Aliño

Actualizo esta reseña porque, la verdad, lo he redescubierto y prácticamente todos los viernes termino aquí comiendo. La cosa es que la primera vez que fui me pareció todo un poco insípido, pero ahora… la verdad es que este lugar me encanta. El menú del día cuesta 5,50 € (en serio, literalmente te sale más caro comer en casa) y por ese precio tienes dos platos y una bebida.
De primero siempre hay una crema, aunque puedes elegir también ensalada o una pasta. Las ensaladas son a gusto del consumidor, y siempre partiendo de una base y añadiendo los aliños que tengan ese día. También hay para elegir pastas, pollo asado con verduras, pollo al curry, a veces hay algún arroz con algo…
Por un euro más añades pan, por otro, postre. El sitio está siempre a reventar, y puedes comer allí o puedes pedirlo para llevar. ¡Como gustes!

Nunca tendré queja de este sitio. Las propietarias son chicas encantadoras y educadas que siempre te atienden con una sonrisa. Los precios son muy normales y económicos. Yo siempre opto por el menú pequeño (5,5 € con primero, segundo y bebida) o el grande (7 € con primero, doble segundo y bebida). La comida siempre es excelente y muy casera, siempre tienen un buffet de ensaladas donde pueden hacer tu propia ensalada eligiendo entre 4 bases (pasta arroz cuscus o lechugas) 8 ingredientes extra que puedes añadir desde uno a todos los que tienen sin precio adicional (queso, picatostes, tomate, maíz, aceituna, atún…) y varias salsas para acompañar. También siempre suele haber una ensalada de lentejas, hummus, tortilla de patatas, pizzas, pastas con distintas salsas, pollo al curry o con verduras asadas. Los postres, también caseros salen a 1 €, 1,5 € o 2 € y son yogur con mermelada, brownie o tarta de queso. Está todo muy bueno y es muy recomendable. La filosofía del sitio es comida sana, ligera y preferiblemente vegetariana. El sitio está decorado con muy buen gusto. Los únicos defectos, que en realidad no lo son porque todo lo bueno que ofrece aliño lo tapan es que no se puede pagar con tarjeta, las bebidas comerciales (coca cola, fanta, cerveza) tienen suplemento, no hay baño, el local es pequeño (está más pensado para llevarte la comida).

¡Viva malasaña! Si me dijeran que pensara en tres bares de malasaña que sean una representación del barrio, diría el Aliño sin duda.
Este sirio es BIO, eco, y todos los adjetivos hipsters que os gusten. Tiene la comida perfectamente etiquetada por alérgenos, para vegetarianos, para… para todos.
La filosofía es take away, pero tiene unas mesitas para tomarte algo en barra. Cuentan con un menú súper barato y que cambia cada día.
¡Viva Aliño!

Aunque no se declare un establecimiento de comida vegetariana siempre tiene una opción dentro de sus múltiples platos. Suma puntos que el menú sea todo el día, ya que puedes cenar perfectamente por menos de 10 €. El único inconveniente es que es un establecimiento pequeño, pero si vas pronto tienen unas cuantas sillas y barras que estarán libres. De todas formas siempre lo puedes pedir para llevar, que es la idea original del local.

La pena de este sitio es que no me pille más cerca de casa! Todo tenía una pinta estupenda y a precio increible. Tienen menú por 5.50 euros que está genial, fuera del menú las raciones rondan los 3 euros. En el local, aunque es pequeño, hay mesas y sillas altas por si quieres comer alli. Yo pedí una focaccia de atún muy rica!

Rico y hecho en casa.
Apto para veganos y vegetarianos.
Té frío o limonada primer plato (elegir entre: gazpacho. crema verduras, humus, ensalada al gusto…) y segundo (pasta, arroz, cuscus con verduras, lentejas veganas, pizza vegetariana, etc) por 5.50
Lo bueno es que lo puedes ver a través de la vitrina para elegir lo que más te apetece. Es pequeño pero acogedor si te quedas a comer dentro.
Personal amable que te reciben y atienden con una sonrisa siempre!
Muy recomendable.

