Buenísima charcutería, no sólo por sus jamones y lomos ibéricos, sino también por sus quesos nacionales y de importación. Catalogaría este establecimiento como tienda delicatessen. Vende otros productos también muy ricos como son el salmón o las conservas. Muchas veces tiene unos dulces muy tradicionales de Castilla y León que se llaman socorritos y también polvorones. El dependiente es encantador, en la tienda te hacen sentir como en tu casa. Como están charlando con los clientes mientras trabajan y sirven los embutidos, el tiempo de espera te parece más corto… me encanta marujear ¡Upps!