Fue nuestra ultima parada antes de finalizar nuestra visita por León y ni fu ni fa, porque veníamos de comer tapas altamente positivas y claro puesaqui las tapas eran mas escasas y cutres que lo anteriormemte deleitado. No obstante, se podian comer perfectamente y de precio estaba tambien bien. De todos modos cuando vas a una ciudad nueva, desconoces cuales son los lugares donde se puede comer con fundamento pero solo por la cantidad de personas que puede haber ya te lo puedes.imaginar. En este caso aunque no habia mucha gente. le dimos una oportunidad al estar en la plaza san martin que era donde estabamos. Nos pusieron de tapa un tigre que era como una croqueta y que fue lo mas rico, patatas bravas, calamres y fingers de pollo que eran normalitos
Eva R.
Classificação do local: 5 Barcelona
Con este sitio me une una relación casi familiar porque llevo visitándolo casi todos los veranos desde que tengo memoria… Pero vínculos emocionales aparte además lo recomiendo totalmente por la alta calidad y el sabor de sus platos. Mis imprescindibles son: — El salpicón de marisco, que a pesar de que es un poco caro merece muchísimo la pena y la ración es muy grande, de sobra para dos personas. — Como plato principal he probado varios pero en León es casi obligatorio pedir un plato de carne. Os recomiendo la paletilla de lechazo asado, que sirven en tabla de madera con un poco de lechuga y unas patatas fritas deliciosas! — De postre, me gustan todos, pero suelo pedir la tarta de San Marcos, la tarta de queso o el pijama, que es un plato que combina fruta con helado y otros dulces. La entrada es una escalera que desciende a un nivel subterráneo que parece una cueva. Por eso en verano, la piedra que recubre las paredes hace que haya un ambiente muy fresquito. El precio es medio, y muy bueno en relación con la calidad que ofrecen. El trato es fantástico, siempre preocupados por si te gusta la comida y muy atentos y sonrientes. Majísimos, vamos… Y el ambiente es muy familiar ya que está regentado por una misma familia desde hace muchísimos años. De verdad, si vais a León no podéis perderos este restaurante.