Faborit

El otro día estaba por Castellana con un amigo charlando y a la hora de ir a comer me propuso: Oye Carlos, yo todos los Lunes voy a comer a un sitio de ensaladas aquí al lado, te hace?
Yo me quedé un poco patidifuso la verdad, no por que no sea hombre de ensaladas, si no por que ir a un sitio de ensaladas no suele estar en mi lista de prioridades!
Pero bueno, accedí y fuimos hasta allí. Primer problema: Una cola de 20 minutos para pedir tu ensalada, estaba lleno de ejecutivos y gente de las «big four», las tias super maquilladas y bien puestas, la verdad no se si ibamos a comer o a tomar una copa a un sitio de moda: P
Una pena lo de la cola y el self service, lo hace parecer demasiado impersonal y le quita mucha magia al sitio (si es que tiene alguna a parte de las ensaladas y el buen precio).
La espera fue larga pero la verdad es que el precio y calidad de las ensaladas son bastante buenas, la cantidad está muy bien, pagué 7 € por un buen zumo variado (muy fresco y dulce) y la ensalada grande. Te la acompañan con unos grisini (palitos de pan italianos) que se agradecen mucho.
La verdad es que si vas con prisa mejor ir a primera o ultima hora por que a eso de las 14:00 — 15:00 hay que esperar mucho. Por todo lo demás no está del todo mal.

No comprendo cómo puede ser que en una zona de oficinas a tutti plenti como es AZCA, nadie se haya dado cuenta de que lo que realmente hace falta ahí es un sitio de café rico para llevar, con baristas y de todo. Emprendendores de España, emprendendores madrileños: consejos vendo, que para mí no tengo. Y os digo que si montáis en esa zona un negocio de café rico rico para llevar, os forráis. En caso de que ya lo haya, por favor, que algún Unilocaler me saque de mi desconocimiento.
La cosa es que yo al Faborit no le tengo excesivo aprecio, pero tampoco desprecio. El otro día, después de una reunión, sentía en mí la llamada de la caféína, así que cuando salí de la oficina en la que me habían citado, miré alrededor a ver qué veía. Y una de las cosas que vi fue, de hecho, este Faborit en los bajos de Torre Europa. Y allí que me fui, ni corto ni perezoso.
El local es amplísimo, tiene wifi y una terraza estupenda para que los fumadores se tomen un respiro (ahumado, pero respiro al fin y al cabo). Yo iba con un poco de prisa, así que me hice con un Chai Latte. Y bueno, no me salió muy caro (unos dos euros y pico) pero tampoco estaba especialmente bueno. No al menos como está el chai latte normalmente. Así que para unas prisas pues vale, pero poco más.