Me encontré en Lugo con una antigua compañera del trabajo, y tras pasar una tarde-noche de jueves de cena y vinos, quedamos el viernes por la mañana para llegarnos hasta el mercado de abastos. Yo buscaba aguardiente para mi padre y ella nada en concreto, …, al final me tocó ir solo. Me llamó la atención las dos plantas del Mercado. La inferior estaba ocupada por un sin-fin de señoras principalmente que vendían sus productos artesanos y de la huerta. Chorizos, quesos, miel, huevos, grelos, empanada, etc. Como tenía tiempo, y ya he metido la pata en mil ocasiones por acelerado, me subí a la planta de arriba a ver los puestos, que en este caso eran locales comerciales. Lo de siempre, carnicerias, pescaderias, fruterias, etc. Me llamó la atención lo limpio que estaba todo, y el poco ruido que había(o que me parecía que había pues la planta de abajo era un completo guirigay). al final, me bajé a la planta de abajo a regatear con la abuela de turno el precio unitario de los chorizos, los chicharrones y las galletas que compre. Que ricos los grelos!