Voramar

ACTUALIZACIÓN: Como ya dije en mi comentario original, el sitio era perfecto para desayunar mirando al mar y engancharte a su wifi mientras tanto. La última vez que fui (y seguramente sea la última durante mucho tiempo) pedí un menú desayuno y pregunté si podían activar los enchufes del exterior puesto que necesitaba enganchar mi portátil a la red eléctrica. Después de una mirada un poco extraña, oí como el camarero le comentaba al de la barra que «deberíamos empezar a cobrar un poco más por los chupawifis» y así fue, en vez de pagar mis 2,50 € por mi café con leche + tostada me aumentaron el precio a 2,80 €. Ni me molesté en reclamar, por mi parte ya han perdido un cliente.
ORIGINAL: Entré a esta cafetería porque iba en busca de un lugar donde, además de tener Wifi sin restricción de tiempo, tuviesen enchufes para poder conectar mi Macbook y no preocuparme por si se me terminaba la batería.
El lugar como tal está muy bien montado para el verano, con sus mesas con sillas anchas y cómodas, su pequeño chill out pegado al paseo marítimo y con dos sillones colgantes la mar de cómodos que me recuerdan a la silla Ovalia, pero colgante.
Una de las pegas más grandes que le puedo echar a esta cafetería es la calidad de su café. No sé si es porque el camarero no era español o porque lo hacen así, estaba completamente aguado y no sabía apenas a café. Quitando de esto, el sitio está genial para tomar una cerveza por la tarde o un desayuno (recuerda pedir zumo, café caca) y poder tomártelo mirando el mar.
Además de bebidas, tienen una carta de platos de pasta perfectos para comer/​cenar de paso y seguir disfrutando de la calidad de las aguas de las playas de Calpe. Llegué sobre las seis y media y a eso de las ocho de la tarde ya había gente cenando y me percaté que los platos son generosos, no te vas a quedar con hambre.
Pude contar cuatro enchufes accesibles desde cuatro mesas distintas (son las que están al lado de los pilares de aluminio), si vas a estar allí un tiempo haciendo cosas con tu ordenador, aprovecha y si hay alguna de esas mesas libres siéntate en ella. ¡¡Están muy cotizadas!