The staff is incredibly friendly and you really can’t beat the price of the daily menu (5.50 € for 2 plates and a drink!).

Healthy food! Very affordable (€ 5,50 menu) and generous portions. Sweet and friendly attention, what do you want more! Love the fresh lemonade :)

Quieren ofrecer comida casera para llevar y vaya si lo hacen. Son prácticamente las mismas elaboraciones que puedes conseguir en tu casa. Todo de estilo vegetariano pero sin llevar a ser radical, hay queso y huevos en sus preparaciones. Y muchos de los platos tienen una fuerte tendencia asiática.
Local mono y los dependientes son encantadores.
Pedimos de primero una ensalada de lentejas y hummus. Ambos muy buenos, pero especialmente el hummus. Para acompañarlo, una focaccia de aceitunas normalita.
De segundo, unos tortellinis al pesto, con queso, muy caseros. Y un arroz thai muy, m bueno. Pero lo que más me gustó fue el postre, la mousse de chocolate espectacular, tuve que repetir (eso sí, parecían más unas natillas, pero riquísimas) y una tarta de queso que no destaca mucho.
Para beber, una limonada. Aunque tienen muchos tipos de batidos y zumos. Pero no soy muy admirador de esas cosas.
Resumiendo, una comida vegetariana casera perfecta para llevar y muy rica. Es lo que encontraremos, sin cosas raras ni pretensiones, aunque con algunos platos interesantes. Un precio comedido para lo que solemos encontrar hoy en día. La ración pequeña sale a 3,5 €, la mediana a 4,50, etc. Total, hoy por hoy los bocatas sale a casi 3 €…
¡Saludos!
P.D.: Lo que ya no he visto son salteñas :(

Qué puedo decir del Aliño excepto que soy requetefán del lugar desde que llegué a Madrid.
Yo, como tantos otros Unilocalers, soy de esas personas a las que las paredes de la casa se les caen encima si pasan más de media hora seguida en ella. Me encanta callejear, perderme por la ciudad y descubrir sitios nuevos. Y Madrid, de todas las ciudades que conozco, es probablemente la que más se preste a ello. Todo esto está genial, sí… pero a los que nos pasa esto a menudo nos da la hora de comer y vemos que de repente la casa nos pilla bastante lejos, que por la tarde queremos seguir la marcha y que un parón de dos o tres horas para ir y volver suele ser una molestia pero que muy, muy grande. Y claro, comer fuera está bien, pero si se coge por costumbre se acaban resintiendo muchísimo tanto el estómago como la cartera, y tampoco es plan.
Por eso el día que descubrí el Aliño flipé. Fue una especie de respuesta cósmica maravillosa que solucionaba todos estos problemas. Un take away en pleno Malasaña, abierto de la mañana a la noche, con un menú que incluye bebida, primer y segundo plato por 5,50 € y no sólo a medio día, sino siempre que está abierto.
La comida que se sirve aquí es muy sana. Casera y poco contundente per se, pero en general bastante rica y servida en buenas proporciones. De primero suelen tener siempre cremas de verduras, gazpacho, hummus y un buffet de ensaladas que a mi me pirra. Yo suelo pedir el cous cous con un poquito de todo, y como aliño elijo la olivada… ¡un gran acierto si os gustan este tipo de platos! y de segundo tienen verduritas asadas con pollo al curry, platos de pasta, lasañas y algún especial del día. Al menú además se le puede añadir por un euro el postre, panecillos o un café, para quien no pueda vivir sin alguna de estas cosas.
En cuanto a la selección de bebidas, hay que tener en cuenta que la filosofía del local es la de proporcionar una alternativa sana. Por eso no ofrecen refrescos tipo Coca-​cola, aunque eso es algo que no se echa en falta cuando se puede susituir por una limonada casera (a veces un pelín amarga, pero para eso hay edulcorantes), un té helado o un zumo de frutas.
La calidad es bastante buena. Es cierto que son platos preparados, y que a veces la pasta con las salsas por ejemplo se puede quedar un poco seca. Pero no deja de ser un take away muy barato, y la relación calidad-​precio a mi me parece excelente. En cuanto a cantidades, sin ser exageradas tienden a ser generosas. De hecho, yo alguna vez que he ido sin mucho hambre me he tomado el primero en el local y me he llevado el segundo en un tupper para no cocinar al día siguiente. Aunque de normal, como buena comedora suelo acabar con todo. Por supuesto, para quien tenga poco apetito también está la opción de pedir un único plato, con raciones de tamaño variable que oscilan entre 1,50 € y 3 € que garantizan quitar la gusa a media jornada.
Todo esto en un local pequeñito y acogedor, que cuenta con unas mesitas altas para quien no quiera llevarse la comida fuera, y atendido por un personal amabilísimo.
Se me pueden ocurrir sitios más suculentos o más originales donde comer por la zona, pero en poquitos he parado tantas veces y me he sentido tan a gusto como en este.

