Hemos estado varias veces en el centro comercial Holea, y siempre hemos visto este lugar bastante lleno. Eso es lo que nos empujó a probarlo. Pero la verdad es que salimos bastante decepcionados. Esperábamos unas tartas o pasteles caseros y sabrosos, pero nos encontramos poca variedad y unas tartas muy bien presentadas pero con poco sabor. La tarta de queso prácticamente sabía a leche y la tarta de tres chocolates estaba poco cargada de chocolate. Para nuestro gusto, fueron dulces bastante insípidos. Bajo mi opinión, han querido abarcar demasiado(desayunos, almuerzos, meriendas, cenas, copas,…) y no le dedican mucho esfuerzo a la calidad de lo que tienen.