Los Tesoros del Inca

Un buen lugar donde comer un ceviche rico, es muy amplio y el servicio por lo general es muy rápido ya que no se llena en la ahora de almuerzo durante la semana.
Les aconsejo que igual hay que ir con tiempo ya que su carta tiene innumerables platos donde elegir, es como la Biblia.
Aconsejo que siempre pidan recomendaciones si van apurados.

Entre las incontables propuestas de comida peruana en Santiago tal vez este restaurante no sea el mejor, sin embargo por mi experiencia se que cada restaurante peruano tiene un plato que destaca y convierte al lugar en una excelente opción.
En este caso el plato a destacar es el Lomo saltado, trozos de suave lomo salteado en soya al wok, acompañado de arroz y papas fritas.
Este plato peruano de influencia asiática es servido perfectamente y en abundancia, siempre con la carne a punto o como prefieras, verduras frescas y papas fritas súper crujientes.
Sus precios económicos en relación a otros restaurantes del sector lo convierten en un lugar ideal para ir en familia o para darse un gusto durante la hora de almuerzo ya que cuenta también con un llenador almuerzo ejecutivo.

El local es espacioso y tiene carta llamativa, mezcla sabores peruanos, influencia oriental y algunos infaltables en todo restaurante. Cuando la leí completa debo decir que captó mi atención el ceviche de pulpo, nunca lo había probado, así que decidí arriesgarme y ver que tal se venía.
Cuando llegó el plato a la mesa primer shock! Se pueden distinguir perfectamente los tentáculos jajaja… si eres escrupuloso quizás este no sea una buena opción para pedir, pero si eres capaz de bloquear eso, el sabor es exquisito, estaba todo muy fresco, los acompañamientos del ceviche (choclo peruano, cebolla morada, la yuca) nada que decir perfectos, si eres de los que se arriesga con platos poco tradicionales te lo recomiendo al 100% pero tranquilos que también tienen muchas otras cosas que ofrecer como sus clásicos papas a la huancaína, ají de gallina, suspiro limeño y pisco sour. Es una buena elección para juntarse con algunos amigos o con tu pareja y terminar una pesada semana laboral.