El Vergel

El local muy bonito, esta dentro del herbolario, hay que bajar unas escaleras. Todas las mesas tienen flores frescas, detalle muy bonito
También había música en vivo, un hombre tocando un violín con música de ambiente de fondo, muy agradable
Mientras elegíamos la comida, nos trajeron aperitivo: albondigas de tofu que estaban riquísimas
Comenzamos pidiendo un entrante para compartir: huevos revueltos con morcilla vegetariana. Un acierto totaaal. La morcilla parecía «carnívora» y tenia mucho sabor
Luego de principal pedimos musshaka de verduras de temporada y berenjena rellena de pisto y setas. Y delicioso todo, de verdad
Ahhh se me olvidaba, que te ofrecen pan, y puedes elegir entre centeno, kamut, trigo… Y todos venían calentitos. Es cierto que cada pan era un euro, pero estaban realmente ricos. Y ademas me parece un detalle que te lo ofrezcan así, y no cobrándolo a traición al final
Bueno bueno, y para terminar, al pedirles la cuenta, nos dicen que nos invita la casa a cava, sidra, o zumo de manzana, acompañado de unas galletas de avena. No os parece un detallazo???
La cuenta con el entrante, dos principales, dos aguas y dos panes nos salió a 35 euros. No esta nada mal!!!

Muy rica la comida. Pedimos el menu de sabado. La atencion muy esmerada ya que en todo momento estuvieron muy pendientes de que nos encontraramos comodos con nuestro peque. Deliciosos la lasaña y los filetes de seitan. Muy recomendable.

Muy rico el menú del día (aunque fue un sábado noche)!

HAce un par de semanas me invitaron a cenar a este restaurante vegetariano. Era la primera vez que iba. A mi me gusta mucho la verdura. Soy mas de verdura que de carne, así que me apetecía mucho probar un restaurante de comida vegetariana.
El restaurante me pareció muy acogedor y su personal muy amable. También me gustó mucho la tienda que había arriba de productos ecológicos. Compre Tofu y sal de hiervas.
Cuando llegó la hora de pedir, me puse hasta nerviosa!!! me apetecía probar todo!!! Al final me decanté por una ensalada que llevaba queso de cabra y de segundo Seitan con una ligera salsa de queso cabrales. De postre un delicioso flan de chocolate.
la verdad me ha sorprendido gratamente :-) estoy deseando volver a ir para probar cosas nuevas

Creo que se han dormido en los laureles. He comido cinco o seis veces y las dos últimas ni la comida estaba buena ni en su punto. Los camareros nada agradables.
No se si han cambiado de dueño o qué… pero se nota que no es como antes.

Tienda de productos eco, que al igual que el Ecocentro, junta (que no mezcla) el concepto restaurante con la tienda de productos eco.
En el restaurante todavía no he comido, pero si que he ido en un par de ocasiones a la parte de super. Digo super, porque, además de vender las típicas frutas y verduras ecológicas (a precio elevado), también puedes comprar desde un desodorante, a las mil leches de arroz, avellana, almendra, soja, kamut, pasando por chocolates, pan y galletas, pastas, etc.
Yo soy muy de a tiro hecho y tango bastante claro que centrar la compra en estos locales puede resultar «carérrimo» así que mis compras se centran en: leche de arroz, kefir, tofú (ahumado, con hierbas, etc.), a veces alguna hamburguesa y poco más.
Eso sí, las leches de arroz son más baratas en Ecocentro (del orden de 20 céntimos litro), aunque en Vergel a veces tienen el 50% de descuento en la segunda unidad. El resto me es indiferente comprarlo en un sitio o en el otro.

