Vía Romana

La visita al Vía Romana es obligada. Es de lo mejor de la zona y para certificarlo nos encontramos con la dificultad que hay para reservar. Siempre está lleno. La atención de todos y cada uno de los camareros es excepcional, diría que nunca he visto nada así, orquestados por un encargado de sala, Pepe, que es lo mejor que he visto trabajando en hostelería.
De la carta lo destaco todo. Las foccacias, los champiñones rellenos de piñones y parmesano, las pastas frescas y sus diferentes combinaciones con salsas, las pizzas… Ahora bien mi recomendación es la siguiente: preguntad siempre qué platos tienen ese día fuera de carta porque suelen ser exquisiteces. Pastas frescas con pollo, pasas y hongos reducido con pedro ximenez, raviolis de ternera con trigueros y hongos con salsa a la pimienta, pasta fresca con caviar y cigalitas con salsa de gorgonzola… en fin… es un festival culinario. RECOMENDADISIMO.