NOSENCANTA! REPETIMOS este finde también!!! Un autentico Brunch!
Marina S.
Classificação do local: 3 Madrid
Lo más clásico aquí es el brunch, pero como yo voy al revés que todo el mundo, no es eso lo que pedí, sino platos de su carta. Han dejado la decoración que el sitio debía tener cuando abrió, a finales de los 70, de cafetería de barrio, y lo han convertido en algo parecido a un diner con cócteles y zumos(muy recomendable el Agua de Jamaica, que no, no lleva ron). Su pollo frito con miel y mostaza está realmente bueno, y lo mismo los rangoons de langostinos. Las hamburguesas y el brunch, para la próxima.
Maca P.
Classificação do local: 2 L'Eixample, Barcelona
Fatal! El servicio es pésimo. El brunch escaso. Es la segunda vez que voy no vuelvo más. Han subido el precio y bajado la calidad. La bolleria industrial y dura, los huevos benedictine un timo. El café frío y el french toast pasado. Un desastre! Es una pena que empiecen bien y se aprovechen de la confianza del cliente. Hay muchos locales que hacen brunch deliciosos para darle una oportunidad. A este está claro no hay que darla.
Roberto F.
Classificação do local: 2 Madrid
Una decepción. Se puede decir que el sitio ha muerto de éxito. Han bajado la calidad, subido el precio y la calidad del servicio se ha desplomado. Parte por el carácter del personal y parte porque parecen desbordados. El brunch en si deja mucho que desear comparado con las muchas alternativas de mucha más calidad que hay en el barrio(Carmencita, MariCastaña.) por precios similares o inferiores. La bollería de baratillo, los huevos Benedictine y el hash brown que han menguado hasta un tamaño mínimo y con un sabor insípido. La French Toast fria. Una pena porque el sitio lo tenía todo para ser un referente.
Marta J.
Classificação do local: 5 Madrid
El Ferry tiene un puesto más que merecido en mis locales favoritos para tomar un buen brunch los domingos; no hay nada mejor para pasar un día de resaca! Este brunch lo tiene casi todo, su parte de bollería dulce con café o té y luego un estupendo plato salado. Yo me decanté por los huevos Florentine con patatas asadas con verdura; para mi, todo un acierto. Los huevos Benedict y con bacón tenían una pinta buenísima también. De postres, porque sí, después de todo esto todavía hay sitio para él, tarta de lima para chuparse los dedos(la macedonia de frutas también estaba muy buena y totalmente casera). A mi no me ha tocado aún, pero un fin de semana al mes, hay actuación en directo a la hora del brunch. Habrá que repetir para vivir esta experiencia! Os ánimo a todos a probar el brunch de El Ferry. Acierto: Tener pan y galletas sin gluten para los celíacos.
Rafael L.
Classificação do local: 5 Madrid
Ya he ido un par de veces y es uno de los sitios de brunch que más me gustan. La decoración tiene un punto guay entre moderneo y bar de los setenta y el servicio es rápido y atento. Incluso creo que nos ha llegado a atender la dueña y da gusto lo bien que te trata. Consta de café con surtido de bollería, luego mimosa o bloody mary(ojo, el bloody mary es ENORME), luego huevos benedict o florentina y por fin un postre entre 4 o 5 opciones. Y de precio creo recordar que 18 euros, así que ni tan mal. Lo suyo es reservar porque a veces tienen música en directo y se pone a reventar, aunque también lo he visto desierto, pero es mejor no jugársela. Ah, y haciendo check-in en Unilocal te dan dos copitas de cava! Yupi!
Sergio S.
