Correo

Uf este es un lugar de encuentro en las mismas Tendillas, cañas y más cañas, también puedes tomar unas latas de mejillones anchoas y del estilo, pero recuerda que la barra es mínima y todo el mundo sale a la calle a beber de pie sin ensuciar la calle y molestar a otros negocios ni vecinos.
Este lugar es ideal para tomar unas cervezas antes de ir a almorzar y como zona de encuentro para reunir al grupo de amigos.

El Correo. La referencia para comenzar el mediodía de cervezas en el centro, porque este lugar es donde a menudo masivamente acude la gente a echarse su fresquita rubia antes de ir a comer o tapear por ahí o seguir de tasca en tasca. Tanto si hay plan de esto como de tomar un par de frescas rápidas, sin duda es excelente.
Es bastante fácil localizar este lugar de trayectoria familiar (esta casa está fundada en 1931 así que algo ha llovido, incluso me acuerdo de venir aquí de pequeño con mis padres para luego tapear con gambas y «pescaíto») porque, a pesar de ser muy chiquito (el bar en sí es un cubículo de menos de 10 metros cuadrados, con su tradicional barra metálica añeja, donde no cabe ni un alfiler), es bastante reconocible por el gentío que se aglomera en la calle frente a su puerta. De hecho, al bar sólo puedes entrar a pedir y salir, porque es infernal quedarse dentro estampado contra la pared.
El encanto de este sitio reside quizás en eso, en echarse las cervezas en la calle, al sol y disfrutando del buen tiempo, de pie viendo el ambiente.
De este bar lo más popular sin duda es Manolo, el señor que lo regenta. Es legendaria su gran habilidad para tirar una buena cerveza fría con la espumita justa, así como legendaria es su antipatía. Aunque yo nunca lo he comprobado, parece ser que si se le pide otra cosa que no sea cerveza se le cambia la cara (creo recordar que se especifica que sólo se tira cerveza, no hay combinados ni otro tipo de bebidas), aunque juraría haber visto gente tomando otro tipo de refresco. Yo por si acaso, y además porque me gusta mucho la cervecita fresquita, no le pido otra cosa.
Vamos a ver, resumiría así: al Correo se viene a beber cerveza al sol, y después a peregrinar de tapas por ahí. No te arriesgues a pedir otra cosa ;)

Se va porque se va, porque es el Correo y es un punto de encuentro donde tomarte la primera caña. Y la última si te echa Manolo.
Se vuelve por Manolo, porque has quedado y porque tira cerveza muy fría.
Manolo es el dueño del Correo, lo era también su padre, es un negocio de familia (el Carrasquín que está a la vuelta también es de su familia). Manolo es tabernero cordobés, con su falta de simpatía, pero es capaz de hablarte de lo divino y lo humano si le das palique interesante.
No hay mucho más que contar: la caña a 1’20 €. Nada de claras, de tintos con casera o de inventos modernos. Lo más un medio.
Tiene latas de conservas por si quieres acompañar.
Cuando veas a Manolo echar el trapo sobre el grifo ya va siendo hora de que te vayas a otro lado.

Cervecita muy rica y especial. Sitio de sitios en Córdoba. Junto a las Tendillas. Para tomarte unas cervezas de pie en la puerta mientras se charlotea (el local es muy chico).

La primera siempre en el Correo. Parece que es la máxima de muchos, que cuando quedan por el centro o que necesitan hacer tiempo, acuden a tomarse la primera cervecita el Correo
En pleno centro de Córdoba, en una de las esquinas de la plaza de las Tendillas se encuentra uno de los bares con más solera y tradición de Córdoba (abrió en 1931), donde tanto locales como foráneos disfrutan de una caña fresquita y bien tirada.
El Bar Correo es un local de reducidas dimensiones (apenas diez metros cuadrados) donde encontrarás la barra del bar (metálica, de las de toda la vida) y poco más. Pero es parte del encanto del Correo, la cerveza la tomas en la calle. Viendo pasar a unos y otros, encontrándote con amigos y conocidos y disfrutando de un ambiente agradable a principio de la calle Jesús María.
El Correo lo regenta Manolo, conocido por su «simpatía», al que no deberías pedirle NUNCA un combinado (ni una clara, ni un tinto con casera o limón, etc.) que ya lo advierte en los carteles que tiene a su espalda tras la barra. Luego no digáis que no os lo advertí.
Si pica el gusanillo puedes acompañar tu cervecita con alguna de las conservas que tienen. La gente suele pegarle a las navajas, así que supongo que estarán buenas ;-)

Un bar típico cordobés para tomar unas cervecitas con los amigos.
Está en plena Plaza de las Tendillas y merece la pena pasear por la calle Jesús y María donde también encontrarás tiendas artesanas de dulces.

Es un bar muy popular de la zona centro de Córdoba, es más, si no sabes donde está exactamente, solo hace falta que te acerques a las Tendillas y allí busques a un pelotón de gente que este bebiendo cerveza en la calle. Si está abierto te será fácil ubicarlo, si está cerrado será más difícil, porque el bar es minúsculo y únicamente tiene el portón.
Lleva abierto desde 1931, el señor que lo lleva, que no siempre es muy simpático, es el nieto del fundador, el nombre Correo, se refiere a la antigua estafeta de correos que existía en la época en la calle.
Como decía es un bar muy popular, que todo el mundo conoce, y donde todo el mundo va a tomar unas cervecitas antes de la comida o a última hora de la tarde antes de salir. No estoy seguro si vende algun otro tipo de bebidas además de cerveza.