Mirablau

Hace poco vinieron mis padres unos días a Barcelona para verme y, ya de paso, hacer turismo por una ciudad a la que tienen mucho cariño pero que no visitaban desde hacía más de treinta años, en su luna de miel.
Según mi planning de actividades, el primer día tocó ir al Tibidabo y, a la vuelta, al bajar del funicular, qué mejor plan para comer que hacerlo justo allí, con todo Barcelona a nuestros pies. El Mirablau nos pareció la mejor opción, ya que en Unilocal tiene buenas puntuaciones.
Acierto total. Nos encantó todo. El personal es extremadamente amable y profesional, las vistas son espectaculares, el local, sencillo y limpio, y la carta es bastante variada.
Estuvimos en la plata de arriba, la que está nada más entrar, pero pasamos por la planta inferior para ir al baño, y es chulísima. Destinada más bien al copeteo, tiene una barra a lo largo del gran ventanal a través del cual se ve toda la ciudad, al igual que en la planta de arriba.
Para compartir pedimos unas bravas, unas coquetas y pan con tomate. Como plato principal pedí los canelones de espinacas con salsa romescu. Estaban buenísimos. Todo muy rico y muy bien presentado. Las raciones no son muy abundantes, eso es verdad, pero nosotros no somos de comer mucho, así que genial.
De postre pedimos el tartín de manzana. No estaba mal, pero es lo que menos me gustó de la comida. A la hora de pagar, tocamos a menos de quince euros por cabeza, algo que me parece totalmente razonable teniendo en cuenta el lugar donde se encuentra.
Un comienzo de vacaciones estupendo.

¿Quieres una comida o una copa con vistas a toda Barcelona? Éste es tu sitio.
La comida es aceptable pero tampoco es un sitio especialmente reseñable por eso. Lo genial es venir a tomar algo relajado junto a la cristalera en invierno o en la terraza si hace buen día, una buena charla y disfrutar de las preciosas vistas de noche o al atardecer.

Es la tercera vez que voy y en esta ocasión más especial que nunca. Nueve añitos con mi halflemon se merecen una celebración por todo lo alto. Así que se nos ha ocurrido que era un buen sitio para ir a tomar unas copas. Tiene una vistas increíbles y casualmente hemos llegado a la hora justa (sobre las 16.30h) porque a partir de ahí se ha llenado de manera sobrehumana. Con el frío que hace hemos preferido estar dentro (aunque tengo que decir que cuando había mucha gente, entre el bullicio y la música de hilo musical había mucho ruido en general). Se echa de menos un poco más de intimidad porque teniendo a barcelona a tus pies ¿Que más se puede pedir? Bueno, que sea menos caro porque las vistas las pagas más que de sobra. No obstante no hay sitio más bonito para ir a tomar algo (aunque mejor en la terraza con el buen tiempo)

La verdad es que ya había venido a este sitio, y está vez es la tercera. Y eso que dicen que a la tercera va la vencida, pues en esta ocasión es un día muy especial porque celebro el noveno aniversario con mi mujer.
Y que mejor sitio que el bar con mejores vistas de todo Barcelona.
Un sitio ubicado en Tibidabo con ventanales enormes para ver una increíble panorámica de la ciudad de Barcelona.
Un lugar privilegiado sin duda, y hasta con un toque romántico si vienes a ver las últimas horas de sol con tu pareja.
Unas copas, algo de comer (no he probado nada pero los montaditos tienen muy buena pinta)
Hay abajo también como una planta que hace de minidiscoteca y pub por si se hace tarde y quieres menear el esqueleto un rato.
Y para verano, tienen una terraza genial que se accede por la planta inferior con las mencionadas vistas, unas velitas para ambientar y darle un toque más íntimo, y buen aire fresco ideal para las altas calores.
Como puntos negativos aunque en cierto modo es normal por su ubicación son los elevados precios, y que estaría mejor que fuera aun más íntimo y menos ruidoso.
Pero en general los puntos buenos son muchos y creo que compensan los malos, con lo que podemos recomendarlo perfectamente y con buena nota.

Un sitio bastante especial para compartir, ayuda a soñar, es práctico para reír…
Bueno para mí es encantador

A spectacular view and pretty good food (not the best, but pretty good). Don’t miss this place if you are in Barcelona.
The tapas is good and the Mirablau salad is fantastic.
Highly recommend it.

Food was mediocre, but the view was great. Jamon was much better elsewhere. The gin drink was especially good. Would recommend just grabbing drinks around sunset and moving camp for a nicer dinner.

