y suficiente espacio como para montar algún tipo de fiestecilla o conciertillo, que es lo que tiene en mente el dueño según me dijo, ya veremos como va. Ahora lo lleva un joven(parece que tengo 70 años) muy majo, se lo está currando para que vaya bien el negocio.