Mi peluquero de toda la vida. Comenzó hace muchos años(prefiero no recordar cuantos) en otra calle para posteriormente trasladarse al sitio actual. La peluquería está dividida en dos, una zona de señoras y otra de caballeros, separadas por un tabique y con acceso desde la calle por puertas diferentes. Algunos clientes agradecen esa intimidad. La parte de señoras no la conozco, pero la de caballeros sí. Disponen de 4 sillones aunque lo más frecuente es que haya 3 peluquero expertos atendiendo simultáneamente, con lo que la espera es mínima. Todo, sin excepción, son unos profesionales. Puedes pedirles cualquier detalle que lo van a conseguir y lo mejor es que van a esforzarse por satisfacerte. No van con prisas, se toman su tiempo. Usan la maquinilla sólo si es imprescindible. La tijera y la navaja son su fuerte. Y no les gana nadie. Se agradece que se respire la profesionalidad por todos sus poros y eso hace que yo aproveche cualquiera de mis viajes a Madrid para ponerme en sus manos. ¿Quieres otra razón para ir? Sólo cuesta 8 euros el corte de caballero. Olvídate de grandes firmas o de peluqueros de alto standing. Aquí saldrás mil veces más contento y sin el bolsillo vacio.