No soy de verde amig@s, soy de aquellos que opinan que el humano «no debe comer lo que come la comida», sin embargo, mi circulo mas cercano Merche M y Ana C son como dos cosechadora con patas, y disfrutan con los cultivos en multiples dimensiones.
Ibamos de paseo sabadero, sin mucho cash en el bolsillo y con poco tiempo para comer, dejamos la decisión en manos de Ana C (maldita hervibora adorable) y al aliño que nos llevo. Tiene un menu de 5,50 (more or less) que incluye:
Primer plato: Ensalada con los ingredientes que quieras, salsa y pasta o semola.
Segun plato: Pasta, lasaña o similares
Bebida: Agua, limonada natural, zumos.
La realidad es que a pesar de mis manías es un sitio muy apañao, con muchísima variedad y que expresa un buen-​rollismo muy poco habitual en estos negocios de comida para llevar, la comida esta excelente y tienen un pesto que como diría un amigo «se te va la olla».
Partiré una lanza en favor de mis dos ojitos derechos, despues de comer se me quedo muy buen cuerpo, será que lo verde te hace sentir bien? No se, os lo contaré en la proxima burger XD.

Comer en la oficina es la pesadilla diaria de la mayoría de los españoles. Encontrar un tupper para rellenarlo con algo decente es un verdadero drama. Sitios como Aliño facilitan esta tarea con una opción sana, bastante natural y a precios muy asequibles, pudiendo comprar un plato desde unos 3,5 euros y con menús muy muy económicos.
Es una tienda de comida casera para llevar, sencilla, nada pretenciosa y hasta con opción vegetariana y light. Tienen distintas sopas y cremas, carnes con verduras y hasta postres. Te lo ponen todo en una tarterita para microondas para que te la puedas llevar directamente a comer.
Los chicos que atienden (y me imagino que también cocinan) son encantadores y amabilísimos.
Un lugar perfecto para ese día en el que no te ha dado tiempo a hacerte un tupper y no quieres comer guarrerías.

Un sitio excelente. Sencillo, pequeñito con comida para llevar y muy sana. El menú con primero, segundo y bebida 5,50 €. Por un euro extra agregas otras cosas.

La zarrapastrosidad, el guarrerío y la improvisación es el sanbenito que les ha tocado cargar a los locales de comida vegetariana. Y es que la mayoría se lo ha ganado a pulso.
En este caso no está totalmente justificado ya que es un pequeño local con encanto en una de mis calles favoritas de Madrid (Espíritu Santo). Ellos son encantadores y el surtido de comida es una maravilla. Ahora bien, el tema vasos y cubiertos de plástico si te quedas a comer en la mesita o la barra que tienen dentro es una cerdada y absolutamente antiecológico…
De cualquier manera, muchas opciones de comida vegana que, ¡oye, está buenísima! Recomiendo las verduras al horno (tipo escalivada), el hummus y sobre todo el pan de aceitunas, tipo focaccia y grandote y cuadrado mmmmm
De beber hacen limonada o té con limón caseros, no dejes de probarlos!
Ah, vete con efectivo, no acepta tarjetas (y esto en el S XXI… Ejem).

