Fundada por pescadores en honor a la patrona de Comillas, dicen que solían rezar antes de empezar la faena en este edificio tan sencillo y que a mí me recordó a Méjico sin haber estado en Méjico, con lo que no sé bien de dónde saqué la idea. Tal vez fuera el encalado luminoso o la planta sencilla, pero me recordó al mal llamado estilo colonial. De cualquier modo, es un bonito lugar para disfrutar de las vistas de la costa, al formar un pequeño mirador en lo alto donde es posible ver un buen atardecer.