Great place to stop and have lunch when you visit tibidaba. Tapas are very good and prices are cheap. Views are amazing. Must get the Russian salad. Very delicious.

The view from the restaurant is amazing. The food is so-​so. Had the Pan Con Tomate which was served cold and soggy. Hubby had some chicken, walnut salad something. The salad seemed like it was from a package mix and parts of it had gone bad and were a little slimy. We didn’t complain (which we should have) but the waiter also didn’t comment on the fact that only 3 or 4 bites were taken. I expected he would ask if it was ok since the majority of it was still in the bowl when he took it away.

Mirablau es un lugar especial, no sólo por su privilegiada ubicación si no también por las increíbles vistas de la ciudad que ofrece.
Es un local amplio, de dos plantas, en la principal puedes tomar algo tranquilamente sentado en una de sus mesas o bien en la barra-​mirador tan especial que disponen, donde puedes sentarte en un taburete y deleitarte gustosamente las vistas de la ciudad.
En la planta baja disponen de discoteca, de la cual no puedo profundizar en detalles puesto que cuando he ido he estado arriba disfrutando de las vistas y copa en mano.
El precio, no es barato precisamente, pero ya se sabe, la ubicación y las vistas, se pagan.
Buen sitio para sorprender y perderse entre las luces de la ciudad al anochecer.

MIrablau es para ir bien acompañado, dicen que es un sitio de pijos, como digo yo siempre, es que estamos en su zona… esto es la zona alta de barcelona. Sinceramente, te sentirás como un pijo más, con unas vistas espectaculares de nuestra ciudad y si te sientas en la terraza, guauuuuuuu una sensación muy chula. El precio, bueno, para la zona dónde está y las vistas que tiene, es más que razonable. No dejéis de ir al mirablau un día, daos ese capricho.

Wie Daniel Brühl schon schrieb: Ein Klassiker, gastronomisch nichts besonderes, aber mit einer Glasfront, die eine der schönsten Panoramasichten auf Barcelona überhaupt preisgibt. Dem schließe ich mich uneingeschränkt an.

Il faut absolument passer par la ! Il y a plein de bars et restaurants avec cette vue à couper le soufflé !

das habe ich 2010 geschrieben (5 sterne):
von dieser bar auf dem tibidabo hat man den blick aufs meer, auf den montjuic und auf den erst von Barcelona dann also sowieso es ist atemberaubend.
der weg ist etwas umständlich. die nächste metrostation ist 15 gehminuten weg, ein bus fährt nicht. die letzte Metro fährt schon um mitternacht, aber es lohnt sich.
auch, wenn Mitternacht erst die guten djs kommen, auch oft live– musik. :)
es ist zwar gehobene preisklasse (3cl baileys 8EUR), aber man zahlt das ambiente eben mit.
gar nicht tourilastig, weil es viele nicht kennen, die terrasse einfach ein Traum und in der kalten Jahreszeit kann man auch am Tresen sitzen und rausgucken und über gott und die Welt reden, weil die front vollkommen verglast ist.
einmal entdeckt, träumt man immer wieder von diesem ort, wenn man nicht mehr da ist.
unbedingt hingehen, verzaubern lassen und träumen.
das schreibe ich 2012:
man kann sich also doch verschlechtern, obwohl man die besten vorrausetzungen hat, dies nicht zu tun.
schlechte cocktails für 10EUR ein stück.
alles kaum bezahlbar.
sangria aus dem tetra pack.
ab 19uhr für alles die doppelten preise.
scheiß bedienung.
kaum platz.
toiletten sind nicht die saubersten.
scheiße. :(
schade. :(

I’m giving this place 5 out of 5 because of the view. It was just perfect. With it being our honeymoon, the ambiance fit perfectly. Highly recommend this place to out of towners. Its worth the hike up the hill or a cab will do. After your last sip of your cocktail, head over the the lamb restaurant down the hill — you won’t be disappointed!!!

Granted, the views from atop Tibidabo are splendid — but here you can sit on a shady veranda and literally hang over the city with a beer. Sorta hard to top.
They feature live jazz in the evening. On a hot summer night in BCN, this is where to be.
We enjoyed cheese and olives and sucked back a cool beer on a clear afternoon. Wow. Mellow hardly describes it. After the tram ride down, and before crossing the street to enjoy a meal at La Venta — this is the place.
Highly recommended.

La ubicación del local, es privilegiada. Las vistas de la ciudad, increíbles, especialmente al atardecer, desde los ventanales… birra en mano…
Empecé a ir por allí, a mediados de los años 80, cuando solía ir a una discoteca que hay un poco más abajo (Rosebud). Primero con los coleguillas, nos tomábamos algo en el Mirablau y más tarde bajábamos a la disco en cuestión. Otras veces, seguíamos la juerga allí, ya que en la planta inferior tienen pista de baile y unas terrazas ajardinadas estupendas para tomar un poco el aire…
Todavía me acerco de vez en cuando y muestro el lugar a mi gente de fuera de Barcelona, sencillamente, porque vale la pena.

Quiero ser Gulliver en Lilliput.
Fui dos veces. La primera, cuando trabajé como camarero, y la verdad, es que flipé con la vista que tenía. La gente muy amable y la verdad que había poca faena, y eso me permitió disfrutar un poco más de la vista de Barcelona. ¡Una pasada!
La segunda, fue de marcha. Veníamos con unos colegas de una cena, y queríamos hacer algo diferente, y llegamos al top of the hill. Como los Beatles en el Loco de la colina. Queríamos vivir sensaciones nuevas, y recordar aquellos días de desenfreno juvenil, y esta impresionante panorámica de la ciudad condal, te hacía regresar al pasado.
Uno se ve crío y se siente gigante, como un Guilliver en Lilliput, y todo ese pueblo de pequeños habitantes, que quieren apresarlo.
En el Mirablau, me sentí libre y respiré profundo, cerré los ojos. Luego de un momento, los volví a abrir. La ciudad cada vez se veía más pequeña y cabía en la palma de mi mano.
Aquella noche con mis amigos queríamos jugar, volver a sentir que la infancia no se ha ido, que aún está igual donde la dejé hace años, quise ser Gulliver y parece que por un momento lo conseguí. Todo tiempo pasado fue mejor, según dicen. Y esa noche, yo lo comprobé.

La última vez que me llevaron al Mirablau fue en un Mercedes biplaza. ¡Ja, ja! Un medio de transporte en máxima consonancia con el lugar. Es que es así, digamos las cosas por su nombre: el Mirablau es un sitio de pijos y gente bien. No pasa nada. Es así y ya está. Tiene ese aire de exclusividad que te puede gustar o no, pero hay que reconocer que las vistas a la ciudad son bastante espectaculares. Además, no deja de ser un sitio mítico del que todos hemos oído hablar alguna vez y seguro que a más de uno le pica la curiosidad. Pues id, hombre, id. Os sentáis en la ventana-​mirador (o en la terraza, si es verano), os pedís una cerveza, disfrutáis de la vista o jugáis a identificar los edificios de la ciudad, pagáis los 4 euros con dignidad y os vais. ¿Que os animáis a quedaros un rato más? Pues que sepáis que abajo hay pista de baile. ¡Fiestaaa!

Con más de 20 años de experiencia, el Mirablau se ha posicionado como uno de los restaurantes más visitados por aquellos extranjeros que quieren disfrutar de la vista panorámica de toda la ciudad condal.
Sus platos están bien, tampoco disponen de gran variedad, pero los precios son más que razonables, sobretodo teniendo en cuenta la zona en que se encuentra.
Realizan eventos en los que puede alquilarse el restaurante entero o sólo una de sus salas, pero son bastante poco recomendables, sobretodo el de Fin de Año: parece que vendan más entradas de las que pueden, el servicio de guardarropía es casi inexistente y el trato con el cliente deja bastante que desear.

Un bar à cocktails situé sur la colline de Tibidabo qui offre une des plus belles vues de Barcelone: Sagrada Familia, la mer, Montjuïc… Cependant, le service et les cocktails né sont pas à la hauteur de cette magnifique vue… Il y a une piste de danse à l’étage inférieur. Atmosphère bien snobe pour une pauvre musique commercialeIl n’en reste pas moins que les gens ont un choc en découvrant la vue… Donc à étudier de près si vous êtes avec une amie ou des amis…

Vue magnifique sur Barcelone
Ce bar en terrasse situé sur la coline du Tibidabo donne une vue imprenable sur Barcelone lieu agréable où l on peut contempler la vue. Idéal à la tombée de la nuit pour une vue de barcelone by night et pour ceux qui veulent bouger en bas se situe une petite piste de danse. Assez difficile d’accès par les transports en commun mais cela vaut le coup, on y passé un agréable moment en appréciant la vue, et en sirotant un petit verre commandé au bar.