Stumbled upon this restaurant and had a yummy and healthy dinner for 5.50 euros with a primero– hummus, segundo– grilled chicken with veggies and cous cous and a fresh lemonade drink. Loved the ciabatta bread to eat with the hummus. Cute little place and was a good healthy option since my body is still so jet-​lagged. If youre in the area and want something healthy and light, this is your place.

El otro día andaba de compras con unos amigos por detrás de tribunal y nos dio la hora de comer, uno de los colegas entraba a trabajar por la tarde y ya no le daba tiempo a ir a casa. Entre eso y el solazo que alegraba el día decidimos pillarnos algo de comida y sentarnos en una plaza a comer.
Pasamos por delante del Aliño y tras descubrir en el cartel del menú que tenían hasta 5 platos para una vegana como yo, embriagada por el entusiasmo que conlleva encontrar un lugar así y saber que vas a poder comer bien aunque estés fuera de casa, no me lo pensé dos veces y entré.
Me pille un menú, super barato = 5,50, que incluia un primero, un segundo y la bebida.
De primero había tres opciones veganas: humus, gazpacho y ensalada verde. Me quedé con el primero porque lo mio con el humus es un amor a prueba de barreras, y he de decir que estaba muy rico, con el toque justo de limón y bastante pimentón.
De segundo podía elegir entre verduras variadas o ensalada de lentejas. Me comí las lentejitas con su cebollita y su tomatito, mmm que ricas y que fresquitas estaban!
Por un euro más me pedí un pan cuadrado de aceitunas para acompañar el humus.
La chica que estaba atendiendo era muy sonriente y amable. Se notaba que había buen rollo en el ambiente.
Sin duda repetiré.

Siempre me ha dado mucha curiosidad las tiendas que venden comida preparada y para llevar. No me refiero a las pizzas cuadradas o a las hamburguesas o bocadillos sino a distintos guisos caseros. Por alguna razón predominan más en ciertas zonas, por Sol, Plaza Mayor y Chueca prácticamente no hay, a diferencia de La Latina y sobretodo Malasaña donde hay varios y de diferentes estilos.
Aliño debe ser el más conocido de este tipos de negocios. Se encuentra al principio de la calle Espíritu Santo, entre bares y más bares. El local es muy reducido y tiene una pequeñísima barra para recargarte por si quieres comer ahí, aunque lo más recomendable es llevarlo y comer en casa. El tipo de cocina no se puede categorizar, es muy variado, tienen diferentes ensaladas, couscous, pollo al curry, makis, pizzas, entre otras cosas. La calidad es completamente casera, nada espectacular.
Recomendable para esos días en los que uno desea comer algo ligero en casa y no tiene tiempo para prepararlo.
A medio día tienen menú por 5 euros.

Sólo he comido una vez comida del Aliño!
Creo que soy la única persona que ha comido allí en la microbarra sin llevarse la comida a casa.
Tienen menú del día (es el mas barato de la calle). La comida no me pareció muy allá pues no estaba muy bien condimentada.
La chica es bastante maja, y el tiempo que estuve comiendo allí vi que entraba bastante gente con la que la camarera tenia muy buen rollo, así que supongo que eran fieles clientes!!!
Como me quedé con hambre, me pedi un mollete caliente, que me comí por la calle. Este si que estaba bien lleno.

A veces he comprado los menus que tienen diarios por unos 6 euros, es comida casera y bastante buena.
Pero he de confesar que soy superfan de su gazpacho en verano, esta muy suavecito pero con muy rico con mucho sabor y no repite.
Tambien he comprado Makis, a 0,50 €, un pelin caros pero estan bastante buenos y te sacan de un apuro.
Y se que abren los domingos pero siempre se me olvida, para esos días de resaca que no te apetece cocinar tiene q estar superbien.