Classificação do local: 2 Madrid
Mañometro: Anda a cascala !! De todos es sabido que soy un laminero-brunchero, es una realidad, los huevos benedictinos me pierden y me pongo ojiplatico cada vez que veo la posibilidad de probar un sitio nuevo de esta temática, bajo esta premisa nos dirigimos a ferry con mucha ilusión gracias a sus excelentes criticas, y creo que en parte ahí radicó parte del problema, cuando las expectativas están muy altas, el talegazo puede ser de campeonato. Vayamos por partes: Cesta de bollería: 2 mini curasan y 2 mini napolitanas, no muy distantes de la bollería industrial, y me pregunto yo, ¿De dónde ha salido esta moda de llamar cesta de bollería a dos tirricos bollos de recreo? Hay honrosas excepciones donde realmente da gusto verla, pero sinceramente para ponerla así, no la pongas. Huevos Benedictinos: Me gustó bastante el Hashbrown, puesto que no es el típico triangular que todos tenemos en mente, sino que era planito y daba la sensación de ser mas«sano» por otro lado los benedictinos me parecieron agrios en exceso, hasta el punto de plantearme en varias ocasiones si estarían malos. Postre: Tortitas con arándanos que si bien estaban buenas pasaron sin pena ni gloria, quizás porque la experiencia anterior no ayudaba al buen termino del brunch. Servicio: He aquí la razón de las dos estrellas, el ferry en si mismo no es un mal brunch, no es de los mejores de la capital pero si una buena opción cuando quieres«cambiar» de aires y que no te saquen los cuartos cual Sandokan. El problema es que si te digo 3 o 4 veces, que me traigas los benedictinos sin vegetales porque no me gustan, porque se van a quedar en el plato, porque veo que no lo apuntas, porque estas de risas con el otro camarero y te veo que estas mirando a tu colega el de la barra, y no me estas haciendo caso, y me empiezo a poner nervioso, hasta el punto de que Merche M me llega a hacer callar el son de «Sergio ya lo ha entendido, déjala vivir», para que luego el plato venga con vegetales … Pues pasa lo que pasa, que me da la risa floja y me dan ganas de … ponerte dos estrellacas. El chiste debía ser bueniiiiiiiiiiiiiiiiiisimo, el brunch NO lo fue, desde luego.
Juan C.
Classificação do local: 5 Madrid
Un sitio estupendo para comer o cenar, ademas del tan de moda«brunch» La ambientacion y deciracion le dan un toque diferente, y la comida es variada, y con opciones internacionales muy a tener en cuenta. Para comer de menu son 11 € y aunque se sale un poco del precio de los menus de la zona, merece la pena invertir un poco mas para una velada diferente, en un sitio diferente, con una comida diferente.
José Antonio P.
Classificação do local: 4 Alcobendas, Madrid
DIsfruté hace poco de un brunch en El Ferry con unos amigos y salí muy, muy satisfecho. La comida me pareció deliciosa, y en ningún caso pesada(algo que se agradece, hay sitios que parecen pensar que brunch= grasa en abundancia) y bien presentada, y el servicio me pareció correcto, sin agobios ni retrasos. El precio está ajustado a la calidad que sirven. Los minibollos me parecieron un acierto y el plato principal(una hamburguesa, en mi caso) en su punto exacto. Copa y postre(tortitas de arandanos, muy sabrosas). Todo por 15 euros, ni barato ni caro, como digo, ajustado. El unico pero que le puedo poner al local es su distribución, al estar muy alargado no es posible alternar las mesas y, para mi gusto, están demasiado juntas(al menos las de la zona de barra-pasillo)
Olaya O.
Classificação do local: 2 Madrid
Como buena Unilocaler me gusta buscar información sobre el sitio al que voy a ir y cuando me metí aquí a ver comentarios de otras personas las experiencias que vi en general eran muy buenas. No sé si me vi influenciada porque una amiga decía que psé psé su experiencia anterior, si haber estado en un brunch más allá de lo maravilloso el domingo anterior influyó, pero la experiencia se queda en las dos estrellas. La primera cosa que me pareció muy ¿rara? fue que pidiésemos las mimosas para ir tomando algo mientras esperábamos a una de las 4 personas para las que teníamos la reserva, nos dijesen que muy bien, y que tras unos 20 minutos estando ya el grupo completo volviésemos a pedirlas y nos dijesen que las mimosas no las traían hasta que viniese la comida. No entiendo bien el por qué. Encima estaban del tiempo. Llegó una cesta con una bollería mini que nos salvó de la inanición pero que era un poco de chiste, o por decirlo de otra manera cutre. La espera en general fue larga y yo que me decanté por los huevos benedictine con hash browns no me sentí contenta con lo que recibí. Los hash browns me parecieron insulsos, no es que sea experta pues eran los segundos de mi vida, pero no me dieron más. Los huevos estaban bien hechos, pero ni el pan(una tostada) ni la salsa que tenía menos de holandesa que su origen me convencieron para nada. Lo mejor de todo fueron los postres, todos buenos(tortitas, tarta de lima y french toast). En general el servicio fue malo, tardaron mucho, se les veía super perdidos, no acertaron con algunas de las cosas que pedimos, decían cosas muy extrañas…teniendo en cuenta la cantidad de sitios que hay(y seguirán abriendo) para tomar el brunch dudo bastante que vuelva a probarlo.
