Mi comentario es sobre el Pub-karaōke que se encuentra debajo del restaurante y que pertenece a los mismos dueños. Los precios me parecen abusivos, y hay obligación de consumir un mínimo de 6 euros por persona; esto es algo habitual en muchos locales de este tipo pero lo que no considero normal es el trato que recibes del personal del local, muy poco amables y educados a la hora de ‘informarte’ sobre esta condición… En el local hace mucho calor y no está bien ventilado. Lo mejor: buen ambiente y espacio Lo peor: los precios, el trato del personal y la climatización del local.