El Ensanche

Tengo dos gatas bastante «especiales»… con algunos problemillas de salud. Hace un año me mudé a Madrid y me preocupaba bastante encontrar una buena clínica veterinaria.
En este centro todo el personal sabe manejar bien a los mininos (y perros, que los he visto de tamaño caballo rindiéndose ante sus mimos y chuches).
Esto es importante… quiero decir; mi anterior veterinario, tenía tanto miedo a que mis gatas le sacaran un ojo (miedo justificado), que normalmente las manipulaba yo, y para casi cualquier prueba tenía que sedarlas (son un poco salvajitas cuando se enfandan).
Con las veterinarias de El Ensanche… me quedo a cuadros. Gruñir gruñen, como no, pero se dejan hacer analíticas, placas y demás torturas con bastante resignación.
Diagnósticos acertados, tratamientos y buen seguimiento.
Conocen cada peludín por su nombre y su historia, tienen una paciencia infinita con los dueños (puedo dar fé de ello)…
Ante urgencias o agobios no dudan en atenderte sin cita. Les gusta su trabajo y se nota.
Además, colaboran con una O.N.G de adopciones y acogidas de animales, que se llama Nueva Vida.
La clínica es pequeñita pero suficiente y los precios normales. En nombre de mis fieras, la recomiendo: D.