Cristina D.
Classificação do local: 2 Madrid
«Yo es que de café…» Si alguien que trabaja en una cafetería me dice eso, la verdad es que no sé qué pensar y leyendo el resto de reseñas, no sé si el día que fuimos tuvimos realmente mala suerte porque la atención no fue buena. Nos pasamos todo el brunch intentando que nos atendieran y pendientes nosotros de los camareros en vez de al revés porque… debería ser al revés ¿no? Tardaron muchísimo en tomarnos nota y cada vez que pedíamos algo tardaban la vida o directamente se olvidaban, por lo que había que recordárselo. Empezamos con las mimosas y estaban, vamos a decir, templadas… :/ La cestita de bollería aceptable sin más. Como plato principal pedí Huevos Benedict que estaban bastante buenos pero quizá tengo el listón muy alto con otros que he probado. A mí me sobra la ensalada y el melón que los acompaña pero esto ya son gustos. Como éramos cuatro, para los postres decidimos compartir la tarta de lima, unas french toast y las tortitas de arándanos. De todo, lo que más me gustó fue la tarta que estaba deliciosa. Otra cosa que no entendí es que cuando nos tomaron la comanda, le dijimos al camarero que si le decíamos ya los cafés y nos dijo que mejor no porque«está todo programado» y si los incluía en la comanda, nos los sacarían y nosotros los queríamos para el postre. Cuando yo era joven(Sicilia, 1929), mientras hacíà la carrerita trabajé como camarera y si el sistema era así, lo que hacía era decirle a mi compañero que no lo sacara hasta que se lo indicase. De esta forma, ya tienes toda la comanda y cuando veas que es el momento, solo tienes que preguntar a los clientes si quieren que ya se les traiga el café. Quizá en otro momento habría carecido de importancia, pero teniendo en cuenta que cada vez que pedíamos algo, tardaban mucho… No sé si estoy en lo cierto, pero al parecer las mesas solo pueden ser de cuatro personas, máximo cinco, y sería para estar más bien apretaditos. Supongo que como siempre, es bueno dar segundas oportunidades y en algún momento volveré y actualizo reseña, espero que de forma positiva.
Natasha S.
Classificação do local: 5 Madrid
Después de mucho ver fotos y oír hablar del Brunch del Ferry, pues ayer decidimos ir, al entrar estaba a tope, por lo que donde había espacio era el barra y la chica muy agradable nos dijo que si no teníamos reserva tenía que ser en la barra y así lo hicimos, nos comento que habíamos tenido suerte por que normalmente ni en la barra se puede, que mejor reservar, así que ya lo apuntamos para la próxima por que habrá próxima reservaremos. Desde que entramos la atención fue muy buena y a pesar de estar llenos el servicio fue rápido, la cesta de bollería que traen de primero son 6 mini piezas calentitas que están muy ricas, que bien te las puedes tomar con café o té, yo como soy especial y no bebo ninguna de las dos cosas pregunte si podría ser agua y pensé que me traerían un vaso pero no me pusieron una botella de agua. Después continuamos con Bloody Mary y para comer yo pedí huevos fritos con bacon, los Huevos fritos estaban como me gusta la yema bastante suave para poder mojar el pan y el bacon que estaba tostadito, la patatas fritas me encantaros y de postre probé tanto las toritas con arandanos como la tarta de lima, las dos cosas estaban muy ricas. Por ahora solo he probado el Brunch pero el lugar me ha ganado como clienta ya que la relación calidad precio es excelente, la atención del personal buenísima, el local es amplio y aunque este lleno como estaba ayer no me sentí aturdida por el ruido. Sin lugar a duda repetiremos.
Tamara F.
Classificação do local: 5 Madrid
Después de muchos intentos de convencer a mi chico para ir a tomar un brunch, conseguí hacerlo gracias a vuestras fotos y comentarios.(Ya que él siempre me ha dicho que le parece un absurdo coger esa costumbre de los americanos). ¿Qué puedo decir que no hayan dicho ya? El bacon riquísimo, el café bastante bueno, la verdad que las camareras son muy amables. ¿Las home fries? Deliciosas. Tengo debilidad por esta forma de cocinar las patatas.
Claudia R.
Classificação do local: 5 Madrid
Había visto alguna foto del local y me parecía que era lo menos glamuroso que se podría una encontrar en los alrededores de la Glorieta de Bilbao pero nada más alejado de la realidad cuando al entrar por la puerta vi que, a pesar de notarse que se trata de un local remodelado, el ambiente vintage era de lo más agradable. Con una barra de lo más hermosa a lo largo de todo el bar, junto a la pared(de clara inspiración naval, con sus ojos de buey y todo) han dispuesto mesitas para cuatro personas que dan pie a echar un buen rato, que los camareros se encargan de hacértelo pasar. ¡Y es que es de agradecer que te atiendan chicos tan eficaces y tan simpáticos por una vez! Yo en esta ocasión fui al brunch un sábado y salí más que contenta. Por un precio más que aceptable(15 €) tienes tu cestita de hojaldres, café/té(aquí señalo que es un buen té y todo, cosa que no pasa en muchos sitios), cóctel(muy rica la mimosa a pesar de que estaba algo caliente), plato principal y un postrecito. Todo lo que probamos estaba la mar de bueno y encima nos lo acompañaron de jazz en directo, ¿qué más se puede pedir a unos buenos huevos benedicte con los ricos hash browns sino es buena música? Pude ver que cuentan con un menú del día por 10,20 € en mesa y 7 € en barra, así que yo me animo a pasarme por allí un día SÍ O SÍ. Por cierto, si tienes intención de ir al brunch, más te vale que reserves, que se ve que el tema está muy de moda.
Ana S.
Classificação do local: 5 Madrid
#juevesderesena Nunca le agradeceré lo suficientemente a mi amado amigo Lolo que me recomendara este sitio para hacer brunch. Y, más concretamente, para comer huevos Benedict que, dada mi corta edad, aún no había tenido el placer de probar. Reservamos el día antes(imprescindible para cualquier brunch decente en Madrid) y allí que llegamos el domingo con el estómago bien vacío para meternos entre pecho y espalda lo que sigue: El menú de brunch tiene para elegir un café o té que se acompaña de bollería calentita, un cóctel(mimosa, cava o bloody Mary), un primero(los Benedict, sándwich club y un montón de delicias que ya no recuerdo) y un postre(tortitas de arándanos, ensalada de frutas, tostadas francesas y creo que algo más). Se sirve cada cosa en orden y una vez que se ha terminado la anterior, pero como todo está TANBUENO se acaba rápido así que tardas poquito en hacer tu breakfast-lunch. Lo mejor es que el precio de todo esto es de 15 euros. Sí sí, 15. Y sales rodando hacia tu casa y con el estómago lleno de cosas muy ricas, hechas con cariño y con un aspecto muy apetecible. El Ferry es hoy un local de copas-desayunos-cócteles y tapas muy mono creado sobre la estructura de lo que era un bar tradicional patrio, con sus sillas en la barra y luego mesas con banquitos acolchados al otro lado. La decoración es sencilla, inspirada en un barco. Tiene un personal muy muy amable que no se cansa de recomendarte y preguntarte si todo está a tu gusto. Incluso la dueña, que agradece muchísimo todos los comentarios y te pide que seas sincera. Yo la verdad es que lo fui: me encantó, no cambiaría nada de este brunch y volveré seguro. Sin duda, mis preferidos fueron esos maravillosos Benedict(ah, podías elegir la guarnición también entre distintos tipos de patatas), con la yema deliciosamente líquida y un toque de salsa holandesa que no estaba muy fuerte ni era muy empalagosa. Si quieres hacer brunch, sin duda pásate por aquí porque merece Y MUCHO la pena. Es child friendly, no está hasta arriba de modernos insoportables y el ambiente es muy muy agradable.
Elena M.
Classificação do local: 4 Madrid
Super rico!!! Yummy!!! Fue estupendo probar su brunch dominguero. El precio son 15 euros y es bastante completo, lo que te permite que no tengas hambre en todo el día :) Para empezar un café/té como bien manda la tradición del desayuno unido a una cestita de mini bollería que está calentita y bien buena y es una delicia compartir. Más tarde pasamos a los platos y bebidas saladas y contundentes. Puedes elegir entre varios platos y yo escogí los huevos benedict con salmón que estaban de lujo y acompañados de patatas fritas! Cómo mola un desayuno así tardío! Para acompañarlo una rica copa de mimosa que se bebe en nada. Para finalizar un rico postre. Me decanté por una tostada francesa que sabía a gloria. Eso sí, es una pena ser intolerante a la lactosa porque no disfrutas igual la verdad. Yo me permití un lujo este día pero ojalá pronto alguien piense en nosotros y haga un brunch para intolerantes! El sitio es muy agradable aunque pequeño, por lo que es mejor llamar y reservar, sobre todo ir muy pronto, porque sobre las 13 horas está aquello a tope. También el servicio estuvo bien, muy majos.
Andrew B.
Classificação do local: 3 Vancouver, Canada
El Ferry is located in a great location, just outside of the Bilbao Metro. The décor is a modern take on an american style diner and is very welcoming. We came for Brunch, which is very affordably priced at 15 euros for a HUGE amount of food. I came with a group of 4(they lost our reservations) but were accomodated anyhow — so we managed to try lots on the menu. My main complaint however, is with all of the fixed meals — it was simply too much. Starts with a coffee or tea — served with a basket of warm tasty pastries. Then onto a bloody mary or mimosa(both were fine) Then a huge array of options from omelettes, to eggs florentine, eggs benedict, etc. served with a salad, home fries, etc. The mains were okay, but none memorable and all under-salted. THEN you get another round of food — options include blueberry pancakes, fruit salad, lime tarts, etc. This was probably the best course of the meal. The service was friendly, although very slow(a bi-product of being very busy for the first seating of the day).
Teresa A.
Classificação do local: 4 Las Rozas de Madrid, Madrid
Espectacular brunch el de esta cafetería de la calle Sandoval, al que no doy las cinco estrellas por un detalle estúpido, pero que está ahí, y por lo tonto que es, aún me parece más digno de ser tenido en cuenta. Pero salvando la incongruencia de la imposibilidad de tomar un zumo de naranja exprimido si lo tomas solo, pero que no haya problemas cuando es dentro de una mimosa, el resto del brunch es de 10. Incluidos ambiente, decoración y servicio. Además de un precio de lo más ajustado para la calidad y la cantidad que ofrecen. Por 15 euros, tienes té o café, junto con una cesta de minibollería(magdalenas, napolitanas y croissants). Un cóctel(Bloody Mary o Mimosa) o cava. Y luego, el plato fuerte. Las posibilidades son amplias: huevos en distintas modalidades, acompañados de ensalada y patatas en varias formas, también, una estupenda ensalada césar, bagel con salmón, tortilla rellena, hamburguesa… Y la parte dulce para cerrar, con opción a french toast, tortitas de arándanos y alguna otra exquisitez más. Todo ello, servido con agilidad y simpatía, en un local amplio, en el que el volumen de las conversaciones nunca llega a molestar, a pesar de estar bien repleto de gente. Un sitio estupendo muy a tener en cuenta, al que volveré, sin duda.
Juan D.
Classificação do local: 5 Madrid
Teniendo el sitio lleno hasta los topes para un domingo, decirles que éramos la mitad de los esperados originalmente no les ha supuesto ni un problema ni una mala cara, así que punto a su favor completamente. A partir de ahí, puedo decir que el sitio es alargado, con las mesas a un lado y la barra al otro, que la carta de brunch tiene bastante variedad, y que ha sido más barato y mejor que otros muchos que están consagrados en esta ciudad. De primero he tomado un té negro(también lo tienen blanco, verde y rojo cual bandera del País Vasco), pero podría haber elegido también un café; para acompañarlo nos han puesto una cestita con bollería tamaño mini: napolitanas de chocolate(bastante buenas), magdalenas y unos croissant sencillamente espectaculares, como los que se comen en los países donde saben hacerlos. De segundo tenían 3 cócteles diferentes para elegir, aunque hemos apostado por la mimosa y nos ha parecido muy bien. Luego todos han elegido huevos en diversas presentaciones, pero yo he optado por una ensalada César que, a diferencia de la de muchos otros sitios, llevaba los ingredientes correctos y puntúa bien alto en mi lista de ensaladas César(particularmente porque tampoco estaba bañada en grasienta salsa). De postre he tomado una French Toast que venía adornada con naranja, arándano y frambuesa, y que sabía prácticamente a deliciosa torrija. La he devorado, he sido incapaz de comerla como una persona normal, y encima ha abierto en mi vida un campo de combinaciones culinarias que hasta ahora me permanecía oculto. Todo bien. El único problema que le veo a este sitio es que, ahora mismo, está siendo muy exitoso y cabe la posibilidad de que vayas y sea imposible sentarte, así que recomiendo la temprana reserva. Ah, y el precio estupendo, tan solo 15 €; los he tomado peores siendo más del doble de caros.
Lolo R.
Classificação do local: 5 Madrid
Creo que ya tengo restaurante favorito al lado de casa para los restos de mi eternidad. El Ferry se ha renovado, y aunque yo no soy de los que lo conocían con anterioridad, puedo decir que estoy seguro de que ha mejorado en muchísimos aspectos, porque ahora mismo es… simplemente inmejorable. Lo que era una cafetería de toda la vida de la zona de Sandoval, ahora es un restaurante maravilloso con una carta corta, concisa, pero llena de pequeños tesoros. La estuve revisando por encima y me apetecía todo, de verdad. Y encima estaba todo a unos precios más que asequibles. Pero para asequible, el menú del día. Por tan solo 10,20 €, tienes una comida de dos platos, bebida y postre. Tienen una carta de vinos más que decente, y si eres de los que llevan prisa y no eres demasiado tiquismiquis, puedes comer el mismo menú en la barra por 7 €. Vamos, que te sale infinitamente más barato que comer en casa: entre los productos, la vitrocerámica y lo que gastes en lavar los platos de agua y gas(o agua y electricidad, para los afortunados que tenéis lavaplatos) creo que es más barato comer en El Ferry. Ahora lo que importa: empezaré diciendo que el local es súper chulo. Tiene así como un toquecillo vintage que me flipó, con unos espejos en forma de ojo de buey que lo hacen parecer un barco. Cada mesa tiene un mantelito de cuadros tradicional de un color, lo que le da un toquecillo moderno, pero sin pasarse. Los camareros van impecables, y la barra es de estas de estaño, con bien de pizarras encima anunciando platos, vinos, smoothies, gin tonics… Un sin fin de cositas que apetece probar. En el ¿hilo musical? sonaba jazz. Muy agradable para una comida de menú del día, la verdad, y más tranquilito que la media de los restaurantes que ofrecen algo semejante. Y ahora la comida: cada día el menú cambia, y cada semana también. Los fines de semana hay brunch, y los días de diario, cocina tradicional con un toque modernete. Yo tiré por una ensalada tibia de calabaza y jamón que era un primor, estaba realmente deliciosa, y de segundo, lubina a la espalda, que también estaba increíble. Antes de empezar me pusieron un pinchito de tortilla y pimiento de padrón que oye, era una cosa súper facilona, pero estaba también bien rico. Solo puedo poner un pero: que a la hora de mi postre /café pareció que todos los camareros desaparecían, y tuve que prescindir de él porque llegaba tarde a una cita. Pero ni siquiera eso empañó la increíble experiencia. Id. Pronto.
Daniel L.
Classificação do local: 5 Madrid
Solía pasar por delante de El Ferry cada vez que iba al trabajo y, al fondo de esa barra larguísima, veía siempre al que suponía ser el dueño totalmente sólo, mirando los días pasar. Pero tan alucinado estaba con la barra que decidí entrar un día, y el tipo fue seco y malhumorado con nosotros. Al poco el sitio cerró, y así se mantuvo un tiempo mientras yo pensaba en el potencial que tenía el sitio. Pero hace unos meses volvió a abrir sus puertas, reformado, cambiando el triste marrón por un azul que tenía que ver mucho más con el nombre, que conservaron. La decoración recuerda al mar, pero sin ser ridiculo ni estar sobrecargado. Ahora el sitio lo lleva un señor que estuvo tiempo trabajando en cafes en EEUU, y se ha traido toda esa cultura de buen trato, además de platos típicos americanos dificiles de encontrar en Madrid. He estado ya unas 3 veces y siempre he salido encantado. La primera vez quedé con un amigo a tomar unas cañas, y tapa tras tapa fuimos quedando alucinados. La primera una tortilla española espectacular, y luego los atentísimos camareros fueron preguntándonos y trayendo una tapa distinta cada vez(todas gratis por supuesto): una ensalada fría de lentejas con trocitos de tocino por encima para elevar el sabor, albóndigas suecas, mini hamburguesas. También he probado el menú del día, en esta ocasión pude probar su delicioso chowder, sopa típica americana. El dueño se acercó esta vez a charlar con nosotros, y nos confesó que les está costando un poco al principio, así que animo a todo el mundo a probar este sitio, ¡necesitamos sitios cuidados, de trato atento y amable y con comida un poco diferente en Madrid! Me quedan por probar sus crab cakes, aunque también tienen smoothies, cócteles, y un brunch con una pinta tremenda que no me pienso perder. ¡Hay que ir!