Cafeteria de la Epsg

Más de media vida metido ahí dentro. Sus cocineras han tenido tanto o más que ver en mi alimentación que mi propia madre. Se trata de una cafetería universitaria que se llena todos los días.
Tiene buffet, en el que coges una bandeja, y puedes elegir entre varios primeros, varios segundos, postre, pan y bebida por menos de 5 €. Si eres universitario, incluso menos. Déjate llevar por tus impresiones. Si la paella tiene buena pinta, seguramente esté buena. Si la pasta parece seca, seguramente lo esté. No recomiendo las patatas fritas, pero el resto, está todo bastante rico. Los postres son caseros, y las natillas y flanes casi siempre están de rechupete.
Si la cola del buffet es muy larga, puedes pedirte una hamburguesa o un bocadillo con refresco, que muchas veces tardan menos.
Los cafés y las cervezas son también más baratos que en cualquier otro bar. Al fondo a la derecha, tienen comedor, donde la gente de fuera de la universidad va a pedir su menú o platos a la carta.
La terraza es enorme y puedes mover las mesas con total libertad al sol o a la sombra.
Estudiar en la cafetería también es un clásico. Eso sí, siempre por la tarde, cuando no hay tanta gente y no se necesitan las mesas para comer.
En definitiva, un sitio agradable, con servicio agradable y eficiente en el que puedes ir a comer, almorzar, merendar o, simplemente, a tomar un café sin que nadie te mire extraño por no ser de ahí.

Cafetería universitaria con todo lo que ello implica: precios bajos, horas punta llenas de jóvenes hambrientos y cocina abierta sólo hasta media tarde.
El ambiente tranquilo del campus de Gandia de la Universitat Politècnica de València se contagia y consigue que la cafetería sea un espacio en el que siempre se suele estar muy cómodo. La atención de los camareros es buena.
El menú de mediodía, si perteneces a la comunidad universitaria, está por debajo de los 5 € y tiene una calidad más que aceptable. El resto de productos (bocatas, cafés, tapas…) permiten llenar el buche sin que el bolsillo se resienta.
Un lugar estupendo, luminoso y amplio en el que reunirte con los compañeros de carrera o trabajo para tomar algo.