Definitivamente, me encantó el Harley. Situado en plena Plaza Mayor de León, en el corazón del conocido como Barrio Húmedo, y a escasos 200m de la famosa catedral, el Harley es una opción perfecta para ir a ver cualquier evento deportivo, para tomar la primera copa de la noche, o para disfrutar de la inmensa carta de cervezas de la cual disponen. Nada más entrar te encuentras un local amplísimo, decorado al más puro estilo americano, con alguna que otra Harley Davidson, banderas colgadas del techo, placas de matrícula de varios estados de Estados Unidos, surtidores de gasolina antiguos restaurados y una enorme barra circular. Además, cuenta con multitud de mesas alrededor separadas individualmente al más puro estilo americano y con varias pantallas repartidas por todo el local, lo que le convierte en el local idóneo para disfrutar de cualquier tipo de evento deportivo. Yo, al menos, me imaginé viendo la Superbowl en este bar, y eso que no soy un gran aficionado al fútbol americano. Otro de los rasgos característicos del Harley es su gran variedad de cervezas. Tal es así que tienen una carta exclusivamente de cervezas, agrupadas por su país de elaboración, y en la que te hablan un poco de cada una, comentándote los grados de alcohol que tienen y una pequeña historia. Me pareció un detalle genial. Aún así, y como ya era algo tarde, yo me pedí una copa por la que me cobraron 5.80 €. Bien es cierto que por el Húmedo esto es un precio superior al de la media, pero a mí no me pareció caro para lo cómodo que estuve y lo bien que me supo. Echando un pequeño vistazo alrededor podrías comprobar que estabas rodeado de gente joven pero no demasiado, de entre 20 – 35 años, que creaban un ambiente bastante distendido. Además, y con lo que acabaron de ganarme, por el hilo musical sonaban canciones de Franz Ferdinand, The Kooks, Jet, Oasis y demás grupos imposibles de escuchar en un local en mi Ávila natal. En definitiva, local en el centro de León que me encantó y al que volveré cuando vuelva a visitar la capital leonesa.