Vips

La verdad es que una vez que comes las hamburguesas de Mad Grill, el resto son indignas…
Hacía tiempo que no iba a un VIPS, y puede que porque lo tenía idealizado, o porque entre medias he descubierto Mad Grill, o por una mezcla de ambas, pero la experiencia fue, más bien, mediocre.
Pedí una no sé qué nombre con huevo, pepinillo y toda clase de aderezos; la más grande de la carta, que no se diga que el vasco no tiene saque. Pero la carne era bastante insípida. Un taco de un cm de grosor de cartón prensado. Bastante mal.
Las patatas que acompañaban la burger eran de vergüenza ajena. Eran como unas patatas que hayan pasado la travesía de los 40 años en el desierto: raquíticas, hasta el punto de que daban pena.
Lo mejor: las croquetas. Muy ricas y con cebolla frita de acompañamiento. La atención también fue correcta: rápida y amable.
En fin: VIPS, tienes mucho que mejorar.

Este restaurante de la cadena vips es normalito tirando a malo.
El servicio es lento, sólo decir que entramos a las 14:45 y salimos a las 16:30 de comer (y no comimos precisamente despacio).
La ensalada Lousiana que pedimos estaba realmente buena aunque tardó en llegar…
Pedimos dos hamburguesas que para empezar no se correspondian exactamente con lo que pedimos respecto a ingredientes. Y lo mas importante estaban muy hechas cuando no le habíamos indicado eso. De hecho no nos preguntaron como queriamos la carne…
Seguramente no volveremos