Queríamos venir a este sitio tras conocer su existencia tras el REC y no nos ha decepcionado. Es un ambiente tranquilo y acogedor, se encuentra dentro de un vivero para que os hagáis una idea. En cuanto a la comida puedo decir que estaba muy buena, relación calidad precio excelente. Es comida tipo brunch, tienen una cocina pequeñita y por lo que vi solo sirven platos fríos. Tienen un menú de medio día por 8 € en el que te puedes hacer una buena idea de su carta.