No vuelvo a este inmundo bar-cafetería-antro. A parte de que la comida no era para tirar cohetes, el jeta del dueño es capaz de cobrarte extras de donde no los hay. Mi acompañante pide un menú con vino y casera y yo pido una hamburguesa. En la cuenta final me cobran como extra un vasito de vino que cogí al que lo había pagado con el menú. El dueño al quejarme, argumenta que estoy utilizando un vaso y un sitio en la «terraza» por llamarlo de alguna manera. A pesar de quejarme, me sigue cobrando la bebida, pero ni si quiera de manera proporcional. Me pedí una hamburguesa de 2.80 euros y por darme un vaso que relleno con la bebida pagada por mi amigo me cobra 3 euros. Ni siquiera es capaz de empatizar al explicarle el argumento lógico y razonable de que eso era un sinsentido. En definitiva: un jeta con un bar cutre y sucio que no recomiendo a nadie. Pierde más que gana con ese criterio y actitud. No vayáis a este lugar. Cualquiera de los del barrio te ofrece mejor servicio y sin duda mejor comida.
Susana I.
Classificação do local: 5 Madrid
Bajo su aspecto descuidado la cafetería y marisquería Nabor ofrece desde hace muchos años una buena terracita para los días de calor para tomarse una buena cañita y si el bolsillo lo permite una ración de gambitas a la plancha. No he probado toda su carta, pero tanto por el aspecto de las raciones de otras mesas como por lo que pedí yo, puedo decir que bajo su aspecto humilde se encuentra un buen bar para tapear por un módico precio, para ver un partido de fútbol y disfrutar de los amigos. Por cierto, decir que tiene raciones de mega tamaño así que sólo por eso se merece cinco estrellas. PD: Dedicado al Scout Nabor.