Granja Elena

Ayer reunión en Santander hasta las 4am. Hoy despues de dormir 2 horitas, salimos a Bilbao para coger avión a Barcelona. Sin cenar ni desyunar, cansados. La mejor opción para recomponerse, un buen ‘esmorzar de forquilla’ a Granja Elena!!.

One of the best meals I had in Barcelona… Great piece of salmon with roe. Fantastic risotto.

Una delicia! Es un local en una zona no frecuentada por gente «de visita» ya que es industrial y despues de haber trabajado hace años por ahí, puedo decir que la zona es poco atractiva. No obstante este restaurante es OMG bueno! La carta cambia de forma diario, cocinan con productos de la temporada, gastronomia tradicional pero con toques modernos y sorprendentes! LOVE! No es un sitio barato, pero merece la pena probarlo — la media seria unos 45 – 50 € por persona. Abren solo los dias laborables durante la hora de comer; se recomienda reservar — siempre atope. Mi favoritos: las alcachofas en crema de butifarra negra con jamón iberico, el solomillo con foie y salsa de Oporto, etc… sueño con la próxima visita…

Pequeño local de excepcional calidad. Reservar. Varios platos premiados donde destaco la sopa de butifarra negra con crujiente de iberico y alcachofas confitadas. La carta de vinos selectos es uno de sus fuertes, así como destilados exoticos para rematar o el café con D.O. Para desallunar ofrecen una amplia variedad de planchados muy elaborados a los que no me atrevo a denominar bocadillos. €€€€

Si quieres pegarte el típico desayuno de tenedor auténtico o un bocadillo con pan de coca calentito, este es tu sitio!

Amazing food and service. The waitress took the time to explain and translate the options and gave us superb recommendations. Started with deliciius anchovies and tomato bread, then melt in your mouth scallops on tomato tartar, then braosed lamb in tomato sauce and finally another lamb dish. Best lamb ever.

La cocina, solo es mejorada por el trato.
No tardaras en tenerlo entre tus favoritos.

Cocina excelente. Un lugar sencillo, que parece un pequeño bar, pero que la carta es completamente exquisita.

Reconozco que mi trabajo es un lujo. Me permite conocer a gente interesantísima que me lleva a comer o cenar a sitios de aquellos que dices «pero ¿y esto?». Os explico como fue una de estas veces. No diré con quien iba, pero era un grupo de actores, guionistas y tal. El más «fashion» de todos nos llevó de la mano a un local que, según iba diciendo en el coche: «vais a alucinar».
Y vaya que si alucinamos. Nos llevó a una granja. No de campo, no. Un localito de esos de meriendas y desayunos de cuando era pequeña. De chocolatito caliente con nata, vamos!
En la Zona Franca, que dices… pues no se yo si aquí se comerá bien!
Para más «inri», cola en la calle. Y cuando pudimos entrar, nos sentaron a 8 en dos diminutas mesitas de fórmica. LAunque lo de sentar, es un poner. Mejor sería decir que nos embutieron al vacío a los 8 en un mini espacio entre la pared y la puerta. Claro, yo pensé que era un timo. Pero de eso nada! La Granja Elena es sencillamente excepcional. Ruidoso, estrecho, incómodo, si! Pero una de las mejores cocinas de Barcelona, sin lugar a dudas
Recomiendo dejarse llevar por las sugerencias de la casa. Lo de cocina de mercado es 100% verdad. Los platos se hacen dependiendo de la temporada. Como antes.
Recomiendo llevar dinero. Será pequeño y llevará el nombre de «granja» pero de barato no tiene nada. Lo bueno se hace pagar, ¿no?.
Recomiendo reservar. Mejor de un día para el otro.
Y recomiendo, antes de ir, empaparse del «quien es quien» de la ciudad. Te quedarás con la boca abierta reconociendo a altísimos ejecutivos, famosos empresarios y más de cuatro personajes de esos que salen en las revistas, haciendo cola como tu o sentaditos a tu lado compartiendo estrecheces.
Y eso, a ellos los hace más humanos y a ti más divino/​a.