El mejor vegetariano de madrid, por sabor y por la relación calidad/​precio.
Ya han hablado de sus menús diarios en otros comentarios, y de lo rica y casera que es la comida.
Como ya está dicho, voy a mencionar el servicio: los camareros son francamente agradables y muy rápidos. Si dices que eres vegano se preocupan de hacerte sugerencias, te informan de cuáles son los platos veganos y cuáles son los vegetarianos que se pueden veganizar, y te ponen un aperitivo distinto para que puedas picar algo mientras preparan la comida.
Además de los excelentes precios, te hacen un 5% de descuento si tienes tarjeta cliente.
Cualquier vegetariano desearía tener un restaurante como éste debajo de su casa.
Totalmente recomendable.

Una comida rica y abundante, buen servicio, y lo que es más importante, a 8 euros el menú! Recomiendo los buñuelos de zanahora.
Fui con una amiga celiaca, y todo le sentó bien.

Es mi vegetariano favorito de Madrid, platos ricos, exquisitos, el menú es baratísimo, ponen comida en cantidad como para llenarte totalmente. Son platos muy originales y sabrosos como las berenjenas rellenas de pisto, qué ricas… la crema de calabaza, el salmorejo, la tarta de puerros… Y los postres una pasada.
Además puedes mezclar el menú a tu antojo, dos segunos, dos primeros… y si estás muy lleno con el primero, el segundo te lo ponen para llevar a casa…
Genial!

Es cierto que para los no vegetarianos (nuestro caso) enfilar el paseo de la Florida hasta esa altura provoca extrañas sensaciones en nuestras narices, unas que casi nos hacen oler el chamusque de los pollos de Mingo. Es por eso que se nos hace muy difícil detenernos en un restaurante en el camino que no ofrece carne de bicharracos. Pero hay amigos de todo tipo y ellos (algunos) también merecen algo de consideración.
El Vergel se divide en dos plantas. La primera, para coger y llevar todo tipo de comestibles y demás merchandising sano y digestivo. Me pareció ver que varios de los que pagaban presentaban una tarjeta de socio y otros encargaban que les llevaran la compra a casa. En la parte inferior del local, un restaurante de cuyo menú disfrutamos con discreción en una especie de reservado mono. Nos gustó la paella de verduras. Pagamos 15 euros, siendo domingo, y no estaban incluidas las bebidas. Mi amiga verde salió muy contenta y compró muchas cosas.

Es un vegetariano que no puedo encasillar en las críticas que suelo hacer a los demás: caros y demasiadas filigranas en el plato.
El Vergel es lo contrario, sus precios son asequibles y sus platos realmente sencillos, pero apuntan a dar en mi gusto: queso de cabra con cebolla caramelizada es sinónimo de «carmen hazme tuyo» y a mi los mensajes imperativos de una carta, me pierden.
Una carta, eso sí, con interlineado doble, es decir poco variada, pero bueno si tenemos en cuenta que los carnívoros que entran muchas veces no saben identificar ni la mitad de las verduras, pues supongo que se lo habrán querido poner fácil a todos los públicos.
Tienes un «super» verde, donde no pude acercarme a husmear por ir acompañada de mis queridos amigos que consideran que «puedo comprar mis flores en otro momento»…Taaaan majos…

El vergel es un lugar dedicado a la alimentación sana, natural y ecológica que consta de dos espacios bien diferenciados.
En la parte de arriba hay una tienda de productos vegetarianos, veganos y ecológicos que me gusta mucho.
Os recomiendo que os paseis por la sección de productos refrigerados, es uno de los pocos lugares donde siempre encuentro mis mini salchichas de seitán favoritas y los «quesos» veganos chezzly (el «mozzarella style» está realmente logrado y con el las pizzas veganas son otra cosa!)
Puedes comprar los productos directamente a través de su web y además con la tarjeta de socia me hacen descuentos en mis compras.
En la parte de abajo tienen un restaurante vegetariano.
Esta es la parte que no frecuento.
Comimos un día allí, y la verdad es que no creo que repitamos. No es que la comida estuviera mala, pero habia muy poca variedad de platos y me parecieron poco elaborados. Aunque no es caro, el precio nos resultó demasiado elevado para la calidad del servicio en general.
Lo único destacable fue que pude terminar la comida con un